Datos
técnicos:
Título:
Abuelo Tomás
Autora:
María Neira Martín
Editorial:
Círculo Rojo
1ª
Edición: diciembre 2015
Encuadernación:
tapa blanda con solapas.
Idioma:
Castellano.
ISBN:
978-84-9126-081-3
Nº pág:
124
Sinopsis:
Os
presento al Abuelo Tomás, un hombre ya entrado en años, leal viudo
y amante dueño de Epi y Blas, dos revoltosos mininos. Es un
personaje excepcional. Algo gruñón, muy cabezota y bastante chapado
a la antigua, pero también divertido, alegre y solidario. Tiene sus
contradicciones, pues ha vivido tanto que a estas alturas se
cuestiona hasta su propia identidad.
Os
recordará algo al italiano Salvatore, el de La Sonrisa Etrusca,
porque su nieto es su debilidad y su razón de ser, y quizá se os
parezca un poco también a Allan Karlsson, ese que saltó por la
ventana y se largó, por ese mismo empuje y falta de vergüenza que
caracteriza a los que poco tienen ya que perder, y gracias a ello su
existencia se va llenando de momentos trepidantes e inolvidables.
Opinión
Personal:
Cuando
leí por primera vez una reseña sobre la novela Abuelo
Tomás,
de la escritora salmantina afincada en Madrid, María Neila, algo me
decía que terminaría leyéndola, porque me daba la impresión de
que me resultaría una lectura agradable, a la par que amena y
placentera.
Y así fue, pues ahora me toca a mi escribir mi opinión personal
sobre la historia de este personaje que, a poco que lo exprima su
autora, le puede reportar muchas alegrías literarias, por el mucho
recorrido en la vida que tiene, y porque sabe cómo aplicar en las
situaciones un tanto comprometidas que se le presentan, el dicho que
dice que la veteranía es un grado. Soy de los que aprovecha una
novela de estas características como bálsamo lector, ya que son las
ideales para relevar a aquellas más intensas, que nos provocan,
incluso, algún que otro sobresalto, en el sentido literal de la
palabra. Y
es que Abuelo Tomás narra las peripecias de este personaje y su
familia, desde un punto de vista desenfadado y optimista, aunque también teniendo en cuenta los inconvenientes que en el alguna ocasión le acarreará su edad, y comprobaremos cómo reaccionará ante ellos, en donde sacará a relucir, sobre todo, ese carácter gruñón y cabezota que mostrará en estas ocasiones.
Abuelo
Tomás
es una novela que, en mi modesta opinión, está
a caballo entre lo que conocemos como novela intimista y novela realista, porque
creo que tiene rasgos de ambas:
por un lado, las reflexiones que guardan relación con determinadas situaciones a las que se enfrentará a lo largo de la narración, y que nos ofrece el personaje a lo largo de los 20 capítulos cortos en los que está estructurada la novela;
por otro, las
escenas que presenciamos a lo largo de ellos pudieron ocurrir
perfectamente en la vida real.
Pero no solo las escenas, sino también los
personajes, porque son de carne y hueso.
Pese a que son construidos con pocos trazos, son los suficientes como
para reconocerlos perfectamente y familiarizarnos con ellos.
Y así
es cómo María Neila nos presenta el día a día de este personaje.
Será él quien en primera persona relate todo lo que sucede a lo
largo del desarrollo de la trama. El abuelo Tomás es el
protagonista indiscutible de la misma, pero a través de él
conoceremos a su hija Elisa, y a su nieto, que se llama
también como él. Sin olvidarnos de su fallecida esposa,
Gabriela, de quien nos hablará en más de una ocasión; de
Rafael, con quien comparte unas horas a la semana en el comedor
social; o de Marta, la empleada del hogar de su hija Elisa.
En Abuelo Tomás nos encontramos con tres personajes que
pertenecen a tres generaciones muy diferentes, abuelo, hija y nieto,
con lo que ello significa. Pero el lector comprobará a lo largo
de esta novela corta, cómo esa diferencia generacional no será
impedimento alguno para la convivencia, pese a las distintos puntos
de vista que encontraremos entre ellos en algunos momentos o, por el
contrario, a la forma en la que complementan sus experiencias
personales para afrontar determinadas situaciones. «—¿Llamamos a una ambulancia? Vamos al hospital y nos quedamos tranquilos —continua Elisa, bien sabedora de mi antipatía hacia los médicos. ¡Menuda interpretación!»(pág. 96)
En
la sinopsis que nos ofrece la editorial Círculo Rojo, lo definen
perfectamente: «Os
presento al Abuelo Tomás, un hombre ya entrado en años, leal, viudo
y amante dueño de Epi y Blas, dos revoltosos mininos. Es un
personaje excepcional. Algo gruñón, muy cabezota y bastante chapado
a la antigua, pero también divertido, alegre y solitario. Tiene sus
contradicciones, pues ha vivido tanto que a estas alturas se
cuestiona hasta su propia identidad».
Sin duda alguna, el lector se encariñará muy pronto con este
carismático personaje: no le queda otra, porque su forma de ser y de
pensar le irán conquistando a medida que se suceden los episodios.
Abuelo
Tomás
es también una novela de aventuras, ya que en ella se suceden
escenas propias de este género literario. En más de una ocasión
nos encontraremos con situaciones divertidas que, cuando menos,
provocarán una sonrisa en el lector: sobre todo las que dan lugar a
equívocos; o en las que se aprovecha de su avanzada edad, que
servirá para salir de algún apuro o situación embarazosa.
