miércoles, 30 de marzo de 2022

Almas cautivas, de Nil Kandel.

 






Datos técnicos:




Título: Almas cautivas.

Autor: Nil Kandel.

Autoeditado Amazon (enlace).

1ª edición: Diciembre/2021.

Formato: Tapa blanda.

ISBN: 979-8772309261.

Idioma: Español.

Nº pág.: 325.


Precio: 13, 00 € en papel. 

              3, 00 € en ebook.



Sinopsis:



El policía Daniel Lombar intenta superar ciertos problemas emocionales tras serle concedido un largo período de excedencia. Una mañana recibe la llamada de Robert Moragues, un amigo del pasado con quien había perdido el contacto. Robert se muestra muy alterado al explicar que su hermano Aleix lleva doce días desaparecido. Tiene la seguridad de que ha sido asesinado y pide ayuda para localizar su cuerpo y detener al autor del crimen.

Daniel se siente muy confuso, pero algo en su interior lo empuja a regresar a la casa Rifé, una masía centenaria donde pasó los veranos de su adolescencia. Una vez allí, los recuerdos lo ayudarán a investigar la misteriosa desaparición de Aleix, aunque también despertarán su máximo anhelo: vengar una muerte que pudo evitar treinta años atrás y de la que aún se siente responsable. En su lucha por hacer las paces con el pasado, Daniel descubrirá los secretos más oscuros que marcaron la vida de los hermanos Moragues.



Opinión Personal:




En mi modesta opinión, Nil Kandel es uno de los autores autoeditados de nuestro país de los que merece la pena estar muy pendiente, porque sabe cómo atraer al lector que disfruta con historias encuadradas en lo negrocriminal, en las que el suspense, el misterio y la intriga psicológica están muy presentes. En su última novela publicada, Almas cautivas, hay que añadir los secretos familiares, que originaron que me hiciera múltiples preguntas sobre lo que se escondía tras las paredes de la casa Rifé, «una masía de trescientos años que conservaba la memoria de varias generaciones. Fue allí donde recuperé la salud y murió mi adolescencia» (pág. 12). A medida que se suceden los capítulos me dije que era un título muy acertado, porque sospechaba que las paredes de esa masía centenaria escondían secretos, entendía que oscuros, de un pasado cercano que está muy presente en el día a día de sus moradores, lo que originó que estuviera muy pendiente de lo que me esperaba en el desenlace. Un desenlace sorprendente, aunque bien planificado por el autor para causar el efecto deseado, porque tiene muy en cuenta determinados episodios que se desarrollan en la masía. Un desenlace en el que el autor desgrana unos episodios que salen a la luz en pequeñas dosis, y mantiene expectante la atención del lector hasta la última página. Sin duda alguna, este desenlace es uno de los atractivos que invitan a recomendar la lectura de Almas cautivas, junto con todo lo que sucede a lo largo de los 41 capítulos en los que se estructura el desarrollo de la trama.

(Comarca Bagés con vistas a Montserrat-Barcelona)
«—Debes escucharme, Daniel —insistió Robert, y soltó un suspiro—. Estamos viviendo unos días nefastos. Mi hermano se fue de casa hace dos semanas, un día después del funeral de nuestra madre. Unos agentes rastrearon por los alrededores sin encontrar nada, y ayer apareció su pierna derecha en la puerta del cementerio. ¡Es terrible! No sabemos si está muerto. Necesito que nos ayudes a descubrir qué le ha pasado y encontrarlo. Creo que puedes hacerlo. Sabes cosas de Aleix que nunca supe» (pág. 10). Esta petición, incluso diría que súplica desesperada, indica que el pasado nunca nos abandona, nos acompaña a lo largo de nuestra vida e incluso puede manifestarse de una forma u otra. Robert Moragues llama al ahora policía Daniel Lombar, quien intenta superar ciertos problemas emocionales tras serle concedido un largo período de excedencia, como adelanta la sinopsis. El doctor que trataba a su madre aconsejó a Daniel Lombar, hace treinta años, que pasara largas temporadas en algún lugar alejado de la ciudad, a causa de una tos seca que le atormentaba cada primavera. Un doctor que conocía a Alfons Moragues y le recomendó la casa Rifé como la masía apropiada para recuperarse.

