Sinopsis:
En
el año 285 a. C Irene tiene quince años y vive con su padre en
Atenas. Su educación, que Kleón ha cuidado con un esmero nada
habitual para una mujer, la ha convertido en una joven curiosa y
culta. Sin embargo, todo su mundo se derrumba cuando él es
encarcelado. Irene queda bajo la tutela de Herófilo, un familiar
médico con el que huirá de Atenas. Durante una larga estancia en
Creta, donde se ven obligados a recalar, Irene acabará por adquirir
conocimientos básicos de medicina, suficientes para despertar su
interés por continuar aprendiendo y practicando. Así empieza su
periplo por el Mediterráneo, que es a la vez un viaje hacia el
descubrimiento de sí misma.
En la aventura vital de la protagonista se cruzan no sólo los dos hombres a los que amará, sino también personajes históricos como Herófilo de Calcedonia, el rey Ptolomeo I o el filósofo Epicuro, y las mujeres anónimas -campesinas, esclavas, cortesanas y esposas de ciudadanos griegos-, que la ayudarán a convertirse en adulta. Las peripecias de Irene nos acercan a una época en que la ciencia médica daba sus primeros pasos y el arte y la filosofía formaban la conciencia colectiva y se planteaban dilemas no muy alejados de los que vivimos hoy. Una vida fascinante narrada en una novela imperdible.
En la aventura vital de la protagonista se cruzan no sólo los dos hombres a los que amará, sino también personajes históricos como Herófilo de Calcedonia, el rey Ptolomeo I o el filósofo Epicuro, y las mujeres anónimas -campesinas, esclavas, cortesanas y esposas de ciudadanos griegos-, que la ayudarán a convertirse en adulta. Las peripecias de Irene nos acercan a una época en que la ciencia médica daba sus primeros pasos y el arte y la filosofía formaban la conciencia colectiva y se planteaban dilemas no muy alejados de los que vivimos hoy. Una vida fascinante narrada en una novela imperdible.
Opinión
Personal:
Me
gustan las novelas que, pese a estar ambientadas en una época
determinada de nuestra Historia, la temática puede considerarse como
atemporal. Y este es el caso de Los caminos
del mar, la ópera prima con la que presenta
sus credenciales la escritora natural de Alcoy (Alicante), Magdalena
Albero Andrés, en las que aporta muy buenas referencias, pues su
lectura me ha resultado muy placentera y su buen hacer literario hace
que estemos atentos a su aportación al panorama narrativo nacional
en futuras publicaciones.
Y
es que, pese a que la trama de Los caminos del
mar se desarrolla en el siglo III a. de C. el
trasfondo de la misma sigue vigente, por desgracia, hoy día, como es
la lucha por la igualdad de géneros. Los diversos personajes
femeninos que nos iremos encontrando a lo largo de los 38 capítulos
más el epílogo en que está estructurada la novela, vemos cómo
para lograr salir adelante en sus propósitos, deben enfrentarse a
las dificultades que se encuentran en una sociedad dominada por el
hombre pues el papel que tenían reservada en aquella época era
desempeñar las labores que le corresponden como tal y, como mucho,
dar alguna orden a los esclavos.
(Herófilo de Calcedonia)
Lo
primero que me llamó la atención en esta novela es el momento
elegido por la autora para presentarnos la historia que nos relata,
pues nos encontramos en una ciudad como Atenas, pero ya no es aquella
polis que tanto asombró al mundo antiguo, sobre todo en la época
dorada del llamado siglo de Pericles, sino que estamos ante una
Atenas decadente en la que solo unos pocos luchaban por conservar los
valores de antaño que ahora se veían amedrentados y perseguidos por
quienes solo buscaban repartir el poder y mantenerlo, a costa de
evitar que creciera la libertad de pensamiento, siempre bajo la
protección del rey Demetrio Poliorcetes, llamado así por las muchas
ciudades que había asediado y muy pocas se le habían resistido.
Y
así vemos cómo uno de esos perseguidos, sabedor de que sus días de
libertad estaban contados, era Kleón, el padre de Irene, quien
inculca a su hija los valores en los que cree. Irene se ve obligada a
emprender un largo periplo iniciático, bajo la protección de
Herófilo de Calcedonia, por lugares como Creta, Alejandría, Rodas,
Atenas o Pharos.
Un
viaje en el que Irene tratará de buscar su lugar en el mundo que le
rodea, que irá descubriendo quién es y qué quiere, sus miedos, sus
contradicciones, cómo tendrá que enfrentarse a la pérdida de
quienes formarán parte de su vida y cómo tendrá que volver a
empezar de nuevo una y otra vez sin desfallecer en el camino. Pero
también el amor estará presente en Irene, tanto el que profesa a
las personas que la protegen y que le brindan su amistad, como ese
amor en el que busca encontrar su estabilidad emocional, que
finalmente verá recompensada.
(Recreación de la Biblioteca de Alejandría)
La
suya es una historia de superación personal y de supervivencia. Es la historia de una mujer que
consigue valerse por sí misma y que, sin embargo, tiene que
renunciar a ser una gran médico como era lo que ella más deseaba,
pero no por eso dejará de ejercer su profesión, aunque tendrá que
enfrentarse a las trabas que le impone la sociedad de la época por
su condición de mujer teniendo, en algunas ocasiones, que ejercerla
prácticamente en la clandestinidad. Es un personaje literario creado
con mucha fuerza, muy humano y creíble, al igual que todos aquellos
que, por algún motivo u otro, tendrán alguna relación con ella,
históricos unos, ficticios otros.
