Datos técnicos:
Título: La conspiración
de las sombras
Autor: Rodrigo Muñoz
Blázquez
Editorial: Libros Mablaz
1ª Edición: junio/2015
Encuadernación: tapa
blanda
Idioma: castellano
ISBN. 978-84-943276-9-8
nº pág.: 236
Sinopsis:
Ricardo
Tierno es un brillante inspector de homicidios, cuyos servicios como
agente del bien llegan a requerir importantes asociaciones
internacionales, pero sin ningún tipo de protocolo social.
En
el Madrid de un futuro cercano, Cupido,
un asesino en serie, al que hay que capturar. Ricardo tiene como
nuevo compañero a Carmelo Blázquez, una persona brillante y cándida
con quien choca en muchos puntos, pero coinciden en los realmente
importantes.
Fruto
de esta convivencia nace una amistad en la cual al genio se le
contagia la humanidad y, al hombre, la genialidad.
Opinión
Personal:
Como
ya comenté en más de una ocasión en las reseñas que publico en mi
blog, me gustan las novelas que empiezan por el final, en las que el
autor de turno empieza por lo que más intriga suele mostrar el
lector: el desenlace de la novela. Pero es que el hecho de que una
novela empiece por donde acaba hace que quien la escribe tenga que
hilar muy fino para engancharnos al desarrollo de la trama. Y, en
este caso, en La
conspiración de las sombras,
Ricardo Muñoz Blázquez lo consigue con creces.
(Catedral de la Almudena-Madrid)
Lo
primero que me llamó la atención de la ópera prima de este joven
autor es la ubicación espacio-temporal de la novela. El lector
recorrerá Madrid, sí, pero es una ciudad situada en un futuro
cercano, como adelanta la sinopsis. Solo a lo largo de la narración
se mencionarán dos fechas, de forma muy puntual: 1983 y 2001. Puede
deducirse de ello que la ubicación temporal es más avanzada, porque
uno de los personajes que llevan el peso de la
trama, el inspector Ricardo Tierno, ya es un hombre adulto, de
mediana edad. Y en cuanto al espacio por el que se mueven estos,
reconoceremos algunos por los lugares que transitan, como la Ciudad
Universitaria de Madrid, el barrio de Lucero, el Estadio Vicente
Calderón o la Catedral de la Almudena. Pero, en este caso, diría
que es una visita más bien velada la que hacemos a la capital de
España, pues lo que importa en la novela es el desarrollo de la
trama y la construcción de los personajes.
En
segundo lugar destacaría el estilo del autor. Rodrigo Muñoz
Blázquez muestra al lector un estilo con el que nos deja su seña de
identidad, pues nos encontramos ante una narración muy directa, en
la que dominan las descripciones breves y concisas, pero que serán
suficientes para conocer a los personajes y las localizaciones por
donde se mueven. La narración es ágil y el ritmo por momentos se
hace trepidante. Esta sensación es acompañada de unos diálogos muy
vivos y dinámicos. En este sentido, creo que hay un claro equilibrio
entre la parte narrativa y la dialogada. Diría, en mi modesta
opinión, que su estilo narrativo tiene rasgos cinematográficos,
porque el lector podrá imaginar perfectamente las imágenes que nos
relata el narrador. Este efecto que comento lo podemos ver, sobre
todo, cuando los dos policías visitan los lugares en donde el
asesino en serie
comete sus crímenes. Creo que así logra que el lector se implique
más en el desarrollo de la trama, pues tal y como van avanzando los
capítulos, se hace adictiva y nos invita a seguir leyendo porque
queremos saber qué mueve a ese asesino en serie a actuar tal y como
lo hace. Un asesino en serie al que conoceremos con el nombre Cupido,
por las características de su modus
operandi.
Pero también llamará la atención del lector su ensañamiento con
algunas de las víctimas, porque algunas descripciones que nos vamos
a encontrar son espeluznantes. Y para lograr ese efecto Rodrigo Muñoz
Blázquez lo consigue con ese estilo narrativo tan particular, como
acabo de comentar.
(Ciudad Universitaria-Madrid)
El
inspector Ricardo Tierno y el subinspector Carmelo Blázquez,
conocido como Melo,
llevan el peso de la trama. Será el subinspector Blázquez quien nos
relatará en presente los capítulos iniciales y finales de la
novela, empleando ya el pasado a lo largo del desarrollo de la trama.
Y es que la novela tiene un claro carácter evocador, pues el lector
se encontrará con la mayoría de los personajes que en ella
intervienen reunidos en torno a una mesa que está en el bar al que
«solemos
ir a comer y beber los del cuerpo, un local amplio, con un cristal
color verde botella que impide que nadie pueda ser reconocido desde
fuera»
(pág. 9). El motivo por el cual se encuentran allí reunidos es que
acaban de asistir al entierro del inspector Ricardo Tierno y será su
compañero quien relate a los demás cómo era y las causas de su
fallecimiento. Pero será mejor que el lector conozca de primera mano
las circunstancias en las que se produjo. Y en este punto creo que el
interés está asegurado porque, en mi modesta opinión, el autor
logra despistar a quien quiera aventurarse a la hora de averiguar quién
está detrás de la figura del asesino en serie conocido como Cupido
y
qué le mueve a actuar de la forma en que lo hace.
