viernes, 9 de agosto de 2024

Reseña Prohibida en Normandía, de Rosario Raro.

 











Datos técnicos.






Título: Prohibida en Normandía.

Autora: Rosario Raro.

Editorial: Planeta.

1ª edición: Abril/2024.

Encuadernación: Tapa dura con sobrecubierta.

ISBN: 978-84-08-28624-0.

Idioma: Español.

Nº pág.: 406.





Sinopsis:





La reportera Martha Gellhorn colabora con The Ghost Army, un ejército fantasma creado en Hollywood para engañar a los nazis. Ella y su marido, el famoso Ernest Hemingway, inventan las vidas de soldados que no existen. Pero Martha aspira a más; quiere cruzar el Atlántico y relatar de primera mano la etapa definitiva de la guerra.

Para conseguirlo tendrá que rebelarse contra el rol que pretenden asignarle como mera sombra en la vida de su marido y, además, desafiar una prohibición del alto mando militar que impide la presencia de mujeres en el desembarco de Normandía. Contra todos los intentos de borrarla, esta extraordinaria periodista luchará por la libertad en una épica travesía que la llevará desde Hollywood hasta Canfranc, pasando por Londres, Dover y Pau, entre otros lugares.






Opinión Personal:





Cuando en diciembre de 2015 reseñé en este blog la ópera prima de Rosario Raro (Segorbe, Castellón, 1971), Volver a Canfranc (reseña), dije que mi relación con su narrativa fue un flechazo literario en toda regla. Un flechazo que se convirtió en una relación literaria que continúa, porque tengo muy claro que su narrativa supone para mí disfrutar de historias bien contadas, con una labor documental que les aporta verosimilitud y realismo, y por cuyas páginas transitan personajes bien perfilados, consistentes y que parecen cobrar vida propia. Sus novelas parten de temáticas que no dejan indiferente al lector -algunas incluso diría que poco conocidas, caso de la denuncia social sobre la talidomida, que afronta en La huella de una carta (reseña)-, con el aliciente de que las afronta desde una perspectiva diferente, a la par que atractiva. En la línea de lo que acabo de comentar está Prohibida en Normandía, publicada por Planeta en abril del presente año, y en la que reivindica la figura de la periodista Martha Gellhorn, la única mujer que participó en el trascendental desembarco de Normandía, el 6 de junio de 1944, del que este año se conmemora el 80 aniversario.

 (Omaha Beah-Normandía, Francia)
En mi opinión, Prohibida en Normandía es una interesante y entretenida lección de historia en la que la escritora segorbina no sólo reivindica la figura de la periodista y protagonista de esta novela, Martha Gellhorn, sino porque a lo largo de los 88 capítulos cortos que la conforman, se desarrolla una subtrama en la que aborda un hecho histórico poco conocido, como es la Operación Fortitude, en la que se planifica el entramado que conformará el señuelo con el que desviar la atención del ejército alemán hacia las costas de Calais para que creyeran que iba a ser en esa zona del noroeste de Francia donde iban a desembarcar las fuerzas aliadas, y no en Normandía. Desde Hollywood, personajes del mundo del séptimo arte se implican en la creación del Gost Army o Ejército Fantasma. Están convencidos de que este engaño sirva para que la invasión sea el principio del fin del terror implantado por el régimen nazi, para desde allí iniciar el camino que les conduzca a la conquista de Berlín y poner fin a una espeluznante pesadilla que segó la vida de miles de víctimas inocentes. Un entramado del que también forman parte las vidas ficticias de soldados que no existen, al igual que la captación de agentes alemanes para que transmitan información falsa a su país, o la que les facilitan agentes ficticios, «convencidos los alemanes de que eran sus principales activos allí; por tanto, mientras esta trampa funcionara, no enviarían a otros agentes» (pág. 156).

Rosario Raro planifica y desarrolla una novela que no tiene desperdicio, porque en cada capítulo me encontré con episodios que atrajeron mi atención, en donde no faltan giros que redoblan el interés por lo que les depara a los personajes que protagonizan cada uno de estos vuelcos narrativos. En la trama no sólo se refiere a la preparación del señuelo al que me refiero en el párrafo anterior, sino que también incide en el papel que desempeña la mujer en este conflicto bélico. Mujeres a las que la periodista da voz en las diversas entrevistas que realiza para que la ciudadanía conozca y valore su labor en este conflicto bélico, tanto sus compañeras de profesión como de otras que forman parte de determinados cuerpos del ejército, caso de las enfermeras, o el trabajo que desempeñan en determinados departamentos militares, entre los que le sorprende las condiciones en las que tiene que realizar su labor quien marca en un enorme mural las singladuras de los barcos que cruzan el canal de La Mancha.

