Sinopsis:
Esta
historia empieza con un gato llamado Tesoro.
Aunque,
como empieza de verdad, es con la chica que le gusta al chico que
cuida de Tesoro.
Y no
es una historia de “chico conoce chica…”, porque Sergio y Sofía
ya se conocen, mucho; de hecho fueron novios en el instituto. Pero
han pasado diez años sin verse. Y ahora viven de nuevo en la misma
ciudad, y a él se le ha ocurrido mudarse al mismo edificio, y
visitarla en el trabajo cada dos por tres... Y su vecino tiene un
gato, y viaja mucho, y precisamente durante uno de esos viajes
empieza esta historia.
Fin de
semana del 25 de julio de 2010. Año Santo Compostelano. La ciudad de
Santiago llena de peregrinos, turistas y paisanos dispuestos a
festejar día y noche.. Y unos intrusos intentan entrar en casa del
vecino del gato. Y todo termina por liarse...
Sorpresas,
robos, persecuciones, diamantes en bruto, amigas bienintencionadas,
novios olvidadizos, policías mosqueados, extranjeros sospechosos,
gatos desquiciados, familiares extravagantes, sol, playa, pimientos
de Padrón, tarta de Santiago…
Y
Sergio y Sofía… que ya no pueden resistirse más a su destino.
Monólogo:
Cuando
vi la novela que tenía en mis manos no me lo podía creer. La
portada me hizo dudar. ¿Me han enviado una novela equivocada?.
Porque yo quería una novela romántica-histórica ambientada en el
siglo XIX, en su querido siglo XIX, como así le llama mi paisana
Teresa Cameselle pero miro y remiro la portada, leo y releo la
sinopsis y me pellizco. ¡No puede ser!. Esta no es mi Teresa, que me
la han cambiado. ¿Y ahora qué hago?. ¿Y si no me gusta?
El
título ya me deja un poco mosca: No
soy la bella durmiente.
Y yo tampoco. A mis años leo otro tipo de cuentos. Y que no me
malinterprete nadie, claro. Érase una vez... . Noooo. Si es
lo que yo digo. Pero, espera, aquí hay algo que me suena: percebes
(en fin, prefiero nécoras, aunque unos alemanes que Teresa menciona
en la novela piden unas ídem y no saben cómo hincarle el diente).
Lo que viene a continuación me gusta más: empanada, cerdos
domésticos, cañas destiladas en los galpones traseros (cañas pero
de esas que se toma uno una copa y echa fuego por la boca como si de
un dragón se tratase) y aquello tan nuestro de que se encuentran dos
gallegos en una escalera y le pregunta uno a otro: ¿Subes o bajas?
Ya la cosa me tranquilizó más. Luego vino la palabra mágica:
Santiago de Compostela. Y, el apellido, el 25 de julio. Miro el
calendario y ¡Año Santo!. La que habrá montado la autora mugardesa
para situar la historia en estas fechas, en una ciudad en la que no
cabe ni un alfiler. Turistas y peregrinos la toman literalmente.
Pero, en esta ocasión, veo que también hay personajes de dudosa
reputación. ¡Y resulta que los protas viven cerca de donde mi
familia tiene un piso!. ¿Y si entran a robar?. Tranquilo, que solo
es una novela. ¡Uf, menos mal!.
Porque
resulta que los protas, Sofía y Sergio, viven en la calle San
Francisco. Bueno, viven en el mismo edificio, o séase, cada uno en
su casa y Vicente, que también es otro personaje más de la novela,
vive también allí. ¡La que va a liar Vicente!. Y dirán los
lectores, chico conoce a chica. Pues, no. Ya se conocían pues habían estudiado juntos en el Instituto. Según
ellas, él está pa´ comérselo y, según ellos, ella pa´mojar pan.
