Datos técnicos:
Título: La cocinera de Castamar.
Autor: Fernando J. Muñez.
Editorial: Planeta.
1ª edición: 01/2019.
Encuadernación: Tapa dura con sobrecubierta.
ISBN: 978-84-947595-7-4.
Idioma: Español.
Nº pág.: 768.
Sinopsis:
En un tiempo en que la clase social se definía por la comida que se servía en la mesa, una cocinera desafiará el espíritu de su señor.
Clara, una joven caída en desgracia, sufre de agorafobia desde que perdió a su padre de forma repentina. Gracias a su prodigiosa cocina logra acceder al ducado de Castamar como oficial, trastocando con su llegada el apático mundo de don Diego, el duque. Este, desde que perdió a su esposa en un accidente, vive aislado en su gran mansión rodeado del servicio.
Clara descubrirá pronto que la calma que rodea la hacienda es el preludio de una tormenta devastadora cuyo centro será Castamar, su señor y ella misma.
Fernando
J. Múñez teje para el lector, con una prosa detallista y delicada,
una urdimbre de personajes, intrigas, amores, envidias, secretos y
mentiras que se entrecruzan en una impecable recreación de la España
de 1720.
Opinión Personal:
Estoy seguro de que, quienes hayan leído La cocinera de Castamar (Fernando J. Múñez, Planeta), no tardan en acordarse de clásicos televisivos o de libros cuya trama gira en torno a la relación que se mantiene entre los propietarios de la mansión de turno y la servidumbre, como las series Dowton Abbey, Arriba y Abajo o libros como En el piso de abajo, de Margaret Powell. En La cocinera de Castamar el lector siente que realiza un verdadero viaje literario al primer tercio del siglo XVIII, en el que se encuentra con una historia que se desarrolla pocos años después de la llamada Guerra de Sucesión Española. Un viaje literario en el que se siente un personaje más, porque observa desde su atalaya privilegiada todo lo que sucede a lo largo de los 50 capítulos en los que se estructura la trama, agrupados en cuatro partes, y cuyo desarrollo se extiende desde octubre noviembre de 1722. Una trama en la que el narrador omnisciente describe con detalle todo lo que sucede en cada uno de los episodios que la conforman, al igual que ofrece unas descripciones muy atractivas y visuales de los espacios por los que transitan un amplio elenco de personajes.
(Calle Leganitos-Madrid) |
La vida de Clara Belmonte cambia desde el momento en el que es informada de que en Castamar precisan un oficial de cocina para la finca. El mayordomo Melquíades Elquiza tenía magníficas referencias de ella, por las excelentes dotes culinarias que posee, lo que supone una gran baza para la hija del fallecido doctor Belmonte accede al dudado de Castamar como oficial de cocina y la dirige en un tiempo en que la clase social se definía por la comida que se servía en la mesa, como adelanta la sinopsis. A medida que se suceden los capítulos se empieza a percibir un cambio en el apático mundo de don Diego, el duque, quien vive aislado en su gran mansión rodeado del servicio desde que perdió a su esposa en un accidente. Este es el punto de partida de La cocinera de Castamar, al que hay que añadirle intrigas, amores, envidias, secretos y mentiras que se entrecruzan porque, que atrapan en su tejido a quienes residen en el palacio de Castamar, incluida Clara. Clara Belmonte se encontrará con el ya mencionado duque, su hermano Gabriel, que atraerá la atención del lector desde las primeras páginas por los rasgos que lo definen; doña Mercedes, la madre de ambos, quien también tendrá su interés por la amistad que mantiene con el Enrique de Arcona, marqués de Soto, a quien es muy difícil olvidar por las malas artes que utiliza este personaje y los motivos que le conducen a planificar y señalar sus objetivos. Pero también se encontrará con el mayordomo Melquíades Elquiza, y el secreto que guarda celosamente, o Úrsula Berenguer, una ama de llaves de carácter frío y mano dura, de quien de ella depende la servidumbre.
