viernes, 30 de diciembre de 2022

Reseña La sanadora del emperador, de Luisa Ferro.

 








Datos técnicos:



Título: La sanadora del emperador (Libro II

de la bilogía Donde mueren los ladrones de jade).

Autora: Luisa Ferro.

Editorial: Click Ediciones (Grupo Planeta).

1ª edición: Julio/2022.

ASIN: B0B2ZPZPZP.

Formato: Ebook.

Idioma: Español.

Nº pág.: 402.



Sinopsis:



Los invasores mongoles avanzan de manera inexorable hacia Lin'an, la capital del Imperio. Cualquier resistencia o pacto que ponga fin al conflicto se torna una quimera. Entre tanto, ante Akame se abre un nuevo horizonte después de los terribles acontecimientos que ha vivido: tiene un nuevo clan donde se siente valorada, ha encontrado el amor predestinado y su fama de sanadora crece gracias a sus logros, de tal modo que es requerida en la corte para formar parte del grupo de médicos imperiales. Sin embargo, es consciente de que toda recompensa lleva implícita una renuncia, una elección, un sacrificio. Ahora, mientras el Imperio se desmorona ante sus ojos, tiene que tomar la decisión más difícil de su vida: huir con la corte hacia territorios fieles a la dinastía o quedarse junto al hombre al que ama, algo que pone a prueba su honor como médico imperial y su lealtad como mujer. Pero los retos no terminan, pues sale a la luz un oscuro secreto del pasado que le exigirá reunir todo el valor que le queda y, de ese modo, descubrir su verdadera identidad y cuáles son sus orígenes.

Mas la guerra dirá la última palabra. Tras cuatro años de persecución implacable a la corte, Kublai Kan ordena a todas sus fuerzas navales y unidades terrestres desplegadas en el sur que se dirijan a la isla de Yaishan. Allí se lleva a cabo una de las más cruentas contiendas que decidide la suerte de la dinastía Song del Sur y de los leales a su causa.

La batalla final ha comenzado.




Opinión Personal:





Sin duda alguna, Luisa Ferro es una autora que pasa a engrosar mi cartera de escritores cuya narrativa me atrae tras leer su primera novela. Su bilogía Donde mueren los ladrones de jade pasa es una de mis mejores lecturas de este año 2022, que ya está próximo a concluir. En octubre leí y reseñé en este blog el Libro I, El Pozo de las Luciérnagas (reseña), con cuya trama disfruté mucho. Hoy comparto mis impresiones sobre el Libro II, La sanadora del emperador, que supone un gran colofón a una bilogía muy atractiva, y que se desarrolla en el siglo XIII en China, conocida en aquel entonces como el Imperio del Centro, que sería conquistado por Kublai Kan, e iniciaría la dinastía Yuan. Me gustó mucho el equilibrio que hay entre el trasfondo histórico, el romance y la aventura, aderezados con interesantes dosis de intriga y secretos relacionados con algunos personajes principales de la trama. Una trama en la que la emotividad, los sentimientos y la lucha contra las tradiciones de la China imperial están muy presentes, al igual que el colorido, los sabores y olores propios de este extenso imperio. Otro tanto sucede con las costumbres ancestrales, que atraerán la atención del lector, si bien debe de afrontar la lectura de esta bilogía teniendo muy en cuenta que las tradiciones chinas nada tienen que ver con las propias de la cultura occidental.

Este Libro II está estructurado en 32 capítulos agrupados en 6 partes bien diferenciadas. La protagonista, la sanadora Zhen, vuelve a ser la narradora, al igual que en el Libro I. La invasión de Kublai Kan y su ejército mongol ya es una realidad, al igual que las consecuencias que padecen los miembros de la corte tras la muerte del emperador Duzong. A la par que en la Ciudad Imperial, en Li´nan se incrementa el caos. Los miembros de la familia del sanador Cao Ren, tratan de llevar una vida más o menos normal, pero son conscientes de que su situación cambiará muy pronto, y temen lo que les pueda deparar el futuro incierto que se les presenta. Akame tiene que desplazarse a la Ciudad Imperial y pasar largos meses en el Gran Interior para atender los partos de la honrada consorte, Mariposa Blanca. Le acompaña Longyan, su fiel eunuco. Desde su llegada a los aposentos de Mariposa Blanca, el lector no perderá detalle de las vicisitudes que acompañan a los personajes que transitan por las páginas de La sanadora del emperador.

(Kublai Kan-Emperador China)
Luisa Ferro planifica y desarrolla una trama muy atractiva, y que no tiene desperdicio, porque a  lo largo de los 32 capítulos se suceden episodios que no dan tregua, y guardan mucha relación con la realidad de la invasión mongol, que se adentra cada vez más en el Imperio del Centro. Estuve muy pendiente de lo que le sucedía a Akame, pero también me preguntaba cómo esta invasión afectaría a Cao Ren y a su familia en El Pozo de las Luciérnagas. Otro tanto sucede con el destino que le depara a los miembros de la familia imperial china y a las damas y concubinas que los acompañan, ante las exigencias de Kublai Kan, pese a las negociaciones que se llevan a cabo para que se les respete. En esta subtrama, los acontecimientos se suceden ante la incertidumbre que les espera, porque no se fían del que será nuevo emperador chino. Unos acontecimientos que culminan con la batalla naval de Yamen, de la que estuve muy pendiente, si bien me suponía cuál sería el desenlace. En este sentid, me gustó mucho cómo la describe la voz narrativa, porque ofrece una visión general del combate naval, las decisiones que toman los altos mandos chinos y la respuesta de la escuadra mongol, pese a que era inferior en navíos de guerra. Una batalla en la que el lector es informado de lo que les sucede a los principales personajes, lo que supone un mayor aliciente, sobre todo porque es descrita desde el punto de vista de lo que percibe la sanadora Zhen, quien también, en el capítulo final, que más bien entiendo como epílogo, narra lo que les sucedió a los personajes más allegados, a los miembros de la familia real que fueron protegidos en la flota china y el destino que tuvieron los principales mandos militares.

