Datos técnicos:
Título: Las rosas de las espinas.
Autora: Alexandra Martin Fynn.
Editorial: Ediciones Simionema.
1ª edición: Febrero/2021.
Encuadernación: Tapa blanda.
ASIN: B087FKQ1S.
Idioma: Español.
Nº pág.: 248.
Sinopsis:
Estados Unidos, 1862
Maddison
Thomas es una joven viuda que acaba de librarse de un matrimonio que
la había sumergido en el infierno. Ahora, ella dedica su vida y toda
su energía a trabajar en la fábrica de revólveres Colt, a la que
ama como si fuese su hogar. Jack Johnson, abogado de la empresa Colt,
es un sujeto sin escrúpulos, que oculta un pasado inconfesable. Se
dedica a hacer lo que le viene en gana, poniendo sus propios deseos
por delante de todo.
Maddison
y Jack no se tratan; apenas si han intercambiado algunas palabras.
Nada tienen en común, salvo la indisimulada antipatía que se
profesan. Y a pesar de que se esfuerzan por no cruzarse, el destino
les tiene reservada una sorpresa que resultará una pesadilla para
los dos: Elizabeth Colt, la propietaria de la compañía, les ha
encargado la misión secreta de entregar mil revólveres sin registro
al comandante del Ejército del Potomac. Para hacerlo, deberán
viajar juntos durante largos días, atravesando un país que arde en
plena Guerra Civil.
Con
evidente pesar, Maddie y Jack aceptan compartir el periplo. Ambos se
internan en un territorio sin ley, donde la vida no vale nada, y
pronto descubren que no tienen más remedio que tolerarse y brindarse
apoyo para salir airosos de semejante gesta. Pero con el tiempo y el
acúmulo de dificultades, comenzarán a ver en el otro algo más que
un indeseado compañero de viaje. Paso a paso, aprenderán a apreciar
la belleza de las rosas que florecen entre las espinas.
Opinión Personal:
Si la memoria no me falla, Las rosas de las espinas es la segunda novela que leo ambientada en la Guerra de Secesión Estadounidense, y que se califica como uno de los mayores iconos de la cultura universal, junto con su adaptación cinematógrafica: Lo que el viento se llevó, de Margaret Mitchel, un clásico de la historia de la literatura de los Estados Unidos. En mi modesta opinión, diría que Las rosas de las espinas es una novela histórica con un claro sabor a clásico, por cómo se desarrollan los episodios que se suceden a lo largo de los cuatro capítulos más el epílogo en el que está estructurada la trama, en la donde el romance está también muy presente. Sin duda alguna, su autora, Alexandra Martin Flynn, supo cómo amoldar la historia protagonizada por Maddison Thomas y Jack Johnson a los cánones de la época en la que transcurre la historia relatada por un narrador omnisciente.
(Elizabeth Colt) |
Me resultó muy atractivo cómo reparte Alexandra Martin Fynn la información sobre todo lo relativo al conflicto armado entre el ejército de la Unión y el de los Estados Confederados, cuyos episodios giran en torno a las tropas del Potomac, que había establecido su Campamento General en Arlington Heights. Es de agradecer que en una novela con un claro trasfondo histórico el autor de turno decida dosificar la información sobre la época en la que se desarrolla la trama a través de diversos conductos, repartida en esta ocasión entre diálogos, episodios redactados en forma epistolar y la que ofrece el narrador omnisciente en diversas fases de la trama, lo que incita a que el lector se sienta más interesado los temas que aborda, y que guardan relación con la guerra civil estadounidense que tiene lugar entre 1861 y 1865, con la esclavitud como detonante de la misma. Esta dosificación de la información hace que la lectura sea fluida y amena, porque se intercala entre episodios en los que la acción está muy presente, al igual que la intriga y la tensión narrativa que se refleja sobre todo en el primer tramo de la novela, así como en determinados episodios que tienen lugar en la segunda parte, en la que crece el interés por los giros que se suceden, alguno de los cuales atrajeron mucho mi atención por lo que éstos suponían para el desarrollo de los acontecimientos posteriores, y que dieron lugar a que me preguntara qué desenlace me esperaba, teniendo en cuenta también el romance que forma parte de la trama, si bien tal y como se desarrolla da lugar a una cierta desconfianza sobre el protagonista masculino, dadas las peculiaridades que caracterizan su personalidad.
