jueves, 27 de mayo de 2021

La bibliotecaria de Auschwitz, de Antonio Irturbe.


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Datos técnicos:



Título: La bibliotecaria de Auschwitz.

Autor: Antonio Iturbe.

Editorial: Planeta.

1ª edición: Septiembre/2012.

1ª edición en esta presentación: Octubre/2019.

Encuadernación: Tapa dura con sobrecubierta.

ISBN: 978-84-08-21775-6.

Idioma: Español.

Nº pág.: 512.



Sinopsis:



Sobre el fango negro de Auschwitz que todo lo engulle, Fredy Hirsch ha levantado en secreto una escuela. En un lugar donde los libros están prohibidos, la joven Dita esconde bajo su vestido los frágiles volúmenes de la biblioteca pública más pequeña, recóndita y clandestina que haya existido nunca.


En medio del horror, Dita nos da una maravillosa lección de coraje: no se rinde y nunca pierde las ganas de vivir ni de leer porque, incluso en ese terrible campo de exterminio, «abrir un libro es como subirte a un tren que te lleva de vacaciones».


Una emocionante novela basada en hechos reales que rescata del olvido una de las más conmovedoras historias de heroísmo cultural.




Opinión Personal:

 



La barbarie producida durante la Segunda Guerra Mundial dio lugar a infinidad de historias reales que salieron a la luz. Una de estas historias es la novela testimonio La bibliotecaria de Auschwitz, de Antonio Iturbe, una emocionante historia basada en hechos reales que rescata del olvido una de las más conmovedoras historias del heroísmo cultural, como resalta la editorial en el la último párrafo de sinopsis. El escritor zaragozano toma como base de la trama el insólito caso de Dita Kraus, la bibliotecaria de Auschwitz, quien sobrevivió a cuatro campos de concentración, y la arriesgada labor que desempeñó en el campo familiar BIIb de Auschwitz II-Birkenau. En relación con lo que acabo de comentar sobre el carácter de novela testimonio, merece la pena recrearse con las aclaraciones que hace en lo que llama Etapa Final, relato posterior al cuerpo de la novela en el que «Quedan cosas importantes que contar sobre la bibliotecaria del bloque 31 y de Fredy Hisrch» (Pág. 465).

(Gueto de Terezin-Rep. Checa).
Quienes se interesen por La bibliotecaria de Auschwitz tienen que hacerse a la idea de que van a conocer una historia que sucedió en el mismísimo infierno que supuso el campo de exterminio de Auschwitz. Van a conocer una historia que remueve conciencias e invita a reflexionar sobre el lado más oscuro y cruel de la condición humana. Pero también les sorprenderá el valor que muestra «quien consiguió convencer a las autoridades alemanas del lager de que tener entretenidos a los niños en un barracón facilitaría el trabajo lode los padres de aquel campo BIIb, al que llaman «campo familiar» porque en el resto los niños son tan raros como los pájaros» (pág. 14). Un valor en el que la cultura es el arma que utiliza Fredy Hirsch y quienes se implican en esta arriesgada apuesta contra los nazis, porque luchan contra ellos desde la escuela clandestina, en la que ven la oportunidad de transmitirla, aun sabiendo que su apuesta supone un grave peligro para su integridad física, ya que son conscientes de lo que significa los libros para los nazis, para quienes son peligrosos e invitan a la subversión. Un valor en el que también se implica cada vez con mayor convicción la protagonista de esta novela, Dita Adlerova, quien acepta la función que le proponen realizar. Pese a las precauciones que toma para realizar las labores que le encomiendan, quien es consciente del final que le espera si la descubren, sobre todo desde que se siente vigilada por el doctor Josef Mengele, quien con sus demenciales pruebas con los presos, se ganó el sobrenombre del «Ángel de la Muerte».

