Datos
técnicos:
Título: La
maniobra de la tortuga
Autor:
Benito Olmo
Editorial:
Suma de Letras (Grupo PRH)
1ª
edición: mayo/2016
Encuadernación:
tapa blanda con solapas
Idioma:
castellano
ISBN:
978-84-8365-865-9
Nº
páginas: 360
Sinopsis:
Empujado
por el infortunio, el irreverente inspector Manuel Bianquetti se ve
obligado a aceptar un traslado forzoso a la comisaría de Cádiz, un
destino previsiblemente tranquilo que se verá alterado con el
hallazgo del cadáver de una joven de dieciséis años. Una muerte
violenta que le traerá
reminiscencias
de un pasado del que no logra desprenderse.
A pesar de la oposición de sus superiores, el inspector Bianquetti emprenderá una cruzada solitaria para atrapar al culpable siguiendo el rastro de unas evidencias que podrían no existir más allá de su imaginación. La realidad se va oscureciendo en la medida en la que el lector va devorando páginas al tiempo que participa junto al protagonista en la investigación de un caso cada vez más turbio y escabroso.
Benito
Olmo compone una novela policial en la que los distintos hilos
narrativos tejen una red de la que le resultará imposible escapar.
Conozca al nuevo talento del género negro y criminal.
Opinión
Personal:
De
La
maniobra de la tortuga me
atrajo el título
y la sinopsis
pero, sobre
todo, el protagonista,
Manuel
Bianquetti;
no ya por su carácter irreverente, sino, sobre
todo, por su envergadura: todo un armario que allá por donde iba
llamaba la atención;
y no me extraña. Mientras se sucedían los capítulos, me preguntaba
continuamente el porqué de este título, hasta
que llegué al episodio que me desveló la incógnita;
pero, claro, esa incógnita va a seguir ahí para meterles el
gusanillo a quienes todavía no han decidido darle una oportunidad a
esta
novela que hoy reseño. Ya
adelanto que, quienes deseen disfrutar de
la compañía de un buen sabueso que les mantenga en vilo a lo largo
del desarrollo de la trama, este nuevo personaje que nos presenta su
creador, Benito Olmo, les va a entretener y mucho.
Y, como digo en estos casos, espero que Bianquetti haya venido para
quedarse, porque este personaje da mucho juego. Y es que, aunque la
trama queda resuelta, tal y como termina la novela, me dio a entender
que no tardaremos en tener noticias suyas.
(Plaza de España-Cádiz)
En
La maniobra de la tortuga nos encontramos con una historia
muy atractiva para el lector, con unos personajes bien definidos y
una ambientación que se sale de los lugares habituales del género.
Me gusta cuando el autor de turno me ofrece una novela cuya trama
esté ubicada fuera de las localizaciones en las que se mueven los
personajes más conocidos de la novela negra. Por eso disfruté con
los espacios por los que se desarrolla la trama: el autor conoce
cada palmo de su tierra y nos la presenta con magníficas pinceladas,
que invitan inevitablemente a visitarlos. Creo, en mi modesta
opinión, que la ambientación de La maniobra de la tortuga
es uno de los grandes atractivos de esta novela. En la
contraportada el lector encontrará un plano de Cádiz en el
que figuran detalladamente los lugares por donde se mueven Bianquetti
y compañía. Otra de las localizaciones destacadas es Puerto Real, sin olvidarme de la urbanización Vistahermosa en El Puerto de Santa María.
Benito
Olmo sabe cómo atrapar al lector desde el primer momento, ya que
desde el capítulo 0 la acción está servida, porque nos
encontramos a Bianquetti en plena faena. ¿Qué pasaría para que el
inspector se viese metido en semejante situación? Será desde, a
partir de ese capítulo, cuando conozcamos cómo empezó todo.
A lo largo de los 51 capítulos en los que está
estructurada la novela, estaremos informados en todo momento
de lo que ocurre tras el
hallazgo del cadáver de una joven de dieciséis años.