A lo largo de los capítulos se percibe que la escritora madrileña realizó un exhaustivo proceso de documentación, como lo aclara en la Nota de la Autora que acompaña al cuerpo de la novela, para reflejar en esta bilogía lo que sucedió durante los veintidós años de la vida de la protagonista, que coinciden con las dos últimas incursiones de los mongoles. Unos capítulos en los que tiene muy en cuenta el proceso documental realizado, con el que ajustar la trama de la forma más fiel posible a la historia. Como sucede en estos casos, la autora ficciona los vacíos documentales y las dudas que le surgen sobre el final que pudieron tener algunos personajes históricos, al igual que lo que les sucede a los miembros de la Corte Imperial una vez que la invasión de los mongoles está cada vez más cerca de la Ciudad Imperial. Una ficción que, en mi modesta opinión, entiendo muy coherente porque me dije que todo lo que relata la voz narrativa pudo haber sucedido tal y como se desarrolla la trama, porque en todo momento tuve la sensación de que no se percibían episodios que pudieran considerarse anacrónicos o inverosímiles. Otro tanto sucede con la interrelación entre personajes históricos con los de ficción, porque fluyen con naturalidad, sobre todo si se ofrecen conversaciones entre ellos, si bien entiendo que el encuentro entre unos y otros tiene lugar de forma puntual, sobre todo en escenas que se desarrollan en la Ciudad Imperial o en algunos tramos que corresponden a la huida de miembros de la familia real, concubinas y damas de la Corte, en busca de un nuevo emplazamiento, con el fin de conseguir la supervivencia de la dinastía imperial china.

Al igual que sucede en El Pozo de las Luciérnagas, La sanadora del emperador es una novela muy visual y cinematográfíca, porque encontré las escenas muy vívidas y dinámicas, por lo que consiguen que me sintiera un espectador privilegiado que no pierde detalle de todo lo que sucede a lo largo de los capítulos, en los que destaco las magníficas estampas que describe la protagonista y narradora. Esta sensación se percibe también en el colorido que se refleja a través de las descripciones, sobre todo en lo que se refiere a episodios propiamente costumbristas, en los que la voz narrativa consigue que nos fijemos en los colores de las vestimentas y adornos que lucen chinos en su día a día, al igual que en determinados detalles que sobresalen en la ornamentación de las viviendas, sobre todo si se trata de familias acomodadas, en la belleza de las descripciones que ofrece sobre la Ciudad Imperial, o en estampas que se describen durante la huida a la que me acabo de referir en el párrafo anterior, porque me atrajo la belleza de las ubicaciones que elegía el Gran Consejo para establecer el nuevo destino, ante el empuje de las tropas mongolas. 

(Conmemoración batalla Yamen-China)

Disfruté muchísimo con La sanadora del emperador, el Libro II de la bilogía Donde mueren los dragones de jade. Luisa Ferro afirma que esta bilogía supuso para ella un gran reto. Sin duda alguna, detrás de la historia que protagoniza la joven Akame, o lo que es lo mismo, la sanadora Zehn hay un arduo trabajo de documentación, con el que refleja lo sucedido durante los veintidós años de la vida de la protagonista, en la que influye la invasión mongol, encabezada por Kublai Kan, quien derrocaría a la dinastía Song del Sur e inicia la dinastia Yuan. La sanadora del emperador es la historia apasionante de una mujer que lucha contra las tradiciones de la China Imperial, con la dificultad añadida de que sus aspiraciones se enfrentan a un período muy convulso, porque los tambores de guerra presagian que la invasión mongol es un gravísimo pelígro para la continuidad y seguridad del Imperio del Centro.

El lector se encontrará también con un magnífico fresco de la sociedad china de la época, de la que me interesé sobre todo por la práctica dolorosa de los pies de loto de las mujeres a la que eran sometidas. También por el papel de la mujer en el concubinato, muy arraigado en esta época imperial, en el que estuve muy pendiente también en la relación que mantienen entre ellas, por el lugar preferente que guardan con el esposo, al igual que las funciones que les corresponden según su rango. Otro tanto sucede con el papel que desempeñan los eunucos, tanto en la Ciudad Imperial como en las familias cuyo poder adquisitivo les permite tener uno o varios a su servicio. Unos eunucos de los que se aprovechan de las dotes que poseen, pero a los que también se les tiene como seres inferiores. Al igual que sucede en El Pozo de las Luciérnagas, en La sanadora del emperador supone un gran aliciente recrearse con el día a día de los chinos en aquel entonces, sobre todo desde que son conscientes de que la invasión mongol es un hecho, si bien procuran continuar con sus costumbres. Una sociedad que tiene muy en cuenta en sus costumbres las reglas del confucionismo a las que aluden en las diversas facetas de la vida, incluidas las relaciones sentimentales, porque son más partidarios de los matrimonios concertados, por el beneficio que puede aportar a las familias de los contrayentes.

La sanadora del emperador es una novela en la que, a lo largo de los 32 capítulos en que se estructura su desarrollo, tiene lugar una trama muy atractiva, en la que, se suceden episodios que no dan tregua al lector. Esto origina que el ritmo de lectura es fluido, por lo que apenas decae el interés por todo lo que sucede en las seis partes en las que están estructurados los capítulos a los que me acabo de referir al comienzo de este párrafo. De nuevo el lector se encontrará con personajes muy fuertes, diría que de carne y hueso, en el que cobran protagonismo las diversas mujeres que transitan por sus páginas, y pertenecen a las diferentes clases sociales del Imperio Central. Al igual que en El Pozo de las Luciérnagas, la lectura es adictiva y de carácter didáctico, por la claridad con la que explica el día a día de la sociedad china del siglo XIII, al igual que los episodios que tienen lugar en torno a la invasión mongol. El relato de la voz narrativa se me hizo cercano y ameno, lo que ayudó a que me sintiera muy cómodo durante las descripciones que ofrece sobre lo que sucede a lo largo del desarrollo de la trama. Una trama en la que las sensaciones, las emociones y los sentimientos están muy presentes, sin olvidarme de secretos sorprendentes, que añaden interés a lo que se esconde tras su revelación. Sin duda alguna, Luisa Ferro tiene un estilo narrativo que me resultó muy absorbente, por lo que en todo momento consiguió que me interesara por lo que sucede a lo largo de los capítulos.



Biografía:



Luisa Ferro (Madrid) Sus relatos han conseguido diferentes premios y menciones en certámenes como «El tren y el Viaje», Renfe 2008; «Ciudad Getafe» 2009 (Semana Negra); «Ser Madrid Sur» 2009, Cadena Ser; «María Moliner» 2010; «Domingo Santos» 2011, entre otros.

