jueves, 31 de octubre de 2019

Las flores de la guerra, Geling Yan.





















Datos técnicos:


Título: Las flores de la guerra.
Título original: The Flowers of War.
Autora: Geling Yan.
Traductora: Nuria Pitarque Ledesma.
Editorial: Punto de lectura.
1ª edición: Enero/2013.
Encuadernación: Tapa blanda.
Idioma: Español.
ISBN: 978-84-663-2674-2.
Nº pág.: 256.



Sinopsis:

1937, Nanjing: el ejército japonés ha entrado en la capital china a sangre y fuego. La guerra ha atrapado a Shujuan junto con otras doce estudiantes en el desván de la parroquia Santa María Magdalena, al cuidado del padre Engelmann. Aunque hay algo que sacude su mundo con más fuerza que el sonido de los disparos.
Cuando la misteriosa y seductora Zhao Yumo llega al frente de un grupo de prostitutas en busca de refugio, las niñas y los clérigos tienen que enfrentarse a sus propias encrucijadas: ¿dónde está la justicia?, ¿qué los distingue de esas mujeres?, ¿cómo defenderse de la crueldad?


Opinión Personal:




Hay conflictos bélicos que nos resultan más lejanos y desconocidos, ya no solo por su ubicación geográfica, sino por las causas que originaron esos enfrentamientos armados y los contendientes que los protagonizaron. Por eso me llamó mucho la atención la novela de la escritora china Geling Yan, Las flores de la guerra, porque su argumento se desarrolla en la segunda guerra chino-japonesa, que finalmente enlazaría con la Segunda Guerra Mundial, tras el ataque del llamado ejército imperial a Pearl Harbour en 1941. Sin duda alguna, merece la pena su lectura, porque a lo largo de los 17 capítulos más el epílogo en los que está estructurada, el narrador omnisciente relata la masacre más repulsiva y cruel a la que se vio sometida la ciudad de Nanjing en el mes de diciembre de 1937 por las tropas japonesas. Una vez leída esta novela, uno se vuelve a preguntar hasta donde puede llegar la crueldad y la sinrazón humana con sus semejantes, aunque está claro que no tiene límites, después de que a lo largo de los siglos los choques militares forman parte de la historia de la humanidad.
(Nanjing-diciembre 1937)
La vida en la parroquia de Santa María Magdalena en Nanjing da un vuelco desde que las tropas japonesas entran a sangre y fuego en la que por aquel entonces era la capital China. El padre Englemann, el diácono Fabio Adornato, el cocinero George Chang, y el empleado Ah Gu, no contaban con que tienen que dar cobijo a las estudiantes de la Escuela de Santa María Magdalena. A estas alumnas hay que añadir a un grupo de prostitutas que escapan desde el río Quinhuai y saltan el muro de la parroquia para que las acogieran. El padre Englemann trata de disuadirlas, ante la escasez de agua y alimentos que tenían para subsistir. Pero la situación que vive la parroquia se complica desde el momento en el que tres militares chinos solicitan ser acogidos, ante el temor de que los apresen los soldados japoneses. El padre Englemann tiene que velar para que se mantenga el frágil equilibro entre personajes tan dispares, porque no está dispuesto a que unas niñas que no han salido de los muros de la parroquia se vean influenciadas por la falta de moral de las prostitutas. Pese a que las jóvenes estudiantes son alojadas en el desván, y las prostitutas en el sótano, no por eso dejarán de producirse situaciones tensas entre unas y otras, e incluso rencillas entre las propias alumnas, por lo que nuevamente el padre Englemann tenía que hacer valer su autoridad, en ocasiones ayudado por la autoridad que Zhao Yumo ejercía sobre las demás prostitutas. En este sentido, llama la atención el que tanto el padre Englemann como Zhao Yumo hagan uso de su autoridad procurando utilizar las buenas formas para conseguir aplacar los ánimos exaltados entre quienes comparten el mismo techo.

