jueves, 12 de junio de 2025

Reseña El maestro de azúcar, de Mayte Uceda.

 




        

            


                           





Datos técnicos:





Título: El maestro de azúcar.

Autora: Mayte Uceda.

Editorial: Planeta.

1ª edición: Enero/2024

3ª edición: Marzo/2024.

ISBN: 978-84-08-28235-8.

Encuadernación: Tapa dura con sobrecubierta.

Idioma: Español.

Nº páginas: 512.





Sinopsis:





Norte de España, 1895: dos mujeres abandonan la apacible villa de Colombres para viajar a la lejana isla de Cuba. Sus motivos no pueden ser más distintos.
Mar, la hija del médico del pueblo, emprende la travesía siguiendo a su padre, encargado de dirigir un consultorio en una plantación de azúcar llamada Dos Hermanos.
Paulina, viuda demasiado joven y de origen humilde, se ve obligada a embarcar para contraer matrimonio con el prestigioso maestro de azúcar de la hacienda, un hombre a quien no conoce.
La primera sueña con ser médico; la segunda se pregunta si será feliz con su inminente esposo.
Dos jóvenes unidas por el mismo destino que emigran por amor y lealtad a la familia.

Una isla exótica que oculta bajo su luz antiguos odios y venganzas. Todo ello a las puertas de la Guerra Necesaria, que dará a Cuba su independencia.






Opinión Personal:







El guardián de la marea (reseña) fue la primera novela que leí y reseñé de la escritora asturiana Mayte Uceda, en octubre de 2021. Me resultó una lectura muy atractiva y por eso me dije que merecía la pena leer la nueva obra que publica de nuevo con la editorial Planeta, El maestro de azúcar. Y ya lo creo que la mereció. Es para disfrutarla. Sin duda alguna, la portada y la sinopsis ya son un buen reclamo para el lector. Un lector que se encontrará de nuevo con una trama muy potente, que lo transporta a uno de los últimos reductos del imperio español: Cuba. Una trama ambientada en una época convulsa, porque los movimientos que hay en esta isla caribeña presagian un nuevo conflicto. Esta vez se teme que sea el definitivo, sobre todo si entra en escena Estados Unidos. Es la que los cubanos conocen como la Guerra Necesaria.

El maestro de azúcar nos lleva a una época en la que se presiente que los ingenios de azúcar tienen sus días contados, la gran mayoría de ellos propiedad de españoles emigrados a este exótico país. Un país en el que la esclavitud ya es historia, si bien la mayoría de los africanos que fueron apresados como esclavos en su país de origen para venderlos al mejor postor, o sus descendientes, no se acostumbran a vivir en libertad. Como se refleja en esta ficción, ahora trabajan por un paupérrimo salario, con el añadido de que las condiciones en las que viven siguen siendo similares, porque todo son promesas, porque sus reclamaciones de mejora de salarios caen en saco roto. 

(Colombres, Asturias)
Mayte Uceda planifica y desarrolla una trama que no da lugar a tregua. Una trama conformada por 57 capítulos, más un prólogo, y cerrada con un magnífico colofón, el epílogo, que me encantó. Sin duda alguna, este último es un reclamo más para atraer a quienes sientan interés o curiosidad por conocer las historias de Mar Altamira y Paulina. El destino lleva a estas dos jóvenes desde su pueblo, Colombres, en la provincia de Asturias, a un país en el que no saben qué se van a encontrar y, sobre todo, cómo es en la realidad la persona con la que Paulina va a contraer matrimonio. El destino de Mar Altamira es diferente, porque sigue la estela de su padre Joaquín, que fue contratado para ser el médico que esté al frente del dispensario de la hacienda. Ella está acostumbrada a trabajar con su padre y eso es lo que quiere seguir haciendo.

Si en El guardián de la marea el contexto histórico tiene una mayor fuerza frente a los elementos propios de ficción romántica, en mi opinión entiendo que éstos están más ensombrecidos si cabe en El maestro de azúcar. Pese a que las dos protagonistas citadas en el párrafo anterior parten con un objetivo concreto hacia la isla caribeña, los hechos históricos que afectan a la isla, a cuya deriva se ve abocada la hacienda, presagian que a sus moradores les espera un incierto desenlace, en el que los giros inesperados están muy presentes.

Un gran atractivo de esta novela es la ambientación histórico espacial. En todo momento sentí que realicé un viaje literario imaginario a la Cuba de finales del siglo XIX y estuve muy pendiente de todas las vicisitudes que acompañaron a los personajes en este período convulso que les tocó vivir. Una ambientación en la que también están muy presentes las costumbres de la época. Costumbres que me llevaron a Colombres, en la provincia de Asturias, en donde seguí con interés el encargo que recibe Frisia Noriega, esposa del propietario del ingenio de azúcar cubano, Pedro. Este personaje femenino lleva una carta del maestro de azúcar que le confiere el encargo de buscarle una esposa, y en donde me encontré con una serie de situaciones que presagian alguna variación en la petición. En la isla caribeña el narrador omnisciente ofrece, bien de forma directa o a través de conversaciones que mantienen los personajes, información sobre la situación que vive el país, porque presienten el conflicto armado que cada vez  más próximo, y que, con el paso de los capítulos, sus ondas llegarán hasta este ingenio azucarero. Una información en la que también se hace referencia a conflictos anteriores, como las llamadas Guerra Chica o Guerra Grande. Ya en la colonia, los recién llegados admiran el colorido del paisaje que les rodea, al igual que los ornamentos florales que embellecen la hacienda, sin olvidarme de la variedad de nuevos sabores y olores a los que se tienen que acostumbrar. En este sentido, la autora cuida con esmero hasta el mínimo detalle, consciente del papel que desempeñan algunas plantas en la trama, por los efectos que producen su ingesta. Y es que, pese a lo mucho que insiste el padre Miguel, los ritos católicos conviven con las divinidades paganas de los antiguos esclavos, alguno de ellos practican la magia negra, como se  podrá comprobar en algunos episodios.