Pero había un tercero en discordia. Un caribeño, Borja, que estaba
liado con Sofía pero, como el Borjita era un picapleitos que se
pasaba bastante tiempo allá en Venezuela con las caribeñas y sus
asuntos, va el Sergio y le levanta la novia. Y, claro,
se veía venir. ¡La parejita junta de nuevo!. Y, para recuperar el tiempo perdido, con derecho a roce. Y sus compis de
la agencia de viajes en la que trabaja, Carmela, Anabel y Mar, la
recepcionista, están que se comen con los ojos al traductor, a
Sergio, sobre todo Anabel que, cada vez que lo ve, le da cada trance
que no me veas.
Pero
tampoco tienen desperdicio Fifa y el Eros allá en la casa que tienen
en la playa de Cabío, en la Ría de Arosa. Bueno, tener la tiene
Fifa, o séase, la madre de Sofía. ¿Y Eros?. No. No es el
Ramazzotti. Es el jardinero de la madre, que vaya mojitos y paellas
hace.
Aunque
lo mejor es lo que le ocurre al Vicente. ¡Menudo el abuelo!. Porque
Sofia le quería como tal. Resulta que, como el abuelo vive de
alquilar sus pisos y la pensión no le da para gran cosa, pues está
metido en asuntos turbios y ahí es cuando aparecen los mafiosos. ¿Y
qué buscaban los mafiosos?. Pues cosas de la mafia, un tesoro. ¿El
gato? No. Ya se lo dije: un tesoro. Aunque tras la mafia anda la pasma, Interpol
incluida, ayudados por Hernández y Fernández, como así bautizaron
a los policías que querían trincar a los chorizos y, como quien no
quiere la cosa, Sofía y Sergio, o a la viceinversa, tienen que ir a
declarar a Comisaría para ver qué relación tienen ellos con el
asunto. ¡Ay, Vicente, la que has liado!
Pero
¿me puede decir de una vez qué pasa? ¿Es el Día de los Inocentes?
Porque que traficantes de tal calibre anden por Santiago en tan
señaladas fechas pues como que no es normal. Y con la seguridad que
se supone hay montada para que no haya incidentes graves en la ciudad
pues vienen las autoridades de turno a asistir a la ofrenda al
Apóstol en la Catedral. Para eso tiene que leer la novela y verá
cómo se la termina en un santiamén, porque, ¿sabe usted?, la
novela engancha hasta el final, es ágil y amena, distendida y tiene
retranca, faltaría más. Es una comedia romántica en la que no
faltan situaciones rocambolescas que nos harán sonreír en más de
una ocasión. Eso sí, la autora es fiel a su estilo aunque, claro,
adaptado a la situación. Yo me divertí con su lectura. Espero que
usted también, lector, porque si conoce Santiago, pues se paseará
por El Franco, la Praza do Obradoiro, la Alameda, y la zona del
Ensanche, sin olvidarnos de la playa mencionada que, aunque el agua
está un pelín fresquita, para ciertas ocasiones pues es un alivio.
La
autora:
Teresa
Cameselle (Mugardos, 1968 –A Coruña), vive actualmente en Ferrol.
Ha
publicado relatos en tres libros conjuntos con otros autores, entre
ellos en el libro del Premio Acuman, en el que fue finalista en 2006
y
en julio de 2007 fue finalista del premio de novela por entregas de
La Voz de Galicia. Además de La
hija del cónsul, publicó
No
todo fue mentira(novela
romántica),publicada
en junio de 2011 por el sello editorial El Maquinista yFalsas
ilusiones,
(novela corta, también romántica histórica) ha sido publicada en
el sello Zafiro Ebooks de Editorial Planeta, en el mes de abril de
2012.El
mapa de tus sueños es
su tercera novela publicada, esta vez bajo el sello Phoebe de
Ediciones Pàmies.
Datos
técnicos:
Título:
No soy la bella durmiente
Autora:
Teresa Cameselle
Ediciones
Pàmies (Sello Phoebe)
1ª
Edición: enero de 2014
ISBN:
978841543378
Nº
páginas: 269
Fuentes: Sinopsis, datos técnicos y fotografía de la autora, tomadas de la web de la editorial. Imágenes de: tapa de pulpo y albariño, calle San Francisco, playa de Cabío y Alameda de Santiago tomadas de google imágenes.
Gracias a la editorial por la remisión del ejemplar de la novela para su reseña.