Antologías: Crónicas de la Marca del Este. Vol. II (Holocubierta Ediciones, 2011); Antología Z. Vol.6 (Dolmen Editorial, 2012); Legendarium III (Ediciones Tombooktu, 2012); Fantasmagor...


Datos técnicos:  Sinopsis, biografía y fotografía de la autora tomada de la web de Click Ediciones. Imagen de Kublai Kan tomada de la web de La Vanguardia. Imagen Parque conmemoración batalla Yamen tomada de Wilipedia.













viernes, 16 de diciembre de 2022

La tumba de Vera Thwait, de Ana Bolox.

 













Datos técnicos:





Título: La tumba de Vera Thwait.

Autora: Ana Bolox.

Autoeditado Amazon (enlace).

1ª edición: Marzo/2019.

Formato: Ebook.

ASIN: B07PKJ21JX.

Idioma: Español.

Nº pág.:128.

 

Precio: 2,99 € en ebook.

              8,99 € en papel.






Sinopsis:




La vida de Crispin Horsfall en Wettingham no es tan apacible como él quisiera. Observador y con inquietudes científicas, Crispin aspira a una existencia tranquila dedicada a sus hobbies, como descifrar inscripciones funerarias en el pequeño cementerio local, esquivar los planes casamenteros de su madre o esperar algún que otro paquete misterioso del cartero. Pero cuando es enviado a la mansión Royceston, en misión maternal, para resolver el despido improcedente de una criada, nada le hace sospechar que acabará por descubrir un asesinato. Quizá habría hecho mejor en quedarse unos días más en Harrogate, tomando los baños con tía Cassia.

 

 


Opinión Personal:


 



De Ana Bolox leí su libro de relatos Carter & West (reseña), en la que dio a conocer dos de los sabuesos de sus novelas de misterio, todas ellas ambientadas en Inglaterra. De nuevo me acerco a su narrativa con la lectura de La tumba de Vera Thwait, con la que completo mi participación en el reto literario Serendipia Recomienda, en la edición del presente año. En esta novela corta da a conocer a Crispin Horsffal, un detective casual muy peculiar que vive en uno de los pueblos más antiguos de la campiña inglesa, Wettingham, que linda con el parque nacional de New Forest, y que algunos de sus habitantes aprovechan  para realizar observaciones ornitológicas.

(Parque Nacional de West Forest-Inglaterra)
Ana Bolox planifica y desarrolla una novela que va de menos a más. Me atrajo mucho la atención el que buena parte de ella tiene un carácter costumbrista, por lo que en más de una ocasión me pregunté qué misterio podía haber en una localidad en la que apenas sucedía nada interesante, a parte de los chismorreos y las reuniones sociales de sus habitantes. En este sentido, me dije que los peculiares personajes de Wettingham —sobre todo por las manías y curiosas aficiones que caracterízan a algunos de ellos— me recodaban en cierto modo a los creados por el novelista inglés E. F. Benson, y que pululan en torno a dos personajes de la burguesía rural, Mapp y Lucía en el pintoresco villorrio de Risheholme. Pero no se inquiete el lector, porque el misterio llegará, ya lo creo, y con grandes dosis de interés en torno al crimen que se menciona en la sinopsis. Un crimen que, con sus grandes dotes de observación, descubre Crispin Horsffal, y que mantendrá en vilo a sus vecinos, por la sorpresa que les origina semejante delito. Un asesinato al que llega tras realizar una investigación menor, en la que reúne las pruebas necesarias con las que hacer entrar en razón a Alfred Royceston para que la doncella que limpia la mansión recupere su empleo, porque la acusó de no limpiar con la presteza debida.

A lo largo de los 8 capítulos en los que se estructura el desarrollo de la trama, el narrador omnisciente presenta a los habitantes de esta población de la campiña inglesa, a través de los Ana Bolox refleja el día a día de la sociedad que la conforma. Entiendo que los personajes que conforman el elenco de esta novela mantienen una relación asidua con Crispin Horsffal, y que supongo se corroborará en las próximas entregas protagonizadas por este singular pero muy observador detective. Cada uno de ellos atrajo mi atención por las características peculiares que los distingue, y que conforman un conjunto en el que parece que todos tienen muy claro el papel que les corresponde, incluso Septimus Caldfield, a quien califican como ermitaño, por la solitaria y desordenada vida que lleva. Septimus es amante de la ornitología y  mantiene una cierta amistad con Crispin.

Sin duda alguna, Crispin Horsffal es un singular detective que se distancia un tanto de sus colegas, ya sean profesionales o aficionados a resolver casos, porque creen tener las técnicas y habilidades necesarias para poder solucionarlos, sin tener en cuenta que incluso pueden poner en peligro su integridad física. Es un personaje del que estuve muy pendiente, no sólo por su particular personalidad, sino también por la capacidad de observación que tiene a la hora de fijarse en detalles que no perciben los demás. En este sentido, me llamó mucho la atención el que se aproveche de métodos que utiliza cuando ciertas circunstancias desagradables le conducen a distraerse y relajarse con determinados métodos, y que comprueba que le sirven de gran ayuda en las pesquisas que lleva a cabo. Pero el protagonista también tiene que enfrentarse a la relación protectora que le dedica su madre, Edwina Horsffal, quien lo trata como si se quedara anclado en la infancia. Una infancia que, sin embargo, se percibe en ciertas aficiones de las que es muy celoso, por temor a que descubran sus particulares gustos, sabedor de que sus convecinos se mofarían de él. Crispin es también algo así como el soltero de oro de esta pequeña población, porque creen que es el candidato idóneo para desposar a Ada,  la hija del acaudalado Alfred Royceston.

(Harrogate-Inglaterra)
La tumba de Vera Thwait tiene una trama que me resultó entretenida, pese a que una parte de su desarrollo es de corte costumbrista. Los habitantes de Wettingham son conscientes de que cualquier episodio que le suceda a cualquiera de sus convecinos, no tarda en ser conocido por sus conciudadanos, dado que hay varias cotillas que enseguida lo difunden, con el añadido de que pueden provocar comentarios irónicos o malintencionados, que originan cierto malestar en los afectados al respecto. 
 