De nuevo el lector que sienta interés por leer esta novela que hoy reseño, se encontrará con una novela que no le dejará indiferente, ya no solo por el temor a lo que les sucederá a quienes se refugian en esa parroquia, que parecen tener una cierta esperanza de que no sufran las atrocidades a la que es sometida la población civil Nanjing, sino también por la reacción que tendrán quienes acuden a solicitar cobijo a un recinto en el que convivirán personajes de procedencia heterogénea, y que formarán un universo en el que se se producirán situaciones tensas que pueden ponerlas en riesgo, al tener información sobre lo que hacen los japoneses con chicas tan jóvenes como las que se refugian en la parroquia. Pero también el lector tendrá información a través de la voz narrativa sobre la salvaje y despiadada actuación de los soldados japoneses que cometen todo tipo de vejaciones en una población civil indefensa, y ejecutan a los soldados chinos sin miramiento alguno, omitiendo incluso los acuerdos firmados en la Convención de Ginebra, hasta el punto de que no respetan ni la Zona de Seguridad.  Son testimonios visuales porque se describen con detalle, de los que el lector podrá imaginar las escenas que relatan quienes tienen que salir por algún motivo de esa parroquia, pese a que saben que se juegan la vida si salen fuera de sus muros, o quienes relatan lo que les sucedió con las tropas japonesas por su condición de militares. Sin duda alguna, esos testimonios describen episodios duros, espeluznantes, crueles y desgarradores y uno vuelve a preguntarse cómo es posible que esos militares chinos pudieron salir con un mínimo hilo de vida de un escenario en el que se enfrentaron a episodios terroríficos originados por la crueldad y la sinrazón humana.

Las flores de la guerra es una novela de personajes, pese a que el lector se familiarizará con la parroquia de Santa María Magdalena, que irá conociendo con las minuciosas descripciones que relata el narrador omnisciente. Y es que Geling Yan construye una novela coral porque, como digo en estos casos, todos los personajes desempeñan un papel destacado en algunas fases de la novela, con el añadido de que tienen que mantener ese difícil equilibrio entre quienes conviven a la fuerza bajo el techo de una iglesia estadounidense. El lector tiene ante sí un universo de personajes cuyas vidas se entrecruzan en ese oasis, como lo define en algún momento de la trama el padre Englemann, y de los que el narrador ofrecerá información tanto de su aspecto físico como retazos del pasado de los que más peso tienen a lo largo de los capítulos. También relata reflexiones que hacen algunos de ellos ante situaciones que les afectan, o lo que piensan sobre algunos personajes con los que en algún momento dado mantienen una relación más cercana, e incluso íntima. Llamarán la atención del lector determinados detalles a los que se refiere el narrador, que  guardan relación sobre todo con los gestos, las miradas y las expresiones de los personajes, lo que ayuda a que uno imagine con claridad las escenas que protagonizan.

La lectura de Las flores de la guerra me resultó muy envolvente, porque Geling Yan supo cómo atraer mi atención desde las primeras páginas. La escritora china recrea una trama con tal realismo que todos los episodios que se relatan a lo largo de los capítulos bien pudieron ocurrir realmente en el mes de diciembre de 1937 en Nanjing. Ese realismo está plasmado también en las escenas que podrían definirse como costumbristas, como es el día a día de unas estudiantes que apenas alcanzan los trece años, y que no han salido de los muros que rodean la parroquia, y unas prostitutas que utilizan sus artes para conseguir sus propósitos, que no son otros que la subsistencia en un medio en el que la escasez de alimentos y agua puede conducir a un final drástico. Esa diferencia entre ambos grupos de jóvenes queda reflejada también en el lenguaje que utilizan en sus conversaciones, por lo que el padre Englemann y el diácono Fabio Adornato se las ven y desean en algunos momentos para que las alumnas no copien los malos modales y el lenguaje malsonante de las prostitutas, pese a que el choque entre unas y otras se producirá en varias fases de la narración. Geling Yan refleja también en el lenguaje la tensión que viven tanto el padre Englemann como Fabio Adornato, lo que en ocasiones dificultará su comprensión a sus interlocutores. Pero también el lector se encuentra con episodios de gran tensión narrativa en los que tienen presencia los militares japoneses, y que darán lugar a escenas muy desagradables que presenciarán las niñas desde su refugio. 

Quienes gustan leer novelas ambientadas en períodos bélicos tienen en Las flores de la guerra una lectura muy atractiva y envolvente, cargada de realismo, con un reparto coral de personajes trazados con un marcado trasfondo psicológico. Geling Yan muestra a lo largo de los capítulos a través de los personajes que buscan refugio en la parroquia de Santa María Magdalena en Nanjing, su lucha por la supervivencia y la incertidumbre que se va apoderando de ellos ante la masacre cometida por el Ejército Imperial Japonés en Nanjing, desde su entrada a sangre y fuego en la capital china. El desarrollo de la trama va de menos a más y el lector se encuentra en el tramo final con unos giros que atraen su atención por lo que significan para el devenir de la parroquia y sus moradores, y lo mantienen en vilo hasta el desenlace.



