Datos técnicos:
Título: Yo que tanto te quiero
Autora: Marta Querol
Editorial: Cersa Editorial
1ª edición en papel: diciembre/2015 (enlace Amazon)
Encuadernación: tapa blanda con
solapas
Idioma: Español
ISBN: 978-84944729-2-3
Nº pág.: 446
Precio: 2,99€
Precio: 2,99€
Sinopsis:
Valencia,
1977. En España se celebran las primeras elecciones generales tras
la muerte de Franco. Lucía, una niña de once años, no es ajena al
nuevo torrente de ideas y manifestaciones culturales, pero tampoco a
la ruptura del matrimonio entre sus padres, a sus engaños,
traiciones y misterios.
Lucía narra la historia de su familia tras compartir la última guerra de Elena Lamarc, su madre. Es la primera de muchas otras que ahora le toca librar a ella convertida, a su pesar, en moneda de cambio entre sus padres y en el mayor peligro para los intereses de una ambiciosa mujer.
A través de intrigas empresariales, traiciones familiares, celos, erotismo y una misteriosa carta como hilo conductor, Yo, que tanto te quiero nos pasea por la época fascinante y convulsa de la Transición con la música de los ochenta como banda sonora.
Lucía narra la historia de su familia tras compartir la última guerra de Elena Lamarc, su madre. Es la primera de muchas otras que ahora le toca librar a ella convertida, a su pesar, en moneda de cambio entre sus padres y en el mayor peligro para los intereses de una ambiciosa mujer.
A través de intrigas empresariales, traiciones familiares, celos, erotismo y una misteriosa carta como hilo conductor, Yo, que tanto te quiero nos pasea por la época fascinante y convulsa de la Transición con la música de los ochenta como banda sonora.
Opinión
personal:
En
mi cuenta de twitter ya comenté que la novela sobre la que hoy
expongo mis impresiones, Yo que tanto te quiero, de Marta Querol, es
un magnífico cierre a una trilogía inolvidable. Y para mí es, sin
lugar a dudas, mi mejor lectura en lo que va de año. Es una pena que
ninguna editorial española apostase por este título y, como dice la autora en
la nota que nos encontramos al final del cuerpo de la novela, «me
he decidido a contar con CERSA para esta última entrega porque me
ofrecía lo que necesitaba».
Y me confirmó que en Amazon figura autoeditada. De hecho, la
sinopsis la tomé de Amazon, porque entendía que la que ofrecía la
editorial quizás desvelara demasiado al lector sobre lo que se iba a
encontrar a lo largo de la trama.
En
2012 leí la primera de las tres novelas que conforman esta trilogía:
El final del ave fénix (reseña). En 2016 leí Las guerras de Elena (reseña) y, por fin
pude disfrutar de la lectura de Yo que tanto te quiero, que me
absorbía página a página, capítulo a capítulo; pero, aunque es
una lectura fluida, la convertí en pausada, para recrearme en cada
escena, en cada episodio, porque era consciente de que tenía ante mí
una magnífica novela, de las que hay que degustar a fuego lento.
Marta Querol dice en la nota de la autora que «es una obra
literariamente ambiciosa y comprometida en la que creo que he dado lo
mejor de mí». Y ya creo que dio lo mejor de sí, porque las dos
anteriores ya eran de una gran calidad literaria, pero esta las
supera. Ya es difícil mantener el nivel en una trilogía, pero si el
autor de turno se empeña, lo consigue. Además, ofrece al lector,
como bien dice ella, «tres novelas que pueden leerse de forma
independiente, pero que juntas forman un todo gigantesco, una
historia épica trasladada al siglo XX donde las contiendas no
pretenden conquistar o defender fronteras, sino ganar la batalla de
la vida»
No
me imagino lo que sentiría la autora a la hora de escribir algunas
escenas para que causaran en el lector los efectos deseados, porque
es muy difícil expresar en palabras la sensibilidad y la emoción
que manifiestan los personajes ante determinadas situaciones, pero
creo que Marta Querol lo logró, porque se veía claramente que se
ponía en la piel de sus personajes. Creo que un ejemplo de ello es
lo que sucede en las últimas páginas de la novela, en las que
reconozco que la emoción se apoderó de mí, por cómo reaccionaba
Lucía Company Lamarc a lo largo del último capítulo, o esa escena
en el tanatorio en el que mantiene un diálogo interior con el
cadáver que velaba en soledad y que, en cierto modo, me recordó a
la gran novela de Miguel Delibes, Cinco horas con Mario. Sin duda
alguna, si la novela en sí es un magnífico trabajo literario, el
desenlace es de lo mejor que he leído en tiempos. Por eso
recomendaría que, quien no la leyó todavía, la lea y se recree en
la lectura del último capítulo, porque creo que lo que en él se
nos ofrece, indica el porqué del título de la novela.