Los 8 capítulos en los que se estructura la trama se leen de una sentada, porque son muy dinámicos, ya que están subdivididos en subcapítulos, por lo que el lector recibe una información directa de todo lo que sucede en los distintos escenarios que lo conforman. Al predominar los diálogos frente a la narración origina que el ritmo de lectura sea muy fluido, sobre todo desde que Crispin Horsffal descubre el crimen que altera la tranquilidad de Wettingham. Unos diálogos que son cortos y muy vivos, y que ayudan a conocer mejor a los personajes, al igual que se percibe la relación que hay en ellos. El lector estará también pendiente de la relación que mantiene el protagonista con Ada Royceston y la polaca Irena Kozlow, que «recaló en esta pequeña localidad medio año antes como ama de llaves de Abel Oberton, un viudo entrado en años» (cap. I), y de quien se insinúa que es la barragana de este personaje.

Sin duda alguna, Ana Bolox perfila un personaje que incita a estar muy pendiente de su evolución en las siguientes entregas que protagonice este singular y observador detective. El desarrollo de la trama me resultó muy visual pese a las descripciones breves y concisas, pero que me ayudaron a percibir con nitidez las escenas que protagonizan los personajes que transitan por sus páginas. Unas descripciones con las que también disfruté de las preciosas estampas que describe el narrador omnisciente, sobre todo las que tienen lugar en el parque natural de New Forest. En relación a lo que acabo de comentar, en todo momento sentí que realizaba un viaje literario a la época en la que se desarrolla la trama. El hecho de que en el primer capítulo se mencione a la primera mujer que ponía un pie en la Antártida, Carolina Mikkelsen, da a entender que la trama tiene lugar en el año 1935, en el que tiene lugar este hecho histórico. La tumba de Vera Thwait es una novela que no dudo en recomendar, porque la encontré muy de corte clásico y  con un detective que, en cierto modo, sigue la estela del archiconocido Hercules Poirot, dada la sagacidad con la que percibe en sus investigaciones detalles en los que no se fijan los demás personajes que transitan por las páginas de La tumba de Vera Thwait.



Biografía:



Ana Bolox es licenciada en filología inglesa por la Universidad Autónoma de Madrid. Ha sido traductora de textos científicos y en la actualidad ejerce de profesora de idiomas, español e inglés.

En 2015 publicó el primer volumen de una serie de relatos de ficción policíaca bajo el título genérico de Carter & West, cuyo escenario se sitúa en la Inglaterra de la posguerra. También ha hecho incursiones en el terror psicológico con un relato titulado El regreso, publicado en la revista Almiar.

Forma parte del equipo de redacción de la revista MoonMagazine, para la que publica mensualmente artículos en la sección Construye tu novela con Ana Bolox, y colabora activamente en blogs relacionados con el mundo de la escritura.

Desde su página de autora, también imparte cursos y talleres para la escritura de novela policíaca -> https://anabolox.com/ 

 

Nota: Datos técnicos y sinopsis tomados de Amazon. Fotografía de la autora tomada de la web Portal del Escritor. Imagen del Parque Nacional de New Forest tomada de la web New Forest. Imagen de Harrogate tomada de la web FSS Property.





martes, 13 de diciembre de 2022

Reseña El rodar de un agua interminable, de Sara Mañero.

 










Datos técnicos:


Título: El rodar de un agua interminable.

Autora: Sara Mañero Rodicio.

Editorial: Maluma.

1ª edición: Mayo/2022.

Encuadernación: Rústica con solapas.

ISBN: 978-84-125230-9-6.

Idioma: Español.

Nº páginas: 496.



Sinopsis:



«Quisiera hablarte del mar, pero no puedo. Se me olvidó cómo se mecen las olas. Sin embargo, aún recuerdo el sonido del agua al rasgar las piedras de la playa en una despedida perpetua». Con estas palabras Juana abre la novela, adentrándonos en los repliegues de una memoria, cuyo eco resuena en otra posterior, la de Carmina, con la que se entrelaza.
 En el devenir de unos años convulsos, dos mujeres afrontan su mundo desde la mirada de quien se niega a ser mero testigo, y nos desgranan el acontecer de sus siglos, el XIX y el XX, hasta fundir su historia con la Historia.

Dos mujeres, dos épocas, dos destinos divergentes y un juego de espejos que acaba por confluir de manera insospechada. Dos conciencias de mujer, cada en su tiempo, en un fluir similar al de ese mar que tanto añora una de las protagonistas y que invita a una reflexión sobre las raíces de nuestro propio presente.



Opinión Personal:



El rodar de un agua interminable es la quinta novela que leo de la escritora madrileña afincada en la provincia de Valencia, Sara Mañero Rodicio. En mi modesta opinión, entiendo que uno de los rasgos que definen sus trabajos literarios es que se alejan de las pautas que marcan la narrativa actual, si bien el celo con el que planifica y desarrolla cada trama, origina que el lector se encuentre con historias consistentes, cargadas de verosimilitud y rasgos didácticos, aunque tampoco faltan giros narrativos, e incluso sorpresas que no esperamos. Sorpresas que, sin duda, provocan en nosotros el efecto deseado, porque echan al traste la impresión que nos provoca el devenir de la historia de turno lo que, en mi caso, origina que me entusiasme y admire el recuro utilizado por la autora. Me gusta mucho la forma en la que transmite la información histórica, porque buena parte de ella se ofrece a través de diálogos entre personajes que están versados en la materia de turno, y quienes sienten interés en recibirla, porque la curiosidad se apodera de ellos, ya que son conscientes de que les puede ser muy útil la conversación que mantienen. Otro rasgo que caracteriza su narrativa es la fuerza que emana de los personajes, carismáticos, de carne y hueso, y que no resultan indiferentes, sobre todo si percibimos que están adelantados a su tiempo.