Al igual que en La última carta de Nagore (reseña), el lector se encontrará con dos líneas temporales, en esta ocasión separadas por un período de treinta años.Aprovecha cada uno de los capítulos que las conforman para dosificar la información que ofrece en primera persona el protagonista y narrador.  Sin duda alguna, uno de los rasgos que caracterizan su narrativa es el sumo cuidado con el que planifica y desarrolla las tramas, de tal forma que invita a no perder detalle de lo que sucede en cada uno de los capítulos que las conforman. En esta ocasión, es consciente de que los episodios que viven los personajes que transitan por las dos líneas temporales tienen que ofrecer una información complementaria que ayude al lector a que se implique en la composición del complejo puzzle en el que se convierte la historia que relata Daniel Lombar. Un complejo puzzle que incluso tiene su banda sonora, como se dice en estos casos, porque sobre todo en algunos capítulos de la segunda línea temporal se mencionan canciones o incluso Aleix le invita a reflexionar a su nuevo amigo sobre fragmentos de las que más le atraen, que el joven Moragues elige en función del estado de ánimo en el que se encuentre o según crea que es la más adecuada para escuchar y para que Daniel se familiarice con esa música como Pink Floy, Beatles, Genesis, Alan Parsons Project, David Bowie, Elton John, entre los más conocidos, o ya no tanto como King Crimson, Black Sabbath,...

(Castillo Blancafort-Barcelona)
En mi modesta opinión diría que Almas cautivas es una novela de personajes, pese a que el protagonista y narrador ofrece unas descripciones muy atractivas y visuales de los lugares por los que transitan. Sin embargo, y como acostumbro a decir en tramas como esta, se mimetizan con el paisaje que les rodea, porque tanto los miembros de la familia Moragues como Daniel Lombar se adaptan a las características particulares de la zona de la comarca del Bagés en la que está situada la casa Rifé, «Robert abrió la puerta de la terraza y apareció a contraluz la inconfundible silueta de las montañas de Montserratl. Esa zona de la casa seguía ofreciendo unas vistas fascinantes; desde allí se contemplaban la inmensidad de los bosque y campos que nos rodeaban» (pág. 21). Unas características en las que el autor tiene muy en cuenta tanto el día a día de quienes viven en la masía, como los parajes que recorre el ahora policía para encontrar el cuerpo de Aleix, su amigo de la adolescencia, e incluso le sobrecoge el temor de tener que enfrentarse a Bernat Santacana, al que señalan como el asesino del hijo de Alfons Moragues. Recalco el atractivo de los parajes, porque el protagonista y narrador los describe con detalle en la primera línea temporal, ya que la mayoría de ellos le resultan familiares de su estancia en la masía durante su adolescencia. En este sentido, el lector se encontrará con la particularidad de que la voz narrativa se refiere en todo momento al pueblo ficticio de Vilafosca, creado por la imaginación del autor, pero para cuyo trazado y cercanías tiene muy en cuenta la orografía de la comarca del Bagés, con alusiones a Manresa y a las ruinas del castillo de Blancafort, al igual que a las montañas de Montserrat que la custodian. La casa Rifé atraerá también la atención del lector, porque es un personaje más de la novela, ya que conocerá con detalle cada una de sus estancias y las labores que en ella se realizan, a través de las que comprueba cómo la vida de sus moradores es diferente a la de quienes residen en los pueblos o ciudades más próximas.

Como acabo de comentar al principio del párrafo anterior, en Almas cautivas cobran un mayor protagonismo los personajes, trazados con un perfil complejo y caracterizados por marcados rasgos psicológicos, de los que me decía que algunos sólo reflejan lo superficial, porque eran muy celosos de un mundo interior que incluso les atormentaba. Para trazar sobre todo el perfil psicológico de los personajes se percibe que tiene muy en cuenta el carácter aislado de la masía, los oscuros secretos que guardan sus paredes, así como el que la segunda línea temporal de la trama se desarrolle durante los últimos años del franquismo. Esto se refleja en la expectación que se manifiesta en los miembros de la familia Moragues sobre lo que pasará una vez que fallezca el dictador y cómo influirá en el país el nuevo horizonte político que se asoma. Doña Natalia, la madre de los tres hermanos, manifiesta en varios episodios su fidelidad al régimen, no sólo por los comentarios que hace, y su relación con las fuerzas vivas de Vilafosca, sino también por el carácter autoritario que muestra frente a los demás miembros de la familia y su reacción ante un episodio luctuoso que tiene lugar en el pueblo. En el polo opuesto se encuentra su hermano Isaac, quien le proporciona los discos de vinilo y las cintas de música a su sobrino, al igual que otros regalos que les trae de vez en cuando. Este es un personaje que atrajo mi atención, porque me pareció un tanto enigmático: una incógnita que se mantiene hasta hasta el desenlace de la novela. Tampoco me olvido de la abuela Teresa, que también desvelará algunos secretos que encierra la casa Rifé. Pero tampoco dejan indiferentes Celia y Bernat Santacana, dos hermanos que trabajan en la masía desde hace pocos años, a la que fueron llevados por su abuelo, e supondrá un duro final a la estancia de Daniel Lombar en la casa Rifé en esa época, quienes protagonizan una serie de episodios duros y sobrecogedores, que cambiarán la vida de la familia y truncará la adolescencia de los hermanos Moragues, al igual que supondrá un duro final a la estancia de Daniel Lombar en la casa Rifé en esa época.