Pero junto a la atmósfera de terror que domina en La bibliotecaria de Auschwitz, el narrador omnisciente ofrece grandes dosis de metaliteratura a lo largo de los 32 capítulos en los que se estructura la trama, más un epílogo, una etapa final y un anexo en el que Antonio Iturbe explica qué fue de los personajes reales que forman parte del elenco de quienes transitan por las páginas de esta magnífica novela, a la par que dura y espeluznante, por los diferentes episodios que cuesta trabajo digerir y asimilar, ante lo que sucede en cada uno de ellos. Sin duda alguna, las alusiones literarias que se reflejan a lo largo de su desarrollo son un gran aliciente para que el lector esté muy pendiente de lo que sucede en cada uno de los capítulos, y un gran acierto del autor a la hora de utilizar los títulos que menciona y las referencias que hace la voz narrativa a fragmentos de los mismos, porque guardan relación con algunos episodios de esta novela. El lector no sólo se familiarizará con los títulos que forman parte de la pequeña biblioteca que tienen en el bloque 31, sino también con títulos que se citan, y que de una forma un otra guardan relación bien con el pasado de Dita Adlerova, bien con episodios que tienen lugar en Auschwitz o en el campo de concentración de Bergen-Belsen. Títulos como La montaña mágica, La ciudadela, El conde de montecristo o El diario de Ana Frank, y algunos más que atraerán su atención, junto con los que forman parte de la ya mencionada biblioteca, a los que hay que añadir los que se conocen como libros vivientes.

(Campo Conc. Bergen-Belsen-Alemania)
Antonio Iturbe construye una historia de personajes, pese a que se mimetizan con las descripciones espacio-temporales que realiza el narrador omnisciente. Unos personajes que atrapan al lector y no le dejan indiferente por cómo se suceden los episodios desde que las tropas nazis toman Praga. La vida de la protagonista y su familia cambia, porque comenzarán una pesadilla que continúa en el gueto de Terezín y se prolonga en el tiempo en los mal llamados campos de concentración de Auschwitz y Bergen-Belsen. En mi modesta opinión, entiendo que en una historia de esta índole el lector está más pendiente de su día a día, sometidos a unas condiciones de degradación extrema, en la que tienen como única meta la de subsistir y rezar para que no sean ellos los siguientes en ser enviados a los hornos crematorios o, en el menor de los casos, librarse de las enfermedades que imperan en los barracones en los que son hacinados. Son historias de las que estuve muy pendiente en todo momento, aunque sobre todo me sentía imantado por el arrojo que muestran quienes realizan las actividades en el bloque 31. Sin duda alguna, es Dita Adlerova la protagonista de esta conmovedora y emocionante novela, desde cuyo punto de vista el narrador omnisciente describe todo lo que sucede a lo largo de los capítulos que la conforman. Si bien la voz narrativa desviará nuestra atención a otros personajes, porque el papel que desempeñan es trascendental para el desarrollo de la trama, caso del ya mencionado Fredy Hirsch, o los protagonizados por Rudi Rosenberg y Fred Wetzler, al igual que el desempeñado por Siegfried Lederer y el cabo primero de las SS Viktor Prestek, en los que hay unas grandes dosis de intriga, por el significado que tienen las decisiones que adoptan estos personajes, sin olvidarme del lugar que ocupa Margit Barnai en la vida de Dita Adlerova. Pero también atrajeron mi atención, si bien en menor medida, el profesor Lichtenstern, del bloque 31, o la señora Turnovská, a quien llaman Radio Birkenau, porque era incapaz de guardar un secreto, sin olvidarme de lo que significan en la trama los nazis Josef Mengele o Elizabeth Volkenrath, a quienes les acompañan el terror y la muerte.

La bibliotecaria de Auschwitz es para mí un novelón, en el que el lector siente que realiza un viaje literario a los campos de exterminio nazis, y se reencuentra con unos personajes reales que vivieron y sufrieron en sus carnes el terror auspiciado por el Tercer Reich. En mi modesta opinión, entiendo que uno de los grandes aciertos del escritor zaragozano es utilizar el tiempo presente en la voz narrativa, porque implica de pleno al lector en lo que sucede a lo largo de los capítulos que conforman la trama, con el añadido de que utiliza un estilo muy directo, con el que logra que los episodios que narra impacten en el lector. Su lectura se me hizo fluida, quizás influenciado por lo que acabo de comentar, pese a que domina claramente la narración frente al diálogo. Sin duda alguna, La bibliotecaria de Auschwitz es una historia sobre el Holocausto que atrapa al lector desde las primeras líneas y acompaña a lo largo de los capítulos a Dita Alderova en el terror que le tocó vivir en Auschwitz y Bergen-Belsen.