(Palacio de Riofrío-Segovia)
Me gusta mucho la portada de  El rodar de un agua interminable. Una portada en la que figuran el rostro de dos mujeres que parecen mirarse, si bien sus retratos indican que pertenecen a dos épocas diferentes. Dos mujeres que, como adelanta la sinopsis, protagonizan lo que se conoce como un juego de espejos, porque el lector no tarda en comprobar como, cada una en su tiempo, siente que forma parte del período histórico que les toca vivir, y que les lleva a involucrarse en el mismo dados los hechos convulsos que marcan la vida del país en ambos siglos. Unos hechos convulsos que les afectan de una forma muy directa, sobre todo por la implicación que en ellos tienen, de una forma  u otra, quienes les rodean. Hechos como la Primera Guerra Carlista, la Sargentada, el exilio de la regente María Cristina o varios pronunciamientos militares en el siglo XIX, y la cruenta Guerra Civil Española y las miserias de la posguerra en el XX. Al protagonizar dos historias paralelas en períodos diferentes, en más de una ocasión me pregunté si las unía algún vínculo, incógnita que se resuelve a medida que se suceden los capítulos. Sin duda alguna, es uno de los grandes atractivos de esta novela, porque no era esa la idea que tenía sobre la relación que podía haber entre ambos personajes femeninos.´

Sara Mañero planifica y desarrolla dos subtramas muy atractivas, que captan la atención del lector desde las primeras páginas. Dos subtramas desarrolladas en el marco de una ambientación espacio-temporal exquisita, que consigue que el lector realice un viaje literario en el tiempo a la época en la que se desarrollan. La que abarca buena parte del siglo XIX comienza en una aldea de Galicia, en la que conocemos a Xoana, quien es reclamada para su servicio por la propietaria del pazo grande, dona Pilar, la señora viuda, al que se desplaza para huir de los calores veraniegos de la Corte. Una niña que siente mucha tristeza al comprobar cómo su familia acepta la propuesta y se desprenden de ella como si fuera una verdadera desconocida para sus progenitores. Con el tiempo, doña Pilar solicita prohijarla, porque quiere que se convierta en su ama de compañía, con las funciones que tiene que desempeñar en este cargo de responsabilidad, al tratarse de una dama que forma parte de la Corte Real. En el siglo XX nos encontramos con Carmina, quien vela el cadáver de su abuela, y no permite que su criada y amiga Leandra vaya  al tanatorio a despedirse de la que fue su señora y amiga, porque ya es una mujer mayor y, dado su delicado estado de salud, le preocupa la reacción que pueda producir en ella su asistencia al velorio de su señora.

(Palacio de Cervellón-Valencia)
Tal y como se suceden los capítulos de El rodar de un agua interminable, me dije en varias ocasiones que encontré influencias con la novela de Miguel Delibes, Cinco horas con Mario. Tras el fallecimiento de su abuela Carmen, a quien su nieta Carmina vela en el tanatorio, repasa la vida de su antecesora a través de un narrador omnisciente, al igual que los hechos políticos y sociales del país que influyeron en su devenir y en la relación entre ambas. La primera línea también tiene algunos rasgos clásicospor el papel que les correspondía desempeñar a los hijos en aquél entonces, según el escalafón que ocupaban en el árbol genealógico familiar, y si eran varones o mujeres. También hay alusiones literarias, como la relativa a la conmoción que provocó la muerte de Larra, o la quema de libros durante la dictadura franquista, que provocó revuelo en quienes no comprendían por qué eran echados a la hoguera obras que el régimen consideraba prohibidos, porque atentaban contra la moral de la población. Una barbaridad que se compara con el famoso episodio de El Quijote.

No tardé en empatizar con las dos protagonistas femeninas sobre las que gira el eje de cada subtramaSara Mañero construye dos personajes femeninos perfilados con mucha fuerza, tanto física como psicológica, que me mantuvieron muy pendiente de los episodios que protagonizan. No dejan indiferente al lector, quien asiste a la evolución de la que encabeza la primera línea temporal, y obtiene información sobre el personaje pasivo al que se refiere el narrador omnisciente en la segundaEn la subtrama que se desarrolla en el siglo XIX nos encontramos con un personaje como Juana — Xoana, en su aldea gallega—. Me resultó un personaje muy interesante, sobre todo por cómo se amolda a la nueva vida que marca su devenir, su relación cada vez más estrecha con doña Pilar y el interés que pone en todo lo relacionado con la administración del hogar y la vida social de su señora. Con ella se traslada a su residencia en La Granja, en donde se instala la Corte durante el estío, y al palacete en el que reside doña Pilar buena parte del añoJuana siente mucho interés por la información que recibe de Raimundo por todo lo que sucede en un período tan convulso como fue el siglo XIXal igual que por la labor que desempeña Tomás, a quien había conocido en el Palacio de RiofríoEn el siglo XX me atrajeron mucho el triángulo formado por la abuela Carmen, su nieta Carmina y Leandra, la criada. Las tres mujeres protagonizan episodios de interés, en los que en los que estuve muy pendiente del roce que mantienen abuela y nieta, que se incrementará con el paso de los capítulos, y del papel que desempeña Leandra, un personaje que sirve como verdadero apagafuegos ante las desavenencias que tienen lugar entre ambas. La ideología de una y otra influye mucho en su relación, sobre todo porque Carmina está muy convencida de los ideales que defienden los vencedores de la Guerra Civil, está afiliada a Falange y comprometida con un falangista. Con el paso de los capítulos, y otros episodios que presencia en el país vecino, relacionado con los maquis y los republicanos huidos, hacen que se tambalee la firmeza de su convicción política.

(Plaza de Pedro Zerolo-Plaza del Guá-Madrid)
Me gustó mucho El rodar de un agua interminable. El lector se encontrará con una novela en la que dos mujeres protagonizan sendas historias que transcurren a lo largo de dos siglos, en los que les toca vivir tiempos muy convulsos, que influyen en el devenir de sus vidas. Una novela en la que, de forma intermitente, se mencionará también al mar, a modo de metáfora, porque su sonido le recuerda a la protagonista de la primera línea temporal a su tierra natal. En la primera línea temporal me llamó mucho la atención la voz narrativa, que en primera persona le cuenta a alguien las vicisitudes que la acompañan. Un destinatario que me mantuvo intrigado durante buena parte de esta subtrama, porque me preguntaba quien sería la persona a la que relata con interés todo lo que le sucede durante su ciclo vital. Un ciclo vital en el que es trascendental doña Pilar, que es miembro de la Corte Real y acostumbra a pasar los veranos en el pazo que tiene en la aldea gallega en la que vive Juana quien, tras la aprobación de sus padres, trabajará a su servicio. En la segunda línea temporal no dejan indiferente los encuentros y desencuentros entre abuela y nietaUna línea temporal en la que se desvelarán algunos secretos que guardan relación con la fuerte personalidad de la abuela, sobre todo durante la Guerra Civil, porque a Carmina la cogió al otro lado de los Pirineos, en París. Me gusta mucho el estilo narrativo de Sara Mañero, muy cuidado, directo y en el que utiliza un lenguaje que se adapta a la época que les toca vivir a los personajes, al igual que a la clase social a la que pertenecen. Un estilo narrativo que imanta, porque el narrador de turno me involucra de pleno en el desarrollo de la trama. Una trama en la que me gusta la técnica del diálogo que utiliza para contar los episodios históricos que viven los personajes o que, por un motivo u otro, se interesan por ellos, lo que me provoca la sensación de que tiene un carácter didáctico, al igual que sucede en El sueño del árbol.