María
Neila nos ofrece una novela cálida, cercana, escrita con un lenguaje
sencillo, pero muy cuidado, que se lee de una sentada.
Pero que, al mismo tiempo, es mejor saborearla poco a poco, porque
las situaciones que en ella nos encontramos, nos invitan a ello. De
hecho, no tardaré en leer la segunda entrega de este personaje:
Abuelo
Tomás, el regreso.
Comenté
que en Abuelo
Tomás
nos encontramos con reflexiones, pero lo que más me encandiló de
esta novela corta es el magnífico
monólogo interior sobre su hija Elisa,
que
nos ofrece en el capítulo 20:
un gran colofón para Abuelo
Tomás,
sin duda alguna. Este es su comienzo: «Largas
las horas abrumado por tu ausencia. Entonces, como ahora, soñaba con
volver a verte y dejar que tu mirada se posase en la mía por un
instante». (pág. 121).
Biografía:
Nací
en Salamanca, pero resido en Madrid desde poco después de venir al
mundo. Me licencié en Periodismo por la UCM de Madrid y soy experta
en Comunicación, Promoción y Gestión de Eventos, además de
Cantante y Escritora.
Tengo
amplia experiencia en el sector musical a nivel internacional (medios
de comunicación, sector discográfico booking,
festivales,
y
promoción de bandas), habiendo desarrollado mi carrera en empresas
como Avispa Music, Maraworld y Noisegate Productions. También he
trabajado en departamentos de comunicación interna/externa y gestión
de eventos de empresas no asociadas al negocio musical (Universidad
Complutense, Prêt&You, Safari Crowdfunding, Ericsson España) y
he colaborado en medios online e impresos como rockinspain.es,
mariskalrock.com, redhardnheavy.com, Heavy Rock y Kerrang!
A
principios de 2011 inicié mis estudios en canto moderno con Andrea
Lahora, compaginando así mi experiencia laboral en el mundo de la
música con mis inquietudes artísticas. En adelante, continué con
mi formación en técnica vocal y expresión corporal. En 2015 empecé
a dar mis primeros pasos en el apasionante mundo del canto lírico de
la mano de Ana Belén Camino Moreno, y en 2016 he seguido mejorando
mi técnica de canto moderno gracias a las lecciones de Gema Vau.
Compagino
además dos proyectos musicales junto al guitarrista Iván Díaz:
Alien Rockin’ Show y Alien Rockin’ Explosion.
En
enero de 2016 publico mi primera novela, Abuelo Tomás, siendo ésta
seleccionada como una de las tres finalistas en la categoría Mejor
Novela de los Premios Círculo Rojo 2016. Durante este año comienzo
también a impartir diferentes talleres para combatir el miedo
escénico y mejorar las habilidades de comunicación.
En
octubre de 2016 publico mi segunda novela, la segunda parte de la
saga Abuelo Tomás, titulada Abuelo Tomás -el regreso-.
Nota: Datos técnicos, sinopsis y biografía de la autora, tomados de la web de la editorial Círculo Rojo. Fragmento de la entrevista realizada a María Neila por la web Universo La Maga. Fotografía de María Neila, de google imágenes.
He leído lo de La sonrisa etrusca y me he emocionado. Creo que El abuelo Tomás me gustaría.
ResponderEliminarUn beso
Parece una lectura muy placentera sí. De momento la dejo pasar pero no la descarto si en un futuro se cruza en mi camino.
ResponderEliminarBesos.
Aunque por lo que cuentas no tiene mala pinta la novela, ahora mismo no es de lo que más me apetece leer, pero la tendré en cuenta para un futuro.
ResponderEliminarBesos
Aunque tiene pinta de estar bien no me animo de momento. Besos
ResponderEliminarYa he visto otras reseñas pero de momento con este libro no me animo
ResponderEliminarBesos
Pues no lo conocía y tiene buena pinta, tal vez para más adelante, cuando esté un poco más libre.
ResponderEliminarUn beso
No me animo con este personaje. Me recuerda temas personales y eso me frena.
ResponderEliminarUn beso ;)
Ya lo tenía anotado, sé que es un libro que me gustará, tu reseña me lo acaba por confirmar. Lo leeré pronto.
ResponderEliminarAbrazos.
Hola, es un libro que se ve entretenido pero de momento lo dejo pasae, quizás más adelante me anime con el.
ResponderEliminarCOmparto tu opinión 100%, una lectura placentera, fresca y que nos acerca a nuestros mayores. Un abrazo
ResponderEliminarEStá simpática la historia y el abuelo es un amor a pesar de ser un cascarrabias a veces. A mí este libro me parece más un libro de relatos con un personaje común que una novela. Quiero leer la segunda entrega en breve. Besos
ResponderEliminarMuchísimas gracias por tu reseña, Francisco. Me ha emocionado mucho. Un abrazo fuerte. María Neila.
ResponderEliminarEsta novela me encantó, y no porque mi padre, mi bisabuelo, mi tío y mi primo se llamen así, jajaja, es que la historia es preciosa. Tengo ganas de leer más ya.
ResponderEliminarUn besito.
Muchas gracias! Cómo me alegro! :)
EliminarNo la conocía pero estoy convencida que es una de esas novelas que me gustará leer. Gracias
ResponderEliminarParece una novela simpática y agradable. Tomo nota. Gracias por la recomendación. Abrazos.
ResponderEliminarSiempre disfruto cuando algún compañero o compañera de editorial recibe buenas críticas. Suena muy bien, no me importaría leerla.
ResponderEliminarUn abrazo ;)