(Coliseo del Buen Retiro-Madrid) |
Para lograr el efecto al que me refiero en el primer párrafo de esta reseña, está claro que Fernando J. Múñez realiza una exhaustiva labor de documentación. Una documentación con la que ofrece un claro fresco de la sociedad de la época, en el que se percibe la clara diferencia entre las clases sociales, y cómo la aristocracia y los miembros de la alta sociedad miran y tratan con desprecio a los estamentos más bajos, quienes eran conscientes de que tenían muy pocas posibilidades de ascender a un escalafón social superior. El autor refleja con detalle los diferentes grupos que conforman la servidumbre de la aristocracia y la estricta relación de jerarquía que hay en relación con los que ejercen el mando directo sobre ellos, como son el mayordomo y la ama de llaves o dueña, al igual que describe las funciones que desempeña cada uno de los estados en los que se estructura el servicio, y que la vestimenta que emplean en sus labores. Otro tanto sucede con los miembros de la aristocracia, porque la voz narrativa describe con detalle su regalada forma de vida, los eventos a los que asisten con asiduidad y las funciones que desempeñan en la Corte del rey Felipe V. Sin embargo, en lo que se refiere a la relación de la nobleza con la servidumbre, el lector comprobará cómo el duque de Castamar mantiene un trato directo con su servicio y no duda en apoyarlos, cuando la situación lo requiere, siempre con la mediación de los superiores, si la razón les asiste. Pero también se sentirá muy atraído por las diferentes dependencias en la que se estructura el Palacio de Castamar, que es un personaje más de la novela, de las que no perdía detalle, porque merece la pena recrearse con las claras y precisas descripciones de los ornamentos y enseres que contienen, así como las funciones a las que se dedican cada una de ellas.
(Palacio Real de Madrid) |
Sin duda alguna, La cocinera de Castamar es una novela que deleita a quienes disfrutan de clásicos que abordan temas similares, al igual que los títulos que menciono al comienzo de esta reseña. Pese a que domina la narración frente al diálogo, tiene un ritmo de lectura pausado pero absorbente, un lenguaje muy cuidado y un estilo elegante, con el que el narrador omnisciente describe un exquisito fresco de la sociedad española del primer tercio del siglo XVIII. El lector se encontrará con un amplio elenco de personajes, bien perfilados y creíbles, que están trazados con mucha fuerza y matices, por lo que supone una gran ayuda para familiarizarse con los que más trascendencia tienen en la trama. A lo largo de los capítulos se entrecruzan las intrigas, amores, pasiones, envidias, secretos y mentiras, todas ellas dosificadas de tal forma que mantienen el interés del lector en todo momento.
Biografía:
Empezó su carrera literaria en 2002 en el mundo de la literatura infantil y juvenil, donde tiene una amplia trayectoria. En 2019 publicó su primera novela para adultos, La cocinera de Castamar, a la que la sigue, en 2021, Los diez escalones.
Nota: Datos técnicos, sinopsis, biografía y fotografía del autor, tomados de la web de PlanetadeLibros. Grabado de la calle Leganitos tomado de la web Wikiwand. Grabado del Coliseo del Buen Retiro tomado de la web Wix.com. Grabado del Palacio Real de Madrid tomado de la web de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes.
Hola Paco, la leí el año pasado y me encantó, los personajes, la historia y sobretodo la magnífica ambientación, casi me parecía estar con Clara en la cocina, elaborando y probando los platos... La verdad es que siempre la recomiendo. Besos.
ResponderEliminarVi la serie, cosa rara en mí, y me gustó mucho, tengo pendiente leer el libro, que ya lo tengo localizado en la biblioteca, estoy convencida de que gustará. Buena reseña.
ResponderEliminarBesos
Hola Paco, el libro no lo he leído. TAmpoco he visto la serie. Me gusta todo lo que contáis de este libro, la época y esas relaciones que se tejen entre los personajes. Pero si te digo la verdad, me llamaba más la atención Los diez escalones. Besos
ResponderEliminarMe gustó mucho esta novela. Como bien dices me trajo recuerdos de DOwton Abbey, pero a la española. El personaje de Clara Belmonte me atrajo mucho porque es protagonista, pero también el de Melquiades. Y como comentas el autor tuvo que hacer un gran proceso de documentación, que plasmó a la perfección. Un abrazo,
ResponderEliminarHola Paco! Leí este libro durante la pandemia, era de mi hermana y como el confinamiento duró más de lo que pensábamos todos, nos intercambiamos lecturas. Me gustó mucho, a mi me recordaba Arriba y Abajo, serie que me encantaba 🥰
ResponderEliminarNo he visto la serie, aún 😁
Mil besos 💋💋💋
Buenas tardes, Paco:
ResponderEliminarConozco el título de la novela, quién no. Pero reconozco que no la he leído, y no tenía intención. Lo cierto es que, en mi desconocimiento, creía que era un guion televisivo de carácter romántico. Gracias a ti ya sé que es una buena novela y que merece ser leída. Debo confesar que mis prejuicios literarios me hacen equivocarme más de una vez. Apunto con ilusión y te agradezco la detallada reseña que nos has regalado.
Un abrazo y feliz comienzo de semana!!