Biografía:


Sara Mañero es Licenciada en Filología Inglesa y Doctora en Filología Hispánica. El Arcipreste de Talavera ha centrado sus estudios y publicaciones académicas, dando lugar a una monografía galardonada por la Real Academia. Como traductora, cuenta tanto con publicaciones de textos dramáticos y poéticos, como con adaptaciones teatrales. En el campo de la narrativa, su primera novela, Mientras sorprendan los días, presenta la historia compleja de tres personajes en crisis cuyo destino confluye por caprichos del azar y en la que presente y pasado se entremezclan a lo largo de una única jornada. La segunda, El sueño del árbol (reseña), ofrece la historia cercana de Filipinas a través de la mirada de un muchacho gallego y de su viaje iniciático, origen del devenir de varias generaciones. Atrapando la luz (reseña), la tercera, rinde homenaje a las mujeres que se adelantaron a su época, que se entregaron a su pasión, en su caso la fotografía, como medio de vida y vivieron inmersas en el acontecer de un tiempo cambiante. Del sol llegaron sombras (reseña) integra la conquista de Perú, desde los ojos del Inca Garcilaso, en la búsqueda policial de una joven desaparecida. En Todo a un tiempo (reseña), con la lluvia convertida en personaje, se entrecruzan las vidas de los protagonistas, obligados a afrontar su presente, con la de las amanuenses de un códice robado que se debe recuperar, atestiguando encuentros y desencuentros entre las comunidades que habitaron nuestro suelo. Cuenta también con diversos relatos publicados.


Nota: Datos técnicos, sinopsis y biografía de la autora tomados de la web de la editorial Maluma. Imagen del Palacio de Riofrío tomada de la web del Patrimonio Nacional. Imagen del Palacio de Cervellón tomada de Wikipedia. Imagen de la Plaza de Pedro Zerolo o del Guá, tomada de la web de El Diario. Fotografía de Sara Mañero tomada de la web de la editorial Verbum. 


lunes, 12 de diciembre de 2022

Lectura de la semana 50/2022: La sanadora del emperador, de Luisa Ferro.

 











Comenzamos la antepenúltima semana del año. Le toca el turno a La sanadora del emperador, de Luisa Ferro. Es la segunda parte de la bilogía que lleva el título Donde mueren los ladrones de jade. El Libro I es El pozo de las Luciérnagas, y me gustó mucho. Ya leí la mitad del Libro II y también me está gustando mucho. Lleva camino de ser una de mis mejores lecturas de este año. 


Sinopsis:


Tras el Libro I, El Pozo de las Luciérnagas, llega el desenlace de la bilogía «Donde mueren los dragones de Jade» con el Libro II, La sanadora del emperador.

Los invasores mongoles avanzan de manera inexorable hacia Lin'an, la capital del Imperio. Cualquier resistencia o pacto que ponga fin al conflicto se torna una quimera. Entre tanto, ante Akame se abre un nuevo horizonte después de los terribles acontecimientos que ha vivido: tiene un nuevo clan donde se siente valorada, ha encontrado el amor predestinado y su fama de sanadora crece gracias a sus logros, de tal modo que es requerida en la corte para formar parte del grupo de médicos imperiales. Sin embargo, es consciente de que toda recompensa lleva implícita una renuncia, una elección, un sacrificio. Ahora, mientras el Imperio se desmorona ante sus ojos, tiene que tomar la decisión más difícil de su vida: huir con la corte hacia territorios fieles a la dinastía o quedarse junto al hombre al que ama, algo que pone a prueba su honor como médico imperial y su lealtad como mujer. Pero los retos no terminan, pues sale a la luz un oscuro secreto del pasado que le exigirá reunir todo el valor que le queda y, de ese modo, descubrir su verdadera identidad y cuáles son sus orígenes.

Mas la guerra dirá la última palabra. Tras cuatro años de persecución implacable a la corte, Kublai Kan ordena a todas sus fuerzas navales y unidades terrestres desplegadas en el sur que se dirijan a la isla de Yaishan. Allí se lleva a cabo una de las más cruentas contiendas que decidide la suerte de la dinastía Song del Sur y de los leales a su causa.

La batalla final ha comenzado (402 pág., ebook).



lunes, 5 de diciembre de 2022

Libros leídos y reseñados en noviembre de 2022.


 





Este mes de noviembre fue un poco más desganado de lecturas y reseñas. Han sido un total de 3 los libros reseñados y 4 los leídos


Los leídos: 


                  








Los reseñados:




-La corona del mar, de Julio Alejandre Calviño.


-El misterio Bartlett, de Louis Tracy


-Cuestión de suerte, de Pablo de Aguilar González.




Avance retos literarios en los que participo: 



-VI Edición Reto Nos gustan los clásicos: (8/8) (100%). Reto completado.


-Autores de la A a la Z (2022): (19/24) (79%) (+1). 2 opcionales.


-Reto 25 españoles (2022):  (40/25) (+2) Completado.


-Reto Leemos España provincia a provincia (2022): 15/52. Sin avance.


-Reto Serendipia recomienda (2022):  (2/3) (67%). Sin avance.





                

                 



jueves, 24 de noviembre de 2022

La corona del mar, de Julio Alejandre Calviño.

 











Datos técnicos:



Título: La corona del mar.

Autor: Julio Alejandre Calviño.

Editorial: Pàmies.

1ª edición: Mayo/2022.

Encuadernación: Rústica con solapas.

ISBN: 978-84-18491-95-5.

Idioma: Español.

