Sinopsis:
Madrid,
en la actualidad. Hasta
que El Astrólogo se cruzó en su camino, Ana, una joven historiadora
del arte del Museo del Prado, llevaba una vida tranquila junto a Konrad, un
rico empresario y coleccionista de arte alemán. Pero una carta escrita durante
la Segunda Guerra Mundial los pone sobre la pista del misterioso cuadro
atribuido a Giorgione, el enigmático pintor del Renacimiento. Alentado por el
enorme valor de El Astrólogo, Konrad convence a Ana para embarcarse en su
búsqueda. La joven, consciente de todas las dificultades que se le presentan,
pedirá ayuda al doctor Alain Arnoux de la Universidad de la Sorbona,
especialista en localizar obras de arte expoliadas por los nazis. Pero esta
decisión sólo parece complicarle las cosas.
París,
durante la ocupación alemana. El
comandante de las SS, Georg von Bergheim, militar de élite y héroe de guerra,
acaba de recibir una orden: debe encontrar el paradero de un cuadro de
Giorgione, conocido como El Astrólogo. Hitler está convencido de que la
obra esconde un gran enigma, una revelación que ha pasado de mano en mano
durante siglos. La búsqueda conduce al comandante hasta Sarah Bauer,
iniciándose entre ellos una persecución trepidante que tendrá consecuencias
inesperadas para ambos.
Opinión Personal:
La
tabla esmeralda comienza con un
prólogo que nos traslada al siglo XV, donde nos encontramos a Lorenzo de
Médicis, El Magnífico, mecenas de Florencia, en su Villa Careggi, y al
maestro Bellini, a cuyas órdenes trabajaban, entre otros, Boticelli o
Michelángelo. Hasta allí es enviado el joven Giorgione para entregarle al
mecenas un pergamino que contiene algo muy valioso. Cuatro siglos después, en
agosto de 1941, Hitler tiene sobre su mesa un archivo que contiene una carta
fechada en Florencia el 15 de noviembre de 1942. Pero no quería empezar a comentar la novela sin mencionar una cita que la autora extrae del diario de Anne Frank, que encontramos nada más empezar la lectura de la misma:
"A pesar de todo, sigo pensando que las personas tienen buen corazón"
Anne Frank
Carla
Montero nos va llevando perfectamente de la época actual al París ocupado por
los nazis. Los capítulos están bien engarzados pues saltamos de una línea de
tiempo a otra cuando, en la investigación
que se lleva a cabo para localizar la tan codiciada obra de arte, se descubre
algún hecho, documento o persona que tenga relación con esta valiosa
antigüedad. Realizó una buena labor de documentación tanto en el tema histórico
como en las referencias que utiliza en los diagnósticos médicos o las posibles
consecuencias que puedan tener la aplicación de drogas en determinados
pacientes que, sobre todo, pone en boca del doctor Vartan, médico del Hospital
Rothschild de París, a donde eran llevados los enfermos judíos antes de ser
deportados a los campos de concentración.
Ana García-Brest, una joven investigadora de Historia del Arte
del Museo del Prado, nos relata la historia en primera persona.
Para
realizar sus investigaciones, la protagonista deberá trasladarse a París, pese
a su inicial oposición pero ante la insistencia de Konrad no le queda más
remedio que claudicar. Allí se encontrará con la ayuda del doctor Alain Arnaux,
un profesor de la Universidad de La Sorbona y especialista en localizar obras
de arte expoliadas por los nazis. Ambos comienzan la labor de investigación
que, según la documentación que irán encontrando les hará realizar una serie de
viajes, buscando pistas que les acerquen al cuadro de Giorgione. Ana se
encontrará con más personajes en su historia. Teo, un gay que vive en pareja
con Toni, y que son vecinos de la protagonista. Este le da un punto de humor a
la trama con sus comentarios que nos hacen sonreír cada vez que entra en
escena. Camille, poseedora de una galería de arte y que gustaba relacionarse
con la alta sociedad; la familia del doctor Arnoux , la viuda Debousse y una organización, de la que
poco se conoce: PosenGeist.
Los
hechos que correspondientes a la ocupación de París por los nazis comienzan en
abril de 1942. El comandante de las SS Georghe von Bergheim es enviado por el reichfürher
Himmler para localizar y llevarle el tan deseado cuadro de El Astrólogo.