En
Los caminos del mar la
mujer juega un papel importante. Mujeres que se rebelan y luchan por
ser ellas mismas y logran salir adelante, como Exome, Caledonia, la
esposa de Herófilo, o la hetaira Areté. Todas ellas muy bien
perfiladas, con sus luces y sus sombras, de las que nos desvelarán
algunas pinceladas que nos ayudarán a conocer sus reacciones en
algunas escenas de la novela.
Pero,
sobre todo, me prendó la magnífica ambientación con la que
Magdalena Albero logra, con precisas descripciones y sin hacer alarde
alguno de la documentación recabada, sino repartida de tal manera a
lo largo de la narración de tal forma que al lector no se le hará
recargada, sino que se verá atrapado por el estilo cuidado con el
que se logra nos sintamos cómodos en su lectura y así consigamos
disfrutar con las aventuras que vivirán los personajes. Unas
aventuras que aportan dinamismo a la novela con las que nos sentimos
transportados a la época en la que se desarrolla la trama, relatada
desde la lejanía del tiempo por Irene en primera persona.
( Reconstrucción del Faro de Alejandría)
En
Los caminos del mar la
vida social y política de la época están perfectamente reflejados.
No perdía detalle, sobre todo, de la labor emprendida por Ptolomeo
I, que posteriormente continuaría su hijo Ptolomeo II, convirtiendo
a Alejandría en uno de los mayores núcleos culturales y científicos
del Mundo Antiguo, quedando fascinado con la majestuosidad del Museo
y la Biblioteca, la grandiosidad del Coloso de Rodas que por aquel
entonces estaba en construcción, así como las artes que utilizan
los sabios de la época, como los médicos Herófilo, Erasístrato o
el filósofo Epicuro, personajes célebres de la época, porque con ellos la
ciencia daba sus primeros pasos y el arte y la filosofía, como bien
nos adelanta la sinopsis, formaban la conciencia colectiva y se
planteaban dilemas no muy alejados de los que vivimos hoy.
Biografía:
Magdalena
Albero Andrés es profesora titular en la Facultad de Ciencias de la
Comunicación de la Universidad Autónoma de Barcelona. Ha sido
investigadora visitante en diferentes universidades de Estados Unidos
y Canadá, y ha escrito varios libros y artículos científicos sobre
juventud y medios de comunicación. En el campo de la ficción, ha
publicado relatos en diversas antologías. Los
Caminos del mar,
su novela debut, ha resultado ganadora del segundo Certamen
Internacional de Novela Histórica Ciudad de Úbeda.
Datos
técnicos:
Título:
Los Caminos del Mar
Autora:
Magdalena Albero Andrés
Editorial:
Roca
Primera
edición: 25/09/214
ISBN:
978-84-99187679
Nº
páginas: 384
Nota: Sinopsis, datos técnicos y fotografía de la autora tomadas de la web de Rocaeditorial; medallón de Herófilo de Calcedonia y láminas de la reproducción de la Biblioteca y del Faro de Alejandría tomados de Wikipedia.
Me apetece mucho este libro, desde que leí uno sobre Hypatia no he vuelto a leer nada ambientado en esta época... así que me lo apunto. Gracias
ResponderEliminarUn beso
Me encantaría leerla! Ya lo sabes :P
ResponderEliminarMe gusta mucho que la prota sea mujer, y por lo que veo la ambientación también está muy bien.
Besos
He visto alguna que otra opinión y andaba dudando si apuntarla o no... Lo hago Paco pero, en la lista de posibles porque la que seguros está ya más que colapsada. Besos.
ResponderEliminarTiene buena pinta aunque quizá para más adelante, besotes
ResponderEliminarYa tenía anotada esta novela por otras reseñas así que me alegra que también la hayas disfrutado y recomiendes, espero leerla pronto
ResponderEliminarBesos
Me parece un libro la mar de interesante
ResponderEliminarespero poder leerlo pronto
un besito
Me gusta mucho la ambientación de esta novela y viendo lo bien que hablas de ella, no la dejaré pasar. Lo que no sé a este paso es cuándo podré hacerle hueco...
ResponderEliminarBesotes!!!
Parece muy interesante. Me lo voy a apuntar. Besos.
ResponderEliminarPues me lo apunto, que me parece interesante y no suelo leer libros ambientados en este periodo =)
ResponderEliminarBesotes
Me llamó mucho la atención esta novela por la época en la que transcurre. Me apetece leer algo de la Grecia antigua. Besos
ResponderEliminarMe gustó mucho esta novela y veo que también has podido dsifrutarla.
ResponderEliminarPues tiene buena pinta. Espero leerla en breve.
ResponderEliminarEste libro lo tengo anotado desde hace tiempo y me lo has traído a la memoria. Ahora que se acerca Sant Jordi, he de hacer mi lista. ;)
ResponderEliminarUn beso.
A mi me ha encantado esta novela y no puedo más que recomendarla. Y enhorabuena por la reseña, un beso
ResponderEliminarNi me acordaba que lo tenía en el Reader. Mil gracias por recordármelo! Un beso!
ResponderEliminarme encanta, este si que me lo anoto, creo que es de los míos. Un beso!
ResponderEliminarEsta época histórica no me llama como lectura aunque me produce curiosidad saber cómo plantea el problema de la diferencia de géneros en un período en el que la mujer apenas tenía relevancia.
ResponderEliminarMe llamaba la atención, pero tras leer tu reseña, tengo que leerlo sí o sí.
ResponderEliminarUn beso.
La tengo apuntada ya porque estoy segura que cuando la lea me gustará. Tiene muchos ingredientes para ello así que tu reseña la sube varios puestos en la lista :)
ResponderEliminarBs.