Nº páginas: 592.




Sinopsis:




Año 1580.


El rey de Portugal muere sin descendencia y el trono vacante se lo disputan sus sobrinos Antonio de Avis y Felipe II de España. El rápido triunfo de este último en la Península traslada el conflicto a las islas Azores. Francia e Inglaterra, celosas de una unión dinástica que pondría bajo una sola corona un inmenso imperio, apoyan al pretendiente portugués y llevan la guerra de corso a todos los rincones del océano.

Un inexperto y presuntuoso oficial que zarpa de Veracruz y pretende cruzar el Atlántico para casarse por conveniencia, una pareja de enamorados que verá peligrar sus esperanzas, dos familias divididas por sus lealtades, un corsario que ambiciona ganar una flota, soldados de fortuna, espías de todas las naciones, contrabandistas y sanguinarios piratas son los protagonistas de esta novela. Sus destinos se entrecruzan sobre el tablero de un conflicto que amenaza con cambiar el mundo conocido. Con ellos viviremos aventuras corsarias, historias de amor, viles traiciones y feroces combates.

La corona del mar es una trepidante novela de aventuras que nos lleva desde el golfo de México y los puertos del Caribe hasta las islas Azores, verdadera puerta de ultramar, escala obligada de las flotas del oro y llave para la hegemonía del Atlántico, donde tendrá lugar la primera gran batalla naval de la era moderna.




Opinión Personal:




Quizás fueron las novelas de aventuras las que más me atrajeron en mi adolescencia, época en la que tuve autores de cabecera como Emilio Salgari, Robert Louis Stevenson, Julio Verne o Mark Twain. Por eso, cuando me encuentro con obras en las que está muy presente este género literario, no dudo en enfrascarme en su lectura. La corona del mar, la nueva novela del escritor madrileño, afincado en tierras de la Baja Extremadura, Julio Alejandre Calviño, incluye elementos propios de este género literario. En La corona del mar también debe entenderse la aventura en su sentido más amplio, dado el futuro incierto que le espera a Gabriel del Puerto, porque su padre había concertado un matrimonio con la hija de Caetano Henriques, un próspero ricohombre de la isla de Terceira, en las Islas Azores (Portugal). La trama tiene el atractivo de que se desarrolla en un período histórico concreto (1580-1583), con el aliciente de que el narrador omnisciente relata todo lo que sucede una vez que el rey de Portugal muere sin descendencia y el trono vacante lo disputan sus sobrinos Antonio de Avís, prior de Crato, y Felipe II, rey de España.

(Angra-Isla Terceira-Azores-Portuga)
Al igual que sucede en Las islas de Poniente (reseña), el lector estará muy pendiente de las peripecias que acompañan a los principales personajes que atraen su atención a lo largo de los quince capítulos más el epílogo en el que se estructura el desarrollo de la trama. Una trama en cuyo desarrollo me sentí como un espectador privilegiado que presencia todo lo que sucede desde su atalaya particular, como si fuera un personaje más de los que transitan por sus páginas. Unas páginas a través de las que la voz narrativa describe unas escenas muy visuales, por lo que no perdía detalle de todo lo que sucede en esta fascinante travesía, al igual que de los episodios que tienen lugar, sobre todo, en la isla Terceira, en las Azores. Una isla en la que tiene la sorprendente batalla de Salga, con la que los portugueses consiguen una victoria que les eleva la moral. Sin embargo, será determinante para el destino de la corona portuguesa la primera gran batalla naval de la era moderna, en el Océano Atlántico, el 26 de junio de 1582, en aguas de la isla Terceira y de San Miguel, porque es un combate marítimo que difiere de los muchos que tuvieron lugar en el Mar Mediterráneo a lo largo de la Historia. Para obtener una nueva victoria con la que dar el golpe definitivo al prior de Crato, ante su insistente pretensión de coronarse como rey de Portugal, Álvaro de Bazán es consciente de cuándo tiene que enfrentarse a las fuerzas antonianas y sus aliados para tomar la isla de Terceira.

Mientras me enfrascaba en la lectura de La corona del mar tuve la sensación de encontrarme con escenas que me recordaban a las novelas de piratas de Stevenson o de Salgari, si bien en esta ocasión tienen patente de corso. Aunque también me dije que uno de los dos protagonistas, el pretencioso joven español Gabriel del Puerto, prisionero en su particular isla de If, al ser apresado por los corsarios que abordaron las dos embarcaciones a las que habían concedido un permiso suelto para cruzar el Atlántico en pequeños grupos. Su padre le había concertado un matrimonio con la hija de Caetano Henriques, un próspero ricohombre de la isla de Terceira, en las Islas Azores (Portugal). Este matrimonio concertado origina una subtrama romántica, aunque no al uso, por lo que me preguntaba si este enlace pactado tendría el final esperado, o se vería alterado. En este sentido, Julio Alejandre mantuvo mi atención tanto en las desgracias que acompañan a Gabriel del Puerto, como por las decisiones que toma en el plano sentimental su prometida, Marcia Henriques, porque rechaza este enlace impuesto, ante los comentarios vehementes y contrarios que expone cuando los episodios se lo permiten. Una duda que se incrementa ante la tardanza de la llegada de su prometido, toda vez que la nao en la que viaja no figura entre la flota de la Carrera de Indias, que tiene paso obligado por las Azores. A lo que acabo de comentar en este párrafo, añado que es un gran aliciente el hecho de que el lector tiene una información más directa de lo que les sucede a los personajes principales, lo que le incita a estar muy pendiente de la evolución de los acontecimientos que les afectan de una forma muy personal.

