viernes, 15 de diciembre de 2017

Inspector Disáster. Operación Navidad, de Carmen Fernández






















Datos técnicos:


Título: Inspector Disaster. Operación Navidad
Autora: Carmen Ferández
Ilustrador: Pablo Matera
Editorial: Producciones Disáster. Autopublicado Amazon (enlace)
1ª edición: noviembre/2016
Encuadernación: tapa blanda
Idioma: Español
ISBN: 9788461749089
Nº Pág.: 187
Precio ebook: 3, 83 €




Sinopsis:


Imagínate un detective con las capacidades deductivas de Sherlock Holmes, la sagacidad de Hércules Poirot, la sangre fría de Sam Spade y el poder de seducción de James Bond. Pues bien, no esperes encontrar ninguna de esas cualidades en Max Disaster.

Disaster es... pues eso, un completo y total Disaster.


¿Serías capaz de imaginar unas Navidades sin turrón del duro? Vale, no te gusta el turrón... ¿Y sin panderetas? Ya veo: te parecen una horterada. ¿Qué me dices de las calles iluminadas a tutiplén? Lo imaginaba: lo consideras un derroche estúpido de kilovatios.
No sigas: este libro está hecho para ti. Y tú para él. Sois tal para cual.
En cuanto lo abras se convertirá en tu libro de cabecera. O de cuarto de baño. Hasta te plantearás llevarlo al instituto. Pero debo prevenirte: hay quien he llegado a acumular más de cinco mil mensajes de WhatsApp sin leer por su culpa.
Y eso no es lo peor: tu percepción de la Navidad cambiará para siempre.
Tú sabrás si quieres que eso ocurra.


Opinión Personal:


Las novelas de humor son ideales para desconectar de los problemas que nos rodean y ayudan a relajarnos después de afrontar lecturas de más calado. Por eso es un género que me gusta frecuentar de vez en cuando, y elijo títulos en los que, después de informarme sobre ellos, tengo muy claro que me van a levantar, cuando menos, una sonrisa. Aunque he de reconocer que soy de risa fácil, y cualquier situación que raye en lo cómico lleva todas las papeletas para que suelte alguna carcajada. En esta ocasión, y aprovechando que están próximas las fiestas navideñas, aproveché un título que es muy apropiado para leer en esta época del año: Inspector Disáster. Operación Navidad, la primera entrega de una saga protagonizada por este peculiar personaje.

En mi modesta opinión, aunque la novela está enfocada al público juvenil de echo está catalogada como thriller juvenil—, entiendo que es una lectura apropiada para cualquier lector que disfrute con este género literario. Incluso diría que es una novela que sirve para que a los niños le entre el gusanillo de la lectura, aunque entiendo que sería mejor que estuviesen acompañados por un adulto, porque habrá situaciones que vivan los personajes o expresiones coloquiales que les resulten difíciles de comprender.

El título de esta primera novela protagonizada por el inspector Disáster ya da al lector un adelanto de lo que se va a encontrar a lo largo de los capítulos. Y es que el lector verá cómo este personaje se va a enfrentar a un problema muy peliagudo, porque está muy próxima la época en la que entran en acción tanto los Reyes Magos como Santa Claus, y se tiene que enfrentar a un caso que ayudará a agrandar su leyenda: han desaparecido los regalos que tienen que repartir los personajes antes citados. Pero junto a este difícil caso al que se enfrenta, el lector se encontrará con otra historia paralela, que nos trasladará a la década de los ochenta del siglo pasado, en la que conocerá a otro de los personajes de la novela, el mafioso de poca monta Rodolfo Mandolfo. Dos historias que correrán a la par a lo largo de la novela, que confluirán en el último capítulo. Aunque este personaje nada tiene que ver con la trama principal de Operación Navidad, entiendo que pasará a formar parte del equipo del inspector Disáster en los nuevos casos que tenga que investigar.

Operación Navidad es una novela en la que el humor negro estará muy presente, principalmente en la segunda línea temporal, en la que cruzaremos el charco y conoceremos a Rodolfo Mandolfo en la ciudad porteña de Buenos Aires, y los motivos que le llevarán a poner los pies en polvorosa, cruzar el charco y terminar su fuga en el pequeño piso del inspector Disáster, en un castizo barrio madrileño. En esta subtrama, el lector se encontrará con clichés propios de lo que yo llamo la genuina novela negra, reflejados con gran acierto por la autora a la hora de mostrar las situaciones cómicas que viven los personajes, sin perder la esencia del género. En la subtrama principal, el lector se encontrará con un humor en el que predominarán las situaciones disparatadas, rocambolescas, incluso algunas de ellas muy absurdas, pero que están muy de acorde con las características de los personajes.