Biografía:


 

Nació en Zaragoza, en 1967, y creció en Barcelona. Ha publicado las novelas Rectos torcidos (2005), Días de sal (2008) y La bibliotecaria de Auschwitz (2012), ganadora del Premio Troa «Libros con valores» y publicada en once países. Es autor de la serie de libros infantiles Los casos del Inspector Cito, traducida a seis lenguas y de la serie La Isla de Susú. Como periodista cultural, ha trabajado en El Periódico, en Fantastic Magazine y en Qué Leer, revista de la que fue director durante los últimos siete, y ha colaborado en radio y en publicaciones como Fotogramas o Avui. Actualmente es director de la revista Librújula, colaborador en Cultura/s, El País, Heraldo de Aragón y Mercurio, e imparte clases en la Universitat de Barcelona y en la Universidad Autónoma de Madrid.


Nota:  Datos técnicos, sinopsis, biografía y fotografía del autor, tomados de la web de Planeta. Imagen del gueto de Terezín, tomada de la web Cheapskate Travel. Imagen del campo de concentración de Bergen-Belsen tomada de la web Holocaust Encyclopedia.










10 comentarios:

  1. Lo leí hace unos años y me gustó mucho. Hace poco leí Postales del Este y es parecido; la verdad que es un tema muy duro pero nunca tiene que caer en el olvido. Besos!

    ResponderEliminar
  2. Hola Paco, aunque en principio todos los libros que hablan sobre libros me llaman, los desarrollados en campos de concentración y la II Guerra Mundial me echan un poco para atrás por la dureza de la temática, así que este libro no se si es para mi. Tendré que pensarlo. Besos.

    ResponderEliminar
  3. Es un libro que llegó mi a través de un sorteo y lo fui postergando hasta que al final me decidí, y la verdad me llevé una muy grata sorpresa, me gustó mucho, lo disfrute de veras.
    Bueno reseña Paco 🥰💋

    ResponderEliminar
  4. Coincido contigo, es un novelón de principio a fin. Lo leí hace unos años y es de esos libros que se me han quedado grabados en la cabeza.
    Besotes!!!

    ResponderEliminar
  5. Yo llegué a este libro por una entrevista en la radio a Iturbe, donde explicó que en el libro "La biblioteca de noche" de Manguel había una referencia a la existencia de una pequeña biblioteca en Auschwitz. Y que se puso a investigar. Desde luego con un resultado estupendo al recuperar esta historia que nadie deberíamos olvidar.
    Por cierto, la protagonista, Dita, aún vive.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  6. Espectacular entrada la tendré más que en cuenta porque amo cuando se habla de libros.
    Me encanta.
    Un enorme saludobuho😊🍁

    ResponderEliminar
  7. Tienes toda la razón, Paco. Un novelón como la copa de un pino. Yo este libro lo leí de la biblioteca. Me gustó tanto, tanto, que luego tuve que comprarlo. Me maravilló. Una historia preciosa. Muy recomendable. Besos

    ResponderEliminar
  8. Buenas noches:
    Hace tiempo que quiero leer este libro. Después de leer tu reseña me has despertado aún más mi interés. ¡Muchas gracias por recordármelo!
    Un abrazo y enhorabuena por tu estupenda reseña!!

    ResponderEliminar
  9. Lo leí hace bastantes años y no me acuerdo demasiado de él pero sí recuerdo que me gustó muchísimo. Es increíble como entre tanta podredumbre siempre hay sitio para cosas preciosas: bibliotecas, orquestas, costura, clases...
    Besos

    ResponderEliminar
  10. Me gustó mucho, siempre me gustan y llaman la atención las novelas que transcurren en las GM o en la Civil española, esta la verdad es que me mantuvo súper enganchada. Además tiene muchas frases que enmarcar.

    Besotes

    ResponderEliminar