(Ingenio de azúcar, Cuba)
El maestro de azúcar contiene una historia verosímil y realista, en la que me encontré con escenas crudas y sobrecogedoras, pero también episodios emotivos en los que los sentimientos están muy a flor de piel. Historia verosímil y realista muy de acorde con el elenco de personajes que transitan por las poco más de 500 páginas que conforman esta novela. Personajes perfilados con mucha fuerza, ricos en matices y que parecen actuar con vida propia, en los que la autora se fija hasta en los mínimos detalles físicos y psicológicos que los caracterizan. En mi opinión, y pese a que la sinopsis toma como referencia el viaje a Cuba de Mar Altamira y Paulina, diría que estamos ante una obra coral, porque están flanqueadas por unos secundarios que tienen mucho peso en la trama. Mayte Uceda describe con detalle la responsabilidad que tienen cada trabajador en el proceso de la elaboración del azúcar, al igual que también pone el foco en los trabajadores de color que realizan las labores más duras, o de los domésticos que están al servicio de la hacienda o de los empleados de mayor rango que viven en las casas que se habilitaron para ellos en este complejo. Son personajes inolvidables, muy en consonancia con la trama de la novela. Los hay con muy mala uva, por decirlo de una forma suave, como la ya citada Frisia, su hijo Pedrito, o el mayoral Diego Camblor o el guardián de la patrona, Orígenes. En el otro plato de la balanza sitúo a las dos jóvenes santanderinas, Basi, la criada de la familia Altamira, Víctor Grimani -el maestro de azúcar- o Justino Altamira, y su labor como médico del dispensario de la hacienda. No me olvido de quienes trabajan como domésticos en la hacienda, antiguos esclavos que ahora es el escalafón más alto al que pueden aspirar en este microespacio, como la cocinera Mamita, su esposo Ariel, la niña Solita -cuya presencia no deja indiferente-, que acompaña a todas partes a Mar Altamira. Ocupa un lugar intermedio  Mansa, el curandero de los barracones.

Mayte Uceda tiene un estilo narrativo elegante, cautivador. A través de un narrador omnisciente relata los episodios que protagonizan los personajes que conforman el elenco de El maestro de azúcar con un estilo directo y muy cuidado. Un estilo en el que tiene muy en cuenta las circunstancias de lugar y tiempo en el que se desarrolla la trama. Un estilo con el que también cuida el habla de los personajes, al igual que la condición social de cada uno y, en este caso, el particular empleo del castellano por quienes fueron hasta hace poco esclavos de la hacienda. Unos diálogos que muestran con claridad las diferentes situaciones que viven los personajes, sobre todo en las que la tensión narrativa está muy latente. Una tensión narrativa en la que el tono empleado indica que puede haber algo más que palabras, porque a medida que se acerca el desenlace el momento que se vive en la hacienda, al igual que en el resto del país, es muy conflictivo, episodios funestos incluidos.







Biografía:






Mayte Uceda (Asturias). En el año 2009, impulsada por el deseo de escribir historias, comenzó su primera novela, Los Ángeles de La Torre, un romance con tintes paranormales que autopublicó en 2013 y que tuvo una excelente acogida. Un amor para Rebeca (2014) se mantuvo más de un año entre los más vendidos de Amazon y fue traducida al inglés y al alemán. Alicia y el teorema de los monos infinitos (Planeta, 2016) fue publicada en Italia, Alemania y, recientemente, en Bulgaria. El guardián de la marea (Planeta, 2021) es una emocionante historia de amor que cruza océanos y transcurre entre las dos grandes guerras del siglo XX superando todo tipo de adversidades. Mayte estudió Informática de Gestión y Educación Social antes de convertirse en escritora. En la actualidad vive con su familia en un pueblo marinero del norte de España.


Notas: Datos técnicos, sinopsis, biografía y fotografía de la autora tomados de la web de Planetadelibros. Imagen de Colombres, en Cantabria, tomada de la web Barcelo. Imagen de un ingenio de azúcar en Cuba, tomada de la Wikimedia Commons. 

2 comentarios:

  1. Hola Francisco, no la conocía. Excelente reseña. Gracias por compartirlo. Un abrazo

    ResponderEliminar
  2. Me gustó mucho también El guardián de las mareas y por lo que cuentas de esta novela, creo que la disfrutaría mucho también. A ver si logro colarla.
    Besotes!!!!

    ResponderEliminar