Almas cautivas es la tercera novela que leo del escritor natural de Sabadell, y que firma bajo el seudónimo de Nil Kandel. Los 41 capítulos en los que se estructura el desarrollo de la trama transcurren a través de dos líneas temporales separadas por treinta años. Al igual que en La última carta de Nagore (reseña) y La vida oculta de la ciudad (reseña), el autor ofrece a través de la voz narrativa una trama que se encuadra en lo negrocriminal. En esta ocasión, diría que el lector se encuentra ante una trama de intriga psicológica y misterio y secretos familiares en la el ahora policía Daniel Lombar realiza una labor de investigación muy absorbente. Decide realizar las pesquisas que le encarga Robert, el hermano de su antiguo amigo de la adolescencia, Aleix Moragues, porque lleva doce días desaparecido y tiene la seguridad de que ha sido asesinado. Pese a que domina la narración frente a los diálogos, el ritmo de lectura se me hizo fluido, porque en todos los capítulos se desarrollan episodios que atraen mi atención, por lo que invitan a seguir con interés lo que sucede en ambas líneas temporales, en las que al protagonista y narrador los recuerdos de su estancia en la masía durante su adolescencia le ayudan a averiguar la misteriosa desaparición de Aleix, y despiertan su máximo anhelo: vengar una muerte que pudo evitar treinta años atrás y de la que aún se siente responsable, como adelanta la sinopsis. Al igual que en las dos novelas que le preceden, el autor utiliza un estilo narrativo directo, y una prosa clara y cuidada, en la que resalto el dinamismo, naturalidad y viveza de los diálogos, que complementan la información que ofrece la voz narrativa.



Biografía:



Nil Kandel nació en Sabadell y siempre ha vivido cerca de Barcelona. En su infancia se aficionó a los cómics y las novelas de misterio. Le gustaba imaginar historias. En la adolescencia comenzó a escribir relatos breves y poesías en las que intentaba reflejar sus inquietudes. Durante varios años compaginó sus dos pasiones: la literatura y la música. Formó parte de algunas bandas de rock progresivo y compuso varias canciones. Hasta que decidió escribir novelas de suspense y de intriga psicológica. Hasta ahora ha publicado «La última carta de Nagore», «La vida oculta de la ciudad» y «Almas cautivas».


Nota: Datos técnicos, sinopsis y biografía del autor, tomados de Amazon. Fotografía de Nil Kandel tomada de la web de Babelio. Imagen de la Comarca del Bagés con vistas a Montserrat tomada de la web Turismo de Observación. Imagen de los restos del castillo de Blancafort tomada de Wikipedia. 

3 comentarios:

  1. Si son tres las novelas leídas ya del autor, es que es bueno. Me gusta bastante lo que cuentas, ya sabes cuál es mi problema, si fuera audio ni me lo pensaba.
    Esperaré un poco a ver 😉🥰💋

    ResponderEliminar
  2. Hola Paco, pues yo sigo sin estrenarme con el autor y eso La última carta de Nagore la tengo apuntada por tu reseña. Me llaman las historias con secretos familiares, misterio e intriga psicológica y los personajes complejos. Me la llevo apuntada. Besos.

    ResponderEliminar
  3. Pues no me he estrenado con el autor aún y veo que tengo que poonerle remedio, que con cualquiera de sus novelas se acierta.
    Besotes!!!

    ResponderEliminar