Pero el lector se encontrará con que un nuevo personaje hace
aparición en escena, al que la violencia de género marcó su vida.
Pasados algunos capítulos, nos preguntaremos si ambas subtramas
están relacionadas; como es de esperar, coincidirán en un punto de
la narración. En este sentido, quería
destacar dos aspectos de la novela que a mi, especialmente, me
gustan, ya que en ellos el lector siempre juega con ventaja:
sabrá antes que los demás personajes quién es el asesino de la
joven —¿o
nos esperará alguna otra sorpresa? Dudas—
y qué lleva a esa víctima de la violencia de género hasta Puerto
Real. Bianquetti
investigará qué hay realmente detrás de ese asesinato y comprobará
que la corrupción se mueve a su alrededor.
¿Llegará a saber por qué está Cristina en Puerto Real?
(Hospital Universitario-Puerto Real)
La
maniobra de la tortuga
es una novela negra bien
escrita, contada por un narrador omnisciente, y presentada a ritmo de
thriller, ya que el lector se encuentra con elementos de ambos
géneros.
En este sentido, diría que el autor conjuga perfectamente rasgos de
uno y otro, hasta tal punto que cuesta
definir cuál es la línea divisoria que los separa.
Por
la estructura
temporal de la novela, me vino a la memoria la serie de televisión
protagonizada por el agente Jack
Bauer, 24.
Y es que tal y como Benito Olmo desarrolla la acción de esta novela
me dio la impresión de que producía
un efecto similar al de la serie que acabo de mencionar,
pues parecía
que se desarrollaba en tiempo real.
Y, a parte de lo que acabo de comentar, por el realismo de la novela.
La trama tiene lugar, prácticamente, en el espacio de tres días y
el lector tendrá información, al comienzo de cada capítulo, del
lugar, fecha y hora en la que se desarrollan los episodios.
(Zona Franca-Cádiz)
Otro
punto fuerte de la novela, a parte de la ambientación, es el
perfil de los personajes, magníficamente construidos y creíbles.
Si la intriga está servida en cuanto al desarrollo de la trama,
otro tanto se puede decir de los personajes, porque los iremos
conociendo en pequeñas dosis y será en el desenlace cuando tengamos
una composición clara de cada uno de ellos. Por eso, en un
principio, Bianquetti se hará un tanto lejano, pero a medida que
el autor va profundizando en su personalidad intimaremos más con él.
Nos encontraremos también con unos personajes que están
claramente fuera de la ley y otros que están en una situación
incómoda, y que nos harán dudar de su integridad profesional.
No
quería terminar esta reseña sin comentar el magnífico prólogo
firmado por César Pérez Gedilla. Como si de un relato se
tratase, me encantó la presentación que hace de Benito Olmo y,
claro, como ocurre en estos caso, me supo a poco. En mi caso, son
dos estrenos en uno: por un lado, con el prólogo me estreno con la
prosa de Pérez Gedilla, y después le tocó el turno a este
paseo negrocriminal que nos da Manuel Bianquetti por la Tacita de
Plata.
Creo
que Benito Olmo perfiló un personaje que le va a dar mucho juego y
que los seguidores de la novela negra y del thriller, o de ambos,
estamos de enhorabuena, porque tenemos un sabueso al que no perderle
la pista.
Biografía:
(Cádiz,
1980) ha trabajado como corrector, editor, columnista y negro, y es
colaborador de varios medios como la revista Fiat
Lux
y el portal literario ¡A
los libros!
Es autor de las novelas Caraballo
(2007) y Mil
cosas que no te dije antes de perderte
(2011), y con ellas bajo el brazo ha recorrido España a través de
las diferentes Ferias del libro, lo que le ha permitido llegar a un
gran número de lectores.
Nota: Datos técnicos, biografía y sinopsis, tomadas de Megustaleer. Imágenes que acompañan al cuerpo de la reseña y fotografía de Benito Olmo, de google imágenes.