Sinopsis:
Septiembre
de 1940. Durante la batalla de Inglaterra, cuando Londres sufre los
más feroces bombardeos de la Luftwaffe, circula por el mercado negro
una estatua robada, la cabeza de Diana. La policía sospecha que
puede haber caído en manos del espía alemán más esquivo y
peligroso, apodado en clave el Barón.
Emma
Wells, una experta en arte antiguo de Oxford, es reclutada para
buscar e identificar la cabeza de Diana en Londres. Pero no persigue
sólo la estatua, sino a un antiguo amor.
No
sabe que su indagación la enfrentará a tahúres, asesinos, nobles
decadentes, la más radiante amistad, un capitán español... y a sus
propios miedos y anhelos. Va a conocer “todos los rincones de los
bajos fondos donde el pecado tenía una oportunidad”.
Relato
de aventuras, historia detectivesca, secreta historia de amor y
fábula sobre las pasiones que labran nuestra vida, esta novela
ofrece un deslumbrante mosaico del momento histórico y una reflexión
sobre la eterna lucha entre el deseo y la realidad.
Opinión
Personal:
Dos
son los hechos históricos en los que se basa el autor para escribir
esta novela: el descubrimiento de la cabeza de Diana en una parte del
anfiteatro romano de Itálica (Santiponce, Sevilla) y la llamada
Batalla de Inglaterra en donde cazas y bombarderos alemanes tenían
el objetivo, mediante ataques aéreos en masa, minar la resistencia y
moral de los británicos. Tras el desgaste ocasionado por estas
incursiones pretendían llevar a cabo la posterior invasión de las
islas británicas, pues veían que eran el único pais capaz de hacer
frente a la potente maquinaria de guerra alemana. La fecha clave que
supondría el fracaso de las intenciones germanas, el 15 de
septiembre de 1940, coincidía con el desenlace de la trama de esta
novela. Los hechos en ella relatados duran, precisamente, una semana.
El
inspector de policía de Scotland Yard, Roger, se traslada a Oxford
en busca del profesor Makenzie. Necesitan un experto en escultura
romana, que sepa si una pieza es inédita, que no está
descatalogada. Al hallarse éste ausente, Emma Wells, la secretaria
del arqueólogo, se ofrece para colaborar pese al peligro que corre
al tener que desplazarse a Londres, que estaba siendo bombardeada
continuamente por los alemanes.
Siempre
asociamos el thriller, ya sea en forma novelada o cinematográfica,
al ritmo trepidante del mismo. Este que hoy reseño, sin embargo, es
un caso atípico, pues nos encontraremos con una lectura de un ritmo
lento, pausado, debido a la riqueza de recursos lingüísticos
utilizados por el autor, tanto en las descripciones como en las
reflexiones que nos iremos encontrando a lo largo de las 330 páginas
que conforman la novela. Francisco Granado consigue, pese a ello,
que nos sumerjamos en la trama porque nos invita hasta el final a
que vayamos haciendo cábalas de quién puede ser el espía al que
llaman el Barón y ver si son capaces de desbaratar sus planes con
los que intenta ayudar a las fuerzas aéreas alemanas. Tenemos
también, por otra parte, el entramado que hay en torno a la cabeza
de Diana. El desenlace es sorprendente aunque me encontré con
algunas escenas que no me terminaron de convencer.
Quería
hacer, también, hincapié en cuanto a las voces narradoras que nos
encontramos en esta novela pues me descolocó un tanto el hecho de
fueran tres quienes se alternaran para relatarnos la historia: dos en
primera persona y una en tercera. En mi opinión, considero que de
esta forma se desequilibra el ritmo narrativo.
Francisco
Granado logra transportarnos al Londres devastado por los bombardeos
de la Luftwaffe. Sus certeras descripciones consiguen que revivamos
lo ocurrido en la capital británica. Lo hace de tal forma que parece
que estamos viendo un documental que nos recuerda la barbarie vivida
en esa época. Y digo que estamos viendo porque causa en nosotros un
verdadero efecto visual.
En ese
ambiente de caos y devastación se mueven los personajes, perfilados
hasta el más mínimo detalle por el autor con quienes nos iremos
familiarizando, aunque, por una causa u otra, no logré empatizar con
ninguno de ellos. Por un lado, nos encontramos con Emma Wells y el
capitán español Miguel Laredo, que deciden colaborar pues ambos
tenían el mismo objetivo, aunque con distintos fines: ella pretendía
devolver la cabeza de Diana al gobierno de su país y él, que
formaba parte de los Servicios de Inteligencia Españoles, repatriar
la figura encontrada en las ruinas de Itálica. Creo que merece la
pena destacar algunos diálogos que tienen lugar entre ambos, en el
que se veía claramente la ideología de cada uno.
La
lectura de algunos capítulos de esta
novela
me
sugería un ambiente propio del género noir.
La visita a los bajos fondos londinenses producía ese efecto.
Personajes como Vivien Carroll, sir William Kildrake o Dorian,
dedicados a actividades ilegales, como el contrabando, sobre todo de
obras de arte, se movían por escenarios de dudosa reputación.
Hay
otro nombre que hará que nos mantenga atentos a la narración:
Alonso Bando. Él fue quien había encontrado la cabeza de Diana en
las ruinas de Itálica. Su nombre lo encontraremos a lo largo de la
novela y estaremos expectantes porque creemos que en cualquier
momento podría reencontrarse con su antigua pareja sentimental, Emma
Wells. Este será el motivo principal por el cual ella, pese a los
peligros que corría ante el continuo bombardeo al que era sometido
la capital inglesa por la aviación alemana, quería seguir
colaborando para recuperar el hallazgo arqueológico.
La
cabeza de Diana
es, como bien dice la sinopsis, un relato de aventuras, historia
detectivesca, secreta historia de amor y una fábula sobre las
pasiones que labran nuestra vida. Pese a las objeciones a las que
hago mención, es una novela que merece la pena darle una oportunidad
por la calidad literaria de la misma y que el autor incluye en ella
los ingredientes necesarios para enfrascarnos en su lectura pues nos
mantendrá en vilo hasta el final.
Biografía:
Francisco
Manuel Granado Castro,
es natural de Guillena, villa situada en las postrimerías de la vega
sevillana. Abogado, colabora en la revista La Toga, que edita el
Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla.
Es uno de los miembros fundadores de La
Tertulia El Porvenir Siglo XXI, círculo literario que se reúne
mensualmente en Felipe II.
Resultó
finalista del Premio Guadalquivir con su primera novela, que se
titulaba La más bella amante.
La
cabeza de Diana
es su última apuesta literaria
Datos
técnicos:
Título:
La cabeza de Diana
Autor:
Francisco Manuel Granado
Encuadernación:
Tapa blanda
Editorial:
Guadalturia. 1ª edición: Mayo de 2012
ISBN:
9788494019104
Nº
páginas: 330
Fuentes: sinopsis, datos técnicos y fotografía del autor tomadas de la web de la editorial. Fotografías de la batalla de Inglaterra tomadas de google imágenes.