Título:
Pequeñas historias de ellas (relatos)
Autora:
Magdalena Albero Andrés
Editorial:
Maluma S. L. (enlace)
1ª
edición: febrero/2017
Encuadernación:
rústica con solapas
Idioma:
castellano
ISBN:
978-84-946361-2-7
Nº pág.:
290
Sinopsis:
Atenas,
Estambul, Londres, México, Taormina, Toronto… son algunos de los
escenarios donde ocurren estas historias. Presentan momentos de
cambio, íntimos o públicos, que muestran el acontecer de una vida.
Hablan de libertad, de soledad, de nostalgia, de esperanza, de
distintas formas de amar, de vida y de muerte. Recogen las voces de
madres, de emprendedoras, de mujeres que se arriesgan, que denuncian,
que crean, que cambian de país o de modo de vida, que descubren
secretos, que sobreviven a la adversidad, que son capaces de imaginar
presentes y futuros diferentes. Son las voces de treinta y seis
mujeres de distintas edades, que viven en lugares y momentos
históricos diversos. Mujeres anónimas en Europa y América han
inspirado estos relatos. Dos de ellos recogen la peripecia vital de
personajes históricos injustamente olvidados o poco reconocidos.
Opinión
Personal:
Me
sorprendió el buen hacer literario de Magdalena Albero Andrés con
su ópera prima, Los caminos del mar (reseña), novela con la
que ganó el Segundo Certamen Internacional de Novela Histórica
Ciudad de Úbeda. En esta su primera novela el personaje principal
era una mujer, y junto a ella el lector se encontrará con otras ya
más en un plano secundario, que también desempeñarán un papel
destacado en algún momento de la vida de Irene.
Y
de nuevo me vuelve a sorprender Magdalena Albero, esta vez con un
libro de relatos en el que encontré ciertos paralelismos con Los
caminos del mar. Y es que en ellos vuelve a ser la mujer el eje
en torno al que giran todas las historias que relatan diversas voces
narrativas. Al igual que su estilo, en el que utiliza un lenguaje
sencillo, cuidado y que absorbe la atención del lector, que se verá incrementada por el giro que se produce en algunos de ellos, en los que, además, la intriga, el suspense y el misterio ingredientes añadidos que que invitan claramente a su lectura;en mi modesta opinión, quizás los más atractivos. En este sentido, Sofía y la carta de Taormina «Sofía volvió a preguntarse por qué había accedido a viajar hasta Sicilia, por qué habia cumplido todas las instrucciones que le indicaba un abogado desde allí, por qué todavía no se había atrevido a llorar la muerte de Pedro y, sobre todo, por qué Pedro había dejado unas instrucciones tan extrañas», o ¿Dónde está Kate? «Salgo del coche y veo que el viejo Volvo azul marino de Kate está aparcado al lado de la casita de las herramientas...Subo las escaleras del porche y busco la llave que ella siempre esconde debajo de la primera maceta de la derecha», son un claro ejemplo de lo que acabo de comentar.
Magdalena Alberto nos ofrece un recopilatorio de historias de mujeres a través de las distintas facetas de su vida, en donde no faltan relatos en los que las niñas son narradoras o protagonistas de los mismos: En La ciudad de Hamila, en el que una niña le escribe al alcalde de Toronto una carta en la que podía manifestarle sus inquietudes y sus deseos de mejora para la ciudad donde vivían. Es un claro ejemplo de una ciudad en la que la globalización es una realidad.
En Pequeñas historias de ellas nos encontramos con mujeres actuales que nos ofrecen vivencias cercanas, en las que el lector se encontrará con un marcado realismo, porque las historias que nos ofrece en cada uno de ellas bien pudieron haber ocurrido. Son las voces de treinta y seis mujeres de distintas edades, que viven en lugares y momentos históricos diversos. Mujeres anónimas en Europa y América han inspirado estos relatos.
Magdalena Alberto nos ofrece un recopilatorio de historias de mujeres a través de las distintas facetas de su vida, en donde no faltan relatos en los que las niñas son narradoras o protagonistas de los mismos: En La ciudad de Hamila, en el que una niña le escribe al alcalde de Toronto una carta en la que podía manifestarle sus inquietudes y sus deseos de mejora para la ciudad donde vivían. Es un claro ejemplo de una ciudad en la que la globalización es una realidad.
En Pequeñas historias de ellas nos encontramos con mujeres actuales que nos ofrecen vivencias cercanas, en las que el lector se encontrará con un marcado realismo, porque las historias que nos ofrece en cada uno de ellas bien pudieron haber ocurrido. Son las voces de treinta y seis mujeres de distintas edades, que viven en lugares y momentos históricos diversos. Mujeres anónimas en Europa y América han inspirado estos relatos.
(Smith College-Northampton-Massachussetts)
Son
36 relatos de corta extensión. En dos de ellos, la autora
reivindica el papel que desempeñaron en su época mujeres olvidadas
por la historia: Sophia Smith fundó el Smith College en
1871. En torno a esa institución nos ofrece el relato Mi
amiga Erika, en la que la
narradora evoca cómo fue su relación con Erika desde que
coincidieron en esa universidad privada femenina estadounidense. La
última carta de la emperatriz es
un relato epistolar inspirado en Teodora,
emperatriz de Bizancio,
en el que se dirige a quien era su esclava «Eres
también mi pupila. Y veo también en ti a la hija que tuve que dejar
por el camino de la vida. Por eso he intentado darte lo que no pude
ofrecerle a ella. Hoy me despido de ti».