Pese a que el inspector Disáster es el personaje central de la novela, entiendo que estamos ante una obra coral, porque los secundarios que aparecen a lo largo de los capítulos tienen un gran peso en la trama. Para conocerlos, el lector tendrá una gran ayuda en las simpáticas y magníficas ilustraciones que encontrará al comienzo de cada uno de los trece capítulos en los que está estructurada. Son un variopinto grupo de personajes que están bien construidos por la autora, formando ese peculiar universo que rodeará al no menos peculiar inspector Disáster, profundizando incluso en el pasado de algunos de ellos. Al principio del cuerpo de la novela, el lector se encontrará con el elenco de personajes que tomarán parte en esta divertida, disparatada y alocada aventura.

Carmen Fernández ofrece al lector una novela fresca, le lectura fácil y ritmo trepidante, sobre todo en la primera línea argumental, escrita con un lenguaje sencillo, con mucha gracia y expresiones coloquiales que formarán parte de unos diálogos muy ocurrentes; en ocasiones diría que vacíos, por las peroratas que sueltan algunos de los personajes, con las que pretenden mostrar su ingenio a la hora de ayudar a resolver el caso que el inspector Disáster tiene encomendado para rescatar los juguetes desaparecidos. Sin duda alguna, cumple con el propósito de hacer pasar al lector un momento agradable, y cuando menos la sonrisa la tiene asegurada, por las situaciones disparatadas que acompañarán a los personajes en este ocurrente y peculiar caso detectivesco, en donde la intriga estará muy presente, sobre todo en la primera línea argumental, porque el lector se preguntará quién habrá osado cometer semejante canallada.



Biografía:


Carmen Fernández nació en Ferrol, por aquel tiempo en el que los astilleros de Astano perfilaban orgullosos el skyline de la bella ciudad portuaria. Trabaja desde su juventud traduciendo obras de oros a la espera de que un día sean otros los que traduzcan la suya. Entretanto, pasa el rato escribiendo relatos juveniles.

Pablo Matera nació en Argentina hace algunos años. Dibuja desde su más tierna edad, y ha mejorado mucho desde entonces. Desarrolló su carrera profesional como colaborador del periódico La Nación. Actualmente alterna su labor de ilustrador ilustrativo con la de guionista y artista conceptual.

Nota: Datos técnicos y sinopsis, tomados de Amazon. Biografías Fernandez y Pablo Matera, tomadas de la web del inspector Disáster. 



















11 comentarios:

  1. No soy mucho de leer este tipo de libros aunque al menos una vez al año leo alguno. Me alegra que lo hayas disfrutado y que te haya hecho sonreír.

    Bs.

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  2. Yo tampoco soy de leer este tipo de libro, pero de vez en cuando viene bien...
    Apuntado queda.
    Besos

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  3. Alguna que otra novela de humor he leído este año. No suelo hacerlo pero a veces cae alguna en mis manos y reconozco que si están bien llevadas las disfruto. El tema de ésta parece entretenido pero eso de thriller juvenil me tira un poco para atrás, la verdad. Eso sí, la época para leerlo es justo esta, así uno se mete más en la trama
    Un abrazo

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  4. Querido Francisco: ¡Me he quedado con la boca abierta con tu reseña! Tanto que me han entrado unas ganas locas de leer "Operación Navidad"! Mi intención con esta novela era, como explico en el prólogo, escribir una "chorradita" destinada a un público juvenil. Sin embargo, los personajes y sus diálogos se me fueron un poco de la mano y me temo, que a pesar de la temática, no resultaron tan juveniles como esperaba, lo que hace que sea una lectura cuando menos "curiosa". Qué te voy a decir de tu reseña: ¡es de esas que hacen que te apetezca leer un libro! Muchísimas gracias por todo.

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  5. Uy, pues fíjate que a mí el lenguaje me pareció complicado para enfocar el libro a un público muy joven. De hecho creo que incluso puede haber lectores adultos a los que les cueste hacerse con él. Por cierto, que no hemos tenido noticias en todo el año de una segunda parte del inspector Disaster, así que a ver si Carmen nos da pronto buenas noticias.

    ¡Besote!

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  6. Yo no suelo animarme con las novelas de humor porque no las disfruto y en general provocan en mí justo el efecto contrario al que pretenden.
    Besos.

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  7. Yo no me veo leyendo este libro,la verdad.
    Besos

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  8. Esta no es para mi. Es un género que no disfruto.
    Un beso ;)

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  9. Ays, que lo tengo, pero como murió mi lector y no he vuelto a hacerme con uno no he podido leerlo. Pero he sido buena este año y estoy segura que los Reyes me van a traer uno así que el año que viene cae seguro.
    Besotes!!

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  10. Me encantan los calamitosos congénitos, será por afinidad, jajajaja. Este libro no me lo pierdo, me encantan estas historias fuera de normas, mucho.
    Mil besitos.

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  11. No ho sé, me atraen los personajes variopintos, pero tengo un humor especial y este libro no termina de parecer de los que me harían reír.

    Un saludo,
    Laura.

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