Son
pocos los personajes que desfilan por las poco más de 200 páginas
que conforman esta novela. Destacaría la figura de los dos policías
ya mencionados, y en un plano más secundario el comisario Javier
Robles y Ana, su secretaria. El resto, salvo el señor Daneli, tienen un papel poco relevante. Aunque Carmelo Blázquez a lo largo del
caso que va a relatar a sus compañeros de mesa todavía tenía, en
el momento en el que ocurren los hechos, el rango de subinspector. El
inspector Ricardo Tierno y el subinspector Carmelo Blázquez nos
parecerán, en un principio, como dos gallos de pelea, en el sentido
de que cada uno querrá imponer sobre el otro sus cualidades, pues a
ambos les une un claro razonamiento deductivo, pero ese duelo
inicial se irá trocando con el paso del tiempo, lo que nos lleva a
presenciar la evolución de ambos personajes y cómo finalmente
terminan formando un buen equipo de trabajo, yendo su relación más
allá del terreno laboral, pues la amistad va surgiendo entre ellos.
Los rasgos más carácterísticos de ambos están bien reflejados en
la sinopsis. Rodrigo Muñoz Blázquez construye unos personajes
cercanos, reales, con sus virtudes y defectos, pero con los que el
lector empatizará porque, como decimos en estos casos, son de carne
y hueso, pues bien podríamos cruzarnos con ellos en cualquier
esquina y los reconoceríamos, sin duda alguna. Ana, la secretaria,
también tendrá su papel destacado en la historia, será un
personaje cuya presencia va de menos a más porque terminará
involucrándose en la historia a medida que nos acerquemos al
desenlace, en donde aprovechará las cualidades que tenía antes de
ejercer el puesto que desempeña en la Comisaría de Policía.
La
conspiración de las sombras
es un thriller adictivo, con una trama bien construida que nos
mantendrá en vilo hasta el desenlace de la misma. Rodrigo Muñoz
Blázquez nos presenta sus credenciales para que estemos pendientes
de su próxima publicación, porque merece la pena adentrarse en la
lectura de esta novela. Por último, creo que el título es acertado,
pero el lector sacará la conclusión de lo que digo cuando llegue a
la última página de esta novela.
Biografía:
Nacido
en el año 1992, aún con 22 años, es el autor más joven que ha
publicado la Editorial Libros Mablaz.
La influencia de sus padres en su vocación literaria ha sido primordial –ella, ávida lectora de cualquier libro que cae en sus manos; él escritor y editor- en su vocación literaria.
Con 15 años, fue publicado un relato suyo en la web de su instituto, por la gran valoración y madurez que tenía la historia, basada en los entresijos del fútbol más allá del campo de fútbol. Ahora, por fin, ve la luz su primera novela, una historia de suspense e intriga muy bien atada y sorprendente por su desarrollo narrativo, cuando ha ganado tiempo a su vida tras la conclusión de sus estudios universitarios de enfermería.
Nota: Datos técnicos, sinopsis y biografía del autor, tomadas de la web de Libros Mablaz. Imágenes que acompañan al cuerpo de la reseña y fotografía del autor, de google imágenes.
Hoy no me llama mucho la atención Paco. Lo dejo pasar.
ResponderEliminarPues no conocía esta novela pero me gusta lo que leo, una novela negra cortita, con buenos personajes, ideal para esos momentos en los que tienes "un par de días por delante" en los que no sabes qué leer.
ResponderEliminarBesos.
No la conocía y no tiene mala pinta, podría animarme
ResponderEliminarBesos
No tiene mala pinta la verdad, pero ahora mismo tengo demasiado pendiente de leer como para ir a buscarla.
ResponderEliminarBesos.
Me has convencido. No lo conocía y me lo llevo apuntado
ResponderEliminarBesos
Hola, Paco! Estoy de vuelta XD
ResponderEliminarDe momento no me voy a animar con esta novela.
Veo que estás leyenda Isla de lobos, la tengo apuntada pero tengo alguna duda, me gustará saber tu opinión cuando publiques la reseña.
Besos.
Tienes toda la razón, las novelas que empiezan con el final tienen todo un merito doble.
ResponderEliminarTiene muy buena pinta. Un besote
ResponderEliminarPinta bien y seguramente me gustaría. Gracias por descubrírmelo. Un beso ;)
ResponderEliminar¡Ay ay ay! ¡La tengo preparada para leer! me has puesto nerviosa, ahora voy a tener que adelantarla a otros lecturas que iban por delante, jaja
ResponderEliminarUn beso
Yolanda ❤❤❤
Con lo que me gustaba este género ahora lo tengo un poco de lado. Ya sabes que ahora me ha dado por el tema de los clásicos así que de momento lo dejo pasar.
ResponderEliminarBesos.
Pues si, empezar de esa forma no siempre sale bien... me alegro que el autor hile bien fino. Me la llevo anotada ^^
ResponderEliminarBesos
Sí que es joven el autor y si te ha causado tan buena impresión será para tenerlo en cuenta. No tiene mala pinta esta novela. Besos
ResponderEliminarPues pinta bastante bien, pero tengo tanto del género pendiente, que no sé si llegará a caer.
ResponderEliminarBesotes!!!
Rayos... No me llama tanto la atención, pero muchas gracias por la entrada, saludos.
ResponderEliminarNo me disgusta, pero con tanto pendiente ya veremos
ResponderEliminarBesos
Hola,tiene buena pinta,gracias por la reseña.
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