Y en Doña Sancha,
la novia que se perdió en el mar,
inspirado en leyendas de la isla canaria de La
Gomera, nos ofrece una
historia que me encantó. Escrita
en forma de diario, en los episodios que nos va relatando y que
tienen lugar entre 1395 y 1410, nos cuenta lo que le sucede en esta
isla a la que llega tras un naufragio agarrada a una tabla.
Este relato y el anterior son los únicos que se desvían de ese
carácter actual de los que conforman el libro. En Silvia
y los pueblos blancos nos
encontramos con un relato que sobrecoge al lector por lo que les
ocurre a quienes habitaban en la casa «que
pretendía utilizar como segunda vivienda»,
y en la que se encontrará con una caja que contenía un escrito de
principios del siglo XVII. Como histórico puede calificarse también
La larga noche de Camille,
inspirado en la vida de la escultora Camille
Claudel, que fue modelo
y musa del escultor Rodin,
en el que de forma epistolar expresa sus impresiones de su estancia
en una institución psiquiátrica en la que pasó los últimos años
de su vida.
De
los 36 relatos, hay dos de ellos que me llamaron la atención por
su originalidad: Los hijos de Berta, en donde la
narradora recordará algunas fases de su vida a través los olores
que la fueron acompañando a lo largo de ella. En Los colores
de Cynthia, serán los
colores quienes recrearán su vida, que la acompañarían a lo largo
de su vida como fotógrafa.
(Mosaico emperatriz Teodora de Bizancio)
Magdalena
Albero construye 36
historias muy atractivas para el lector, en las que nos llevará de
una orilla a otra del Océano Atlántico. Algunos de ellos bien podían ser el germen de una novela, caso de
Ilonka y los espejos,
en donde «La
vida de Ann giraba alrededor de los deseos de su vecino, Mr. Stone.
Ella obedecía sus órdenes, cumplía su compromiso, respetaba su
parte que en un momento había aceptado creyéndolo puntual...Porque
Ann cambiaba de Au Pair cuando mr. Stone se lo decía, buscaba que
cada chica nueva tuviera los rasgos que él quería y se aseguraba de
que nada pudiera interponerse a la mirada lasciva de su
teleobjetivo». O
Beth y el asesino de Kevin en
donde el lector se trasladará a «Una
tarde de octubre de 1975, Peter Trevor, un joven economista residente
en una zona acomodada de Manhattan, recibió en su casa un paquete»
Pequeñas
historias de ellas es un recopilatorio de relatos en el que el
lector se encontrará de nuevo con el buen hacer literario de
Magdalena Albero. Son 36 relatos cortos, absorbentes, cercanos, creíbles y que nos hacen vivir lo que sienten los personajes a lo largo de su desarrollo, en los que
la mujer vuelve a ser protagonista en todos ellos.
Biografía:
Magdalena
Albero Andrés es profesora titular en la Facultad de Ciencias de la
Comunicación
de la Universidad Autónoma de Barcelona. Ha sido
investigadora visitante en diferentes universidades de Estados Unidos
y Canadá, y ha escrito varios libros y artículos científicos sobre
juventud y medios de comunicación. En el campo de la ficción, ha
publicado relatos en diversas antologías. Los
Caminos del mar,
su novela debut, ha resultado ganadora del segundo Certamen
Internacional de Novela Histórica Ciudad de Úbeda. En
febrero de 2017 publica el libro de relatos Pequeñas historias de
ellas con la editorial Maluma, S. L.
Nota: Datos técnicos, sinopsis y biografía de la autora, tomados de la web de la editorial. Imágenes que acompañan al cuerpo de la reseña y fotografía de la autora, de google imágenes.
Los relatos me dan muchísima pereza la verdad.
ResponderEliminarBesos.
Tiene buena pinta, me lo apunto.
ResponderEliminarBesos
¡Hola Paco!
ResponderEliminarYa lo he dicho muchas veces, pero me encantan los relatos, para leer y para escribir, me fascinan, son pequeñas novelas en pocas páginas ¿Qué más se puede pedir? así que lo anoto porque me ha gustado lo que nos has contado.
Un beso.
Los relatos no me van mucho y de momento no me animo.
ResponderEliminarUn beso
Muy buena pinta tiene este libro, y además con lo que me gustan los relatos. Me lo apunto, abrazos.
ResponderEliminarNo soy lectora de relatos... no llego a conectar con ellos
ResponderEliminarPues ya me llamó la atención cuando lo reseñó albanta y me sigue gustando lo que contáis.
ResponderEliminarBesos.
Ya sabes que me gustan los relatos así que con estas historias me tientas.
ResponderEliminarBesotes!!!
No estoy peleado con los relatos y este libro me parece interesante, cortos , multiculturales y con historia.
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Paco, por tu estupenda reseña
ResponderEliminarNo soy aficionada a los relatos pero este libro me llama