Biografía:


Geling Yan nació en Shangai en 1958 en el seno de una familia de artistas y a los trece años entró a formar parte del Ejército Popular de Liberación. Escribió sus primeras novelas en China, antes de trasladarse a Estados Unidos en 1989. Ha publicado más de veinte títulos, entre los que destacan La novena viuda (Alfaguara, 2011), declarada por Asia Wekley como una de las diez mejores novelas en lengua china de 2006. Su obra, traducida a catorce idiomas, ha sido llevada al cine con gran éxito y ha recibido numerosos premios, entre ellos el Premio a la Mejor Novela otorgado por el Primer Festival de Novela en 2010 para Little Aunt Tatsuru, y por la Academia China de Ficción en 2008 para Little Aunt Tatsuru y en 2011 para The Criminal Lu Yanshi.
Actualmente Geling Yan vive parte del año en Berlin y parte en Beijing. Las flores de la guerra es su primera novela en Punto de Lectura.

Nota: Datos técnicos, sinopsis y biografía de la autora, tomados de la web Megustaleer. Fotografía de Geling Yan, tomada de Wikipedia. Imagen masacre Nanjing 1937, tomada de la web The Nanking Massacre. Imagen cartel película Las flores de la guerra, tomada de la web de Abc.es.






15 comentarios:

  1. No sabía que era una novela. La película me gustó muchísimo y creo que la novela también me gustaría

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  2. No es mi género favorito, pero la ambientación me atrae, no puedo resistirme 🤗
    Una reseña estupenda.

    Besitos 💋💋💋

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  3. Ojo Paco que vuelves a sorprenderme para bien con una novela de un escritor fuera del ámbito castellano. Cuanta razón tienes y es que hay libros que nos enseñan trozos de historia que de otra manera no llegarían a nosotros.

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  4. Lo leí hace ya unos cuantos años y me gustó mucho. Muy buena reseña.
    Besotes!!!

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  5. No he visto la película ni leído el libro, pero creo que esta novela puede ser una buena propuesta, aunque solo sea por la relación entre las colegialas y las prostitutas. He leído alguna novela más ambientada en la guerra entre chinos y japoneses que terminó uniéndose a la Segunda Guerra Mundial y siempre me resultan muy ilustrativas.
    Un beso.

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  6. No sabía que había una novela. Yo conozco la película, excelente, sentimental pero no sentimentaloide. Haré por leer. Desde luego, recomiendo la película.

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  7. Pues no, la maldad y la locura no tienen límites
    Esta novela la compré hace tres o cuatro años por alguna reseña que leí y aún la tengo en la estantería, qué desastre
    Besos

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  8. Hace tiempo quise ver la película, pero por un motivo u otro no lo hice y aquí me encuentro, sin haberla visto aún. Una de las cosas que me llamaba la atención de la película era precisamente el contexto y la trama que se desarrolla, el hecho de que varios grupos sociales se vean obligados a "convivir" en una parroquia para así sobrevivir... no sé si leeré el libro, aunque tu reseña me ha gustado bastante, pero así tomo nota porque quizás algún día me de por rescatar esta historia. Un saludo!

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  9. Paco tu reseña invita a leerla y eso que yo soy muy reticente con respecto a la literatura oriental. Ya veré qué hago. No sabía que habia adaptación al cine. Veré si le echo un ojo también. Besos

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  10. No conocía ni la novela ni la película y lo que cuentas me parece muy interesante. Me apunto ambas y ya lo miraré. Besinos

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  11. Vi esta película y me pareció buenísima. Se ve que la novela que la inspira no se queda atrás.
    Besos

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  12. Es un libro que ya me llamó la atención en su momento y no me importaría nada leerlo. Es una pena que libros tan especiales sean relegados por el montón abrumador de novedades.
    Me ha gustado tu reseña.
    Besos

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  13. Hum, le temo al costumbrismo y a las descripciones, pero si hay una película, podría pensarlo, porque el tema me llama mucho la atención. Gracias por la reseña^^

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  14. Una ambientación diferente, al menos yo no había leído nada de la Guerra chino-japonesa. Te ha quedado una magnífica reseña, que sin duda invita a leer la novela. Un abrazo

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  15. Llegué a este libro después de ver la peli, que me encantó y me encanta, creo que no pude llorar más viéndola.
    Aún con sus diferencias con la adaptación (que vi bastante bien apañada), me gustó muchísimo y me produjo un nudo constante en la garganta... eso sí, fue peor aún cuando busqué información sobre la guerra en sí, ya que no tenía mucho conocimiento sobre el tema, y en fin... sin palabras.

    Un libro que he recomendado muchísimo.

    Besotes

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