Yo
que tanto te quiero es una novela que está escrita de tal forma que
la autora cuida hasta el más mínimo detalle, y creo que el lector
comprobará cómo toda ella es un verdadero puzzle en el que poco a
poco van encajando las piezas. Y es que el fondo histórico que
ofrece la novela está presentado de manera que los hechos que se
mencionan guarden alguna relación con los episodios que nos relata
Lucía Company: el Golpe de Estado del 23-F, la ley del divorcio o el
fallecimiento del papa Juan Pablo II, son un claro ejemplo de lo que
acabo de comentar. Sin olvidarme de cómo era Valencia en aquellos
años y la vida social de la época, en donde la mujer era tomada
como un florero y solo estaba a disposición de su marido; pero en
esta ocasión nos encontraremos cómo también había mujeres
emprendedoras como Elena Lamarc y su hija Lucía Company que querían
demostrar que podían estar a la altura de un mundo laboral en el que
mandaban los hombres, y se rebelaron ante la imposición machista de
la época. Creo que el trasfondo histórico de la novela, y de la
trilogía en su conjunto, es un magnífico documento en el que el
lector es informado de lo que ocurría en Valencia, particularmente,
y por extensión, en nuestro país, en la reciente historia de
España. Lo mismo ocurre con la banda sonora que nos acompañará a
lo largo de los capítulos. Charles Aznavour, los Bee Gees, Police,
Los Beatles, John Lennon, Mecano, U2, Frank Sinatra, o Madness, y
otros más. Todos ellos guardan alguna relación con los episodios en
los que figuran. Un claro ejemplo es Our House, de Madness, que
figura en una escena muy emotiva y tiene un significado especial,
como dice Marta Querol.
(Taberna AlKázar-Valencia, donde Lucía y su padre se reunían los sábados)
Pero
creo que el punto fuerte de esta novela que cierra la trilogía es,
sin duda alguna, la presencia de unos personajes carismáticos, muy
creíbles, y que cobran vida propia, porque parece que se mueven
ellos solos, sin que nadie les diga lo que tienen que hacer, por la
naturalidad con que lo hacen. A lo que acabo de mencionar, habría
que añadirle la compleja personalidad de cada uno de ellos,
sobre todo de los cuatro sobre los que recae el peso de la trama.
Pero está claro que detrás de ellos hay una autora que perfiló sus
rasgos físicos y psicológicos hasta el mínimo detalle, y eso se
nota en que así pudimos familiarizarnos más con cada uno de ellos.
Otra cosa sería el que empatizáramos o no con unos y otros; en mi
caso, me fue difícil tomar partido por alguno, únicamente el Carlos
Lamarc que me encontré en buena parte de esta novela, me sorprendió,
o la evolución de su hija Lucía, sin olvidarme de Mario, su marido,
quien aporta cordura pese a darse cuenta de cómo son quienes le
rodean. Aunque, como ya comenté en más de una ocasión, lo que
importa es su construcción y credibilidad. Además,creo que el lector encontrará con unos personajes cercanos. Ese triángulo
familiar compuesto por los miembros de lo que en algún tiempo fueron
la familia Company Lamarc, atraparán al lector en cada una de sus
intervenciones, sin olvidarnos de otro que también tendrá un papel
muy destacado, como es Verónica, que da mucho juego a la novela. Este es un personaje camaleónico que atrapará
al lector y, al mismo tiempo, le sorprenderá en más de una ocasión por su forma de actuar. Es, con diferencia,
quien provoca las situaciones más tensas que se viven a lo largo de
la novela. Tampoco me olvido de Javier Granados, que vuelve a
aparecer en la vida de Elena Lamarc y que, pese a que en algunas
escenas en las que aparece no estaremos de acuerdo con su actuación,
es quien consigue dar estabilidad emocional a Elena. Nos
encontraremos también con Juanjo, un joven de vida «bohemia», que
poco a poco irá mostrándonos quién es realmente. Este personaje y Mario representan los polos opuestos en la vida sentimental de Lucía.