Cada capítulo de esta segunda línea temporal comienza con una nota en la
que se nos pone en conocimiento los sucesos que se van sucediendo en el
conflicto bélico. El narrador de los hechos es conocedor de lo que pasa en esa
época. Es la Francia ocupada por los nazis. La esvástica ondea por todo París.
Conoceremos a Sara Bauer, la otra protagonista de esta novela. Sarah Bauer
perdió a toda su familia. Se llevaron primero a su padre y después a su madre y
hermanos. Sus padres la escondieron para que no dieran con ella y el legado que
llevaba consigo. Las investigaciones que realiza el comandante de las SS le
llevan a la única superviviente de los Bauer. Entra en escena la Resistencia
Alsaciana, de la que formaban parte, entre otros, Jacob y Marion. Marion
comparte habitación con Sarah en una pensión. El comandante Von Bergheim la
vigila y está atento a todos sus movimientos. Para apresarla no dudará en hacer
todo lo que sea necesario. Sus órdenes eran claras: llevarle a Himler El
Astrólogo como fuera.
Hay
un cierto paralelismo entre la investigadora Ana García y Sarah Bauer. Son dos
mujeres indecisas que necesitan de alguien que les proteja pues no saben actuar
por ellas mismas. Pero a lo largo de la novela vemos cómo su personalidad
cambia, madura. El trabajo que va realizando y los acontecimientos que se
suceden influyen en su personalidad. Las investigaciones le confirman que algo
importante hay realmente detrás del cuadro y se da cuenta de que debe de seguir
hasta el final. Ya no es aquella mujer indecisa. Quiere hacerle ver a Konrad
que sabe valerse por sí misma pese a los obstáculos que se encontrará en el
camino. El doctor Arnoux también encierra su misterio. Se ofrece a trabajar con
Ana en la búsqueda del cuadro pero por otros motivos distintos. Ana duda de su
lealtad. Pero Alain le relata su historia. Konrad Köller, es un acaudalado
empresario, coleccionista de obras de arte. Todo lo que le guste tiene que
conseguirlo a cualquier precio. Su poder económico le hace sentirse superior
ante los demás. Es un personaje al que por su forma de ser y actuar se llega a
sentir aversión.
Sarah
Bauer se encuentra sola y necesita protección. La encuentra en Jacob y en su
amiga Marion. Un hecho en el que se embarca la Resistencia Alsaciana será el
que le haga ver que puede valerse por sí misma. Se ofrece para realizar una
operación difícil contra los nazis. Su valentía en esta operación le hará ganar
seguridad. El comandante George von Bergheim es un personaje secundario bien
perfilado. Se va dando cuenta de que está en el bando equivocado. Siente el
amor a su patria pero no es partidario de las atrocidades que cometen los
suyos. Está asqueado por la forma en que actúan todos los que le rodean y desea
volver al frente pero le ordenan cumplir el mandato encargado, sea como sea.
Nos
encontramos con dos historias de amor distintas en el tiempo. Dos historias que
tienen un mismo fin como es el encontrar El Astrólogo. Un cuadro que
hará que ambas historias terminen convergiendo.
Amor,
odio, venganza, amenazas, intereses ocultos y giros inesperados son
ingredientes que hacen de La tabla esmeralda una novela recomendable
para su lectura. Una historia, sin duda, adictiva que consigue atraparnos hasta
el final de la misma.
La
autora:
Carla
Montero (Madrid, 1973) es licenciada en Derecho y Diplomada en Administración
de Empresas. Su primera novela publicada fue Una Dama en juego, con la
que ganó el premio Círculo de Lectores de Novela. Esta novela comienza en las navidades de 1913, cuando Isabel de
Alsasúa es acogida por su tía en el castillo de Brunstriech. Se encuentra en
medio de una intriga política tras la que se esconde una secta que quiere
sembrar la destrucción.
Título:
La tabla esmeralda
Autora:
Carla Montero Manglano
Editorial: Random House
Mondadori, S. A
Plaza
& Janés
Encuadernación: tapa dura con sobrecubierta.
ISBN:
9788401353109
Nº
páginas: 740.