(Martha Gellhorn)
Pese a que la autora resalta en la interesante nota que acompaña al cuerpo de la novela que «está basada muy libremente en algunos acontecimientos de la vida de Martha Gellhorn como reportera de guerra durante el período 1944-1945 y, en especial, durante su papel en el desembarco del Ejército aliado en la costa de Normandía» (pág. 421), entiendo que refleja la esencia de lo que significó para una mujer demostrar que puede ejercer su profesión en un oficio dominado por los hombres, y el menosprecio que muestran sus compañeros hacia ellas. Pero Martha Gellhorn demuestra a lo largo de los capítulos que es una mujer valiente, intrépida y que no duda en luchar contra viento y marea para ejercer su trabajo en primera línea como reportera de guerra y contar al mundo la verdad a través de todo lo que fotografía con su cámara y cuenta con su certera pluma, consciente de que la censura militar es la que manda en un conflicto bélico, porque la información que remita para ser publicada puede caer en manos enemigas. Aunque también tiene que luchar contra las trabas con las que justifican la dificultad que supone su publicación, incluidas la mutilación de sus reportajes. El lector comprobará cómo pesa sobre ella el hecho de estar casada con el periodista y escritor Ernest Hemingway, de quien no recibe el apoyo esperado para conseguir su acreditación que le facilite tomar parte directa en el desembarco, lo que origina una subtrama en la que uno se pregunta por el desenlace de una relación que se presume tensa. Con Martha Gellhorn el lector tiene la intriga asegurada, ya que no duda en tocar de forma persistente las teclas que estima necesarias para obtener la ansiada autorzación.La trama es muy visual y las descripciones que realiza el narrador omnisciente sobre los espacios por los que transitan los personajes incitan a que nos imaginemos cómo se desarrollan los episodios que tienen lugar en cada uno de ellos. El lector acompañará a los personajes desde Hollywood, donde se sientan las bases de la llamada Operación Fortitude, a Dover -centro neurálgico en el que se prepara el desembarco del Ejército Fantasma en las costas de Calais- los Alpes Suizos, en donde Hitler prefiere pasar sus vacaciones en Berghof, desde donde también dirigió parte de las operaciones del ejército alemán, y muy cerca del conocido como Nido del Águila. LondresPau y Canfranc Estación son otras ubicaciones en las que tienen lugar episodios en los que toma parte la protagonista, y que ubica la autora en estos parajes, conforme a la documentación que recaba la autora sobre la estancia de la protagonista en territorio francés. Episodios que mantuvieron mi atención por todo lo que podía suponer para ella su paso por la mítica estación ferroviaria, que la encandiló, porque «vio un edificio que le resultó inverosímil...Ese palacio le pareció una alucinación provocada por el estado en el que se encontraba» (pág. 310).

Marta Gellhorn está flanqueada por un muy atractivo el elenco de personajes reales y ficticios. Personajes que interactúan de forma muy natural, de tal forma que me hizo dudar de que alguno de ellos fuera creado por la imaginación de la autora. Y es que si por algo destacan los que perfila Rosario Raro es por la base real de la que parte para trazar figuras ficticias consistentes, muy acordes con la realidad y las situaciones que les toca vivir en el período histórico de turno. La protagonista es el centro de escenas que no dejan indiferente, tanto las que guardan relación con el que es su marido en esa época -el periodista y escritor Ernest Hemingway-, como con otros tres personajes que le dan mucho juego a la novela, como son el general Harvey, el teniente Douglas Fairbanks Jr. y el espía Ottto Mandheim. Anque tampoco me olvido del papel que desempeña en una fase trascendental de la trama la enfermera Lindsay Bennet, o la que mantiene con la reportera Lee Miller, al igual que con el matrimonio conformado por David Niven y Prímula Susan Rollo.