Yo
que tanto te quiero está narrada en primera persona. En la nota de
la autora, Marta Querol nos explica el porqué de utilizar esta
fórmula narrativa. Me gustan este tipo de narraciones, cercanas y
desde la lejanía; aunque hay momentos en que tengo la impresión de
que estoy invadiendo su intimidad, porque siento que nos hace
partícipes de confidencias y reflexiones con las que busca una
explicación a la forma de actuar de quienes le rodean. Por eso me
imagino que la autora se andaría con pies de plomo para seguir las
pautas que exige esta voz narrativa, porque tiene que presentarnos a
los personajes desde su punto de vista. Y así, desde la lejanía, es
como conoceremos el ciclo vital de Lucía Company Lamarc, y
seguiremos su crecimiento hasta la edad adulta, viviendo con ella
todas las peripecias que acompañaron a los miembros de su maltrecha
familia, pero a los que, pese a ello, quería tanto.
En
Yo que tanto te quiero, el lector se encontrará con dosis de
intriga, aunque no al estilo de lo que sucede en Las guerras de
Elena: se encontrará con intrigas empresariales, traiciones
familiares y una misteriosa carta que, llegado el momento, servirá
para que el lector conozca el porqué de la actuación de quien la
escribió. Los celos estarán muy presente a lo largo de la
narración, y de las situaciones de desamor que vivirán los
personajes. El lector se encontrará con un verdadero análisis de
las relaciones familiares, con el sentimiento de culpa que anida en
algunos personajes, y el chantaje emocional, sin olvidarnos de la
presencia del amor en su sentido más amplio, tanto del amor de
pareja, como del amor paterno filial.
Pese
a que en la novela domina la narración sobre el diálogo, el
lector se encontrará con una lectura muy absorbente y adictiva,
porque Marta Querol sabe cómo encadenar los episodios e invitarnos a
que sigamos leyendo, narrados de una forma cuidada y elegante; y
prepara al lector para que esté atento en determinadas escenas,
porque tal y como las va narrando, se presiente que algo le va a
suceder a alguno de los personajes. De esta forma, logra que deseemos continuar con la lectura y
no veamos el momento de darle un descanso, y retomarla con ganas de
seguir conociendo las vicisitudes de los personajes que desfilan por
sus páginas, y seguir conociendo esa parte de nuestra historia
reciente, de la mano de los personajes que conforman la familia
Company Lamarc, y quienes les acompañan en su ciclo vital.
Biografía:
Nace
en Valencia, España; estudia Ciencias Económicas y Empresariales,
se especializa en gestión del comercio internacional y más tarde en
ingeniería y gestión de la calidad. Tras más de veinte años como
profesional reconocida, un golpe emocional le abre los ojos a su
verdadera vocación, la literatura. El
final del Ave Fénix,
su ópera prima, es una de las diez
finalistas en el Premio Planeta 2007 y,
publicada en 2008, sorprende a crítica y público por su gran
calidad literaria y por la profundidad de los personajes. La novela
ha sido reeditada también por Aladena (2010) y Ediciones B (2012).
En febrero de 2012 se sitúa en el nº 1 en ventas del Top100 más
seguido en Internet. Su segunda novela, Las
guerras de Elena,
se publica en 2012 con Ediciones B y obtiene excelentes críticas.