(Batalla naval Azores-S. XVI)
El escritor madrileño, aunque residente en la Baja Extremadura, cuida con esmero la ambientación espacio temporal para que, mientras se sumerge en la lectura de esta novela, el lector sienta que realiza un viaje literario en el tiempo a la época en la que tienen lugar los hechos que relata la voz narrativa omnisciente. De nuevo se encuentra ante un fresco en el que se refleja diversos aspectos de la vida en el siglo XVI, en este caso centrado sobre todo en el día a día que viven los habitantes de las Azores, más en concreto en la isla Terceira, pero también se relatan escenas que se desarrollan en la isla de San Miguel. Una isla a la que nos trasladaremos en varios episodios, sobre todo desde que la situación se pone fea para Duarte Salazar, quien mantiene una relación sentimental con Marcia Henriques, por lo que se relatarán en torno a este personaje una serie de vicisitudes que cambiarán drásticamente su destino, y le llevarán a tomar parte activa en el enfrentamiento entre los dos pretendientes a la corona portuguesa. Junto con la aya de Marcia Henriques, paseé por las calles y los edificios que más trascendencia tienen en Angra (isla Terceira). También por el asentamiento corsario de Sainte-Lucie, en la Florida, en donde la vida de Gabriel empezará a tomar un nuevo rumbo. Es tomado para su servicio por el señor Dunn, barbero de este asentamiento, y su cada vez más afianzada amistad con Martín Robledo, que dirigía los hombres de pelea de la nao La Virgen de las Nieves, servirán de espoleta para que empiece a tomar cuerpo su plan para vengar a su familia, quienes viajaban en la nao que acabo de mencionar, abordada por los corsarios de Jean Ricard. Vanganza para la que también se sirve de la relación pasional que mantiene con Yabama, una mestiza que vive en el asentamiento, unida a uno de los cabecillas corsarios.

Al igual que el autor cuida con esmero la ambientación espacio temporal, otro tanto sucede con los personajes que transitan por las 592 páginas que conforman La corona del mar. Tal y como los describe la voz narrativa, de carne y hueso, porque el lector se familiarizará con su forma de ser y actuar a lo largo de los capítulos. Esta sensación se mantiene tanto en los personajes principales como en los secundarios, por el papel que desempeñan todos ellos en el transcurso de los acontecimientos, sobre todo a medida que se recrudece el enfrentamiento entre felipistas y antonianos, y los habitantes de las Azores se decantan por uno u otro bando, con las consecuencias que para muchos de ellos tendrá manifestar su afiliación, si bien esta situación variará conforme los derroteros que tomen los enfrentamientos armados entre ambos pretendientes.

Sin duda alguna, Gabriel del Puerto, Duarte Salazar y Marcia Henriques, son tres personajes trazados con mucha fuerza y que dan mucho juego a la trama, sobre todo a medida que las subtramas que conforman esta novela confluyen, con unos capítulos finales que incitan a estar muy pendiente sobre la relación que toma Marcia Hernandes en cuanto a su futuro sentimental. En la Nota histórica que acompaña al cuerpo de la novela, el autor aclara que buena parte de los personajes que transitan por sus páginas tienen veracidad histórica, aunque en lo que respecta a sus descripciones físicas, como las de Álvaro de Bazán o el Prior de Crato parte de obras pictóricas que encontró las más adecuadas para trazar sus rasgos físicos, o el gobernador Manuel de Silva, y su afición a las mujeres, como se podrá comprobar en determinados episodios de la novela. Me pregunté si también serían reales los corsarios Jean Ricard o el capitán Sackfield, veracidad que aclara en la nota histórica a la que me refiero en este párrafo. El autor describe con naturalizad la relación entre los personajes históricos y ficticios, entre los que resalto el trato que mantiene Álvaro de Bazán con Duarte Salazar, la tensa relación entre Jean Ricard y el capitán Sackfield con Gabriel del Puerto, sobre todo a medida que es consciente de que su venganza está cada vez más próxima, dada la información que recaba sobre eldestino final de su familia. Junto al papel atractivo que desempeñan en la trama los tres personajes mencionados en el primer párrafo, atrajo mi atención la afiliación que adoptan Gabriel del Puerto y Duarte Salazar en el enfrentamiento entre los dos pretendientes al trono de Portugal, motivadas por intereses muy diferentes.

(Antonio de Avís-S. XVI-Portugal)
Disfruté mucho con la lectura de La corona del mar, a la que, en mi modesta opinión, defino más como una historia apasionante que trepidante, si bien el ritmo de lectura es fluido e incluso me resultó muy fluido en determinadas fases de la trama, sobre todo a medida que los acontecimientos toman el rumbo esperado por los principales personajes, en relación con los objetivos que se habían marcado para que los planes trazados a conciencia condujeran al desenlace esperado. Dado el período convulso en el que se desarrolla la trama, muestran las dos caras de la condición humana, porque no dudan en presentar el lado más ruin cuando la situación lo requiere, pero también muestran el lado más amable, sobre todo si se trata de salvar la vida de familiares o personajes con los que mantienen una relación de amistad, o cuando menos de un trato afable. Julio Alejandre Calviño muestra también como en la batalla naval que enfrenta a las flotas felipistas y antonianas se emplean argucias de dudosa reputación, porque en este conflicto marítimo toman parte corsarios que no dudan en utilizar estas malas artes, sobre todo si tienen la oportunidad de hacerse con un gran botín. El lector se encontrará a lo largo de los quince capítulos más el epílogo en el que se estructura el desarrollo de la trama, con espías, contrabandistas, sanguinarios corsarios que viven aventuras llenas de peligros, historias de amor, viles traiciones y feroces combates. Sin duda alguna, el autor construye una trama solvente, muy visual, y diría que incluso cinematográfica, sobre todo en lo que se refiere a la primera gran batalla naval de la era moderna o las incursiones corsarias que provocaban el terror tanto en los navíos que abordaban como en las poblaciones costeras o insulares caribeñas que asaltaban sin miramientos, de los que se llevaban todo lo que les pudiera valer para enriquecerse.



Biografía:



Nació en Madrid, donde estudió Magisterio y más tarde Pedagogía. Después de unos años dedicado a la enseñanza, se marchó a Centroamérica para trabajar como cooperante con refugiados de guerra, y allí permaneció más de una década. En la actualidad reside en Extremadura y forma parte de un equipo de Orientación Psicoeducativa.

Ha obtenido premios literarios en certámenes nacionales e internacionales, y ha publicado los libros Héroes, tumbas y libros perdidos, Seis mil lunas y Reporte de una boda y un entierro, y es autor del blog «La otra literatura».


Nota: Datos técnicos, sinopsis y biografía del autor, tomados de la web de Ediciones Pâmies. Fotografía de Julio Alejandre tomada de la web Todoliteratura. Imagen de Angra tomada de la web Revista Ibérica. Imagen de la batalla naval de las Azores tomada de la web Todo a babor. Imagen de Antonio de Avís tomada de Wikiwand.