(Ejército Fantasma-2GM-1944)
Prohibida en Normandía es una novela para degustar sin prisas, pese a que el ritmo de lectura es fluido, influenciado por la variedad y el dinamismo de episodios que atrajeron mi atención a lo largo de los 88 capítulos cortos en los que se estructura el desarrollo de la trama. Rosario Raro planifica y desarrolla una historia muy atractiva en la que no sólo reivindica la figura de la periodista Martha Gelhorn, sino que también da a conocer el entramado que se organiza desde Hollywood para desviar la atención al ejército alemán hacia las costas de Calais, y no a las de Normandía, enclave fijado para el desembarco de las tropas aliadas. Resultado de este entramado es la creación del señuelo conocido como Operación Fortitude y la creación del Ejército Fantasma con el que conferir credibilidad a un atrezzo simulado. La exhaustiva labor de documentación que realiza la escritora segorbina para que la trama se ajuste a los hechos históricos que relata el narrador omnisciente, la convierten en una ficción verosímil, real y muy visual, en la que aprovecha las lagunas documentales para intercalar escenas que están muy en consonancia con los hechos que se relatan y que bien pudieron haber ocurrido en la realidad. Una ficción en la que los diálogos dinámicos y naturales son trascendentales, porque a través de ellos se reflejan las adversidades a las que se enfrenta la protagonista para conseguir la ansiada acreditación, que le permita tomar parte en el desembarco de Normandía. Unas adversidades que, sin embargo, generan una intrigante relación que se fragua con el general Harvey, y que incita a preguntarse sobre el posible desenlace en el que puede desencadenar, según se desarrollan los episodios que protagonizan. Otro tanto sucede con la tensión que mantiene con Ernest Hemingway, su actual marido, dada la postura que adopta el afamado escritor y periodista, sobre todo al comprobar la importancia que para ella tiene su labor como reportera. Prohibida en Normandía tiene también el atractivo de disfrutar de unas descripciones muy visuales en las que acompañamos a los personajes por Hollywood, Dover, Londres, Alpes Suizos, Pau o Canfranc Estación, por lo que el lector se puede imaginar una idea muy clara de cómo son las localizaciones en las que se desarrollan las escenas que mayor peso tienen en la novela.






Biografía:





Rosario Raro (Segorbe, (1971) además de es doctora en Filología Hispánica. Dirige el aula de Escritura Creativa de la Universitat Jaume I de Castellón desde 2004. Ha publicado en Editorial Planeta las novelas Volver a Canfranc (2015), La huella de una carta (2017), Desaparecida en Siboney (2019) y El cielo sobre Canfranc (2022), con las que suma más de veinticinco ediciones. El viaje teatralizado y la ruta literaria basados en el primero de estos libros obtuvo el premio a la mejor experiencia turística de Aragón en 2021. Ha colaborado con sus artículos en Qué leer, El País y El Dominical de El Periódico. Ganó el Premio Magda Portal del Ministerio de la Mujer de Perú, país donde vivió durante casi una década, y el prestigioso Premio Ciudad de Huelva de relato, entre otros galardones. Sus haikus han sido traducidos al japonés y su obra narrativa de ficción, al árabe, francés y catalán.



Nota: Datos técnicos, sinopsis, biografía y fotografía de Rosario Raro tomados de la web Planetadelibros. Imagen de Omaha Beach tomada de la web Wikimedia Commons. Imagen de Martha Gellhorn tomada de la web Hermesmagazine. Imagen Operación Fortitude tomada de la web Britannica.












3 comentarios:

  1. Hola Paco, desde Regreso a Canfranc no he leído nada de la autora y esta novela me ha llamado la atención. Reconozco que no soy demasiado fan de Hemingway, del que he leído principalmente relatos, y lo ignoro todo sobre su esposa, un personaje por lo que veo en tu reseña muy interesante. Me apunto la novela y a Martha Gellhorn investigaré sobre ella. Besos.

    ResponderEliminar
  2. Aún no me he estrenado con la autora, y mira que en mis estanterías está Regreso a Canfranc. No sabía nada de su esposa, y llama mucho la atención. Imagino que debe ser una novela muy visual porque en nuestros recuerdos están tantas películas...Si lo encuentro no descarto darle una oportunidad, me has convencido. Besos

    ResponderEliminar
  3. Para mi ha sido una gran lectura, la he disfrutado mucho, conociendo a Martha y también esa otra visión sobre Hemingway. Abrazos.

    ResponderEliminar