Esta tercera entrega de la que han llamado "la trilogía
española del último siglo" es la apuesta más ambiciosa y
novedosa de la autora. Puedes seguir su columna en Tinta invisible en
Zenda Revista literaria y en programas de de radio (Pegando
la Hebra,
Puertas
abiertas).
Es autora de diversos relatos cortos y ha participado en antologías
como Ilusionaria,
Del
loco al Mundo,
Relatos
de la Caverna profunda
o
Una
maleta llena de relatos.
Nota: Datos técnicos tomados de la editorial Cersa; sinopsis y biografía de la autora, de Amazon. Imágenes que acompañan al cuerpo de la reseña, y fotografía de Marta Querol, de Google Imágenes.
Nota: Datos técnicos tomados de la editorial Cersa; sinopsis y biografía de la autora, de Amazon. Imágenes que acompañan al cuerpo de la reseña, y fotografía de Marta Querol, de Google Imágenes.
Aún no me he estrenado con esta autora,a ver si lo hago pronto.
ResponderEliminarUn beso
No conocía estas novelas y leyendo lo bien que hablas de ellas, sin duda las incluiré en mis próximas lecturas. Estoy deseando descubrir a esta autora
ResponderEliminarGracias
Se nota que has disfrutado de la lectura, yo he leído la primera y me gustó mucho, tengo que ponerme con la siguiente y luego con esta
ResponderEliminarBesos
Tenía muchas ganas de leer tu reseña, ya me pusiste la miel en los labios cuando te leí diciendo que era tu mejor lectura de este año. Ya te comenté que leí la primera y me gustó mucho (esa escena final que citas, aún sin haberla leído, me ha remitido a la primera escena de la primera novela, me resultó muy emotiva).
ResponderEliminarBesos.
Me apunto esta novela y esta autora para leerla en un futuro. Un abrazo, Paco.
ResponderEliminarNo he leído nada de esta autora, pero después de leerte me han entrado ganas.
ResponderEliminarBesos
Una reseña a la altura de la novela, sí señor. Muy buena historia y, como bien dices, unos personajes carismáticos.
ResponderEliminarBesos
Tengo la trilogía entera en mi lista de deseos. Es de agradecer que vaya a más, mejorando en cada entrega
ResponderEliminarBesos
Aún no he leído las anteriores he espero algún día encintarles hueco.
ResponderEliminar¡Adoro a Marta! ¡Esa fallereta major, amunt bonica! jajaja. Esta trilogía, junto con la de María José Moreno, son las mejores del mundo mundial, cada una en su estilo me han hecho disfrutar de las historias y los personajes, y mira que yo en cuanto leo trilogía o saga, salgo disparada...
ResponderEliminarUna reseña estupenda para un libro magnífico!!!
Besitos.
Las editoriales cometen cada patinazo a veces que no veas. De Marta Querol he oído hablar hace tiempo pero la verdad es que no he podido leer nada de ella todavía. Me gustaría hacerlo lo que ocurre es que siendo trilogía, no sé yo. Besos
ResponderEliminarTengo pendiente leer a la autora, a ver cuando puedo.
ResponderEliminarUn beso ;)
Excelente reseña!!! No he leído nada de esta autora y habrá que enmendarlo por lo que cuentas :)
ResponderEliminarBs.
Gran reseña, se nota todo lo que has disfrutado. Espero que tus siguientes lecturas sean tan buenas como esta :-)
ResponderEliminarBesos.
Uy, pues no sabía que formaba parte de una trilogía, pero con esta pedazo de reseña va a ser cuestión de ponerse con ella (imagino que mejor leerla en orden). Se te nota que te ha entusiasmado, y cuando un libro consigue llega a un lector de esta manera, hay que hacerle hueco lo antes posible sí o sí.
ResponderEliminar¡Besote!
No termino de animarme con la autora...
ResponderEliminarBesos
Y yo aún sin estrenarme con Marta Querol¡ Me has dejado boquiabierto con esta magnífica reseña, y con ganas de leer ese capítulo final y ese desenlace. Un abrazo.
ResponderEliminar