(Lincoln y Gral. George McClellan) |
Alexandra Martin Fynn desarrolla una trama muy atractiva, en la que se percibe el mimo con el que describe los episodios que se desarrollan siguiendo los cánones de la época, relatado con un lenguaje sencillo pero muy cuidado, lo que incita a que la lectura sea muy fluida, pese a que domina con diferencia la narración frente al diálogo. La acción, los episodios en los que el peligro es palpable y determinados hechos que intrigan al lector por su desarrollo, en los que le sorprende el desenlace del mismo una vez que se descubre su planificación, dan lugar a que esté muy pendiente de todo lo que sucede a lo largo de los capítulos tras la reacción del personaje afectado por el mismo. Se encontrará con escenas que de alguna forma le trasladan al Lejano Oeste, por la presencia de forajidos, de los indios mahowks en determinados episodios, o negreros que se dedican a la búsqueda y captura de esclavos fugados de las plantaciones sureñas. No me olvido de las historias que se cuentan sobre los exesclavos que toman parte en la misión, lo que me trajo a la memoria escenas propias de La cabaña del Tío Tom, de Harriet Beecher Stowe, y del papel que desempeña la mujer en una época con un conflicto bélico fratricida de por medio, con el peligro que esto supone para quienes decidan implicarse en el mismo.
Sin duda alguna, Las rosas de las espinas es una lectura muy entretenida, en la que se encontrarán con una historia contada por una autora que pone mucho celo en el desarrollo de los episodios que la conforman, para que sientan que realizan un verdadero viaje literario a la época en la que la Guerra de Secesión Estadounidense, porque los hechos que relata el narrador omnisciente provoca en el lector el efecto deseado. La experiencia docente llevó a la autora a vivir un tiempo en los Estados Unidos, en donde se inspiró para escribir la novela que hoy reseño, y sin duda alguna recomiendo.
Biografía:
Notas: Datos técnicos, sinopsis y biografía de la autora, tomados de Amazon. Fotografía de Alexandra Martin Fynn, tomada de la web de Ediciones Simionema. Imagen de Elizabeth Colt, tomada de Wikipedia. Imagen del Presidente Lincoln y del general George McClellan, tomada de Wikiwand.
Buenos días:
ResponderEliminarYa sabes que me gusta mucho esta época de la historia estadounidense. Por ello, me llevo este título para investigar sobre y sobre su autora, que me era totalmente desconocida. ¡Muchas gracias por darme a conocer a ambas!
Un abrazo y enhorabuena por la reseña!!
Muy interesante la novela que nos traes hoy. Bajo ese título no hubiese imaginado lo que nos encontraríamos. Me parece una trama muy original, yo creo que sobre ese periodo y ese conflicto poco he leído también pero me ha resultado muy llamativo. Un abrazo
ResponderEliminarNo conocía ni el título ni a la autora. Yo he leído además del clásico Lo que el viento se llevó, varias veces, Norte y Sur. Y las dos me han gustado mucho, o sea que la temática me atrae, y la historia es también buena. Lástima no tener vida para leer tanto como queremos.
ResponderEliminarBesos
Pues pensaba que esta vez no me ibas a tentar, pero al final me has convencido por completo.
ResponderEliminarBesotes!!!
No soy una gran fan de la literatura norteamericana, a excepción de un par de autores que me apasionan, pero sí me gusta esta época histórica del país, tanto en cine como en literatura.
ResponderEliminarMe lo llevo, de momento anotado, pero me lo llevo.
Besos 💋💋💋
Paco me había hecho una idea totalmente diferente de esta novela. Ahora al leerte me he dado cuenta de mi error. A ver, me gusta lo que cuentas lo que pasa es que, actualmente, tengo unos cuantos libros bajo el punto de mira que me atraen más. Será que por aquí ya hace calor y busco otro tipo de lecturas. Besos
ResponderEliminarSabes que no me gusta la novela histórica y no leo mucho de ese género. No sé si esa es la razón o no pero no me termina de convencer.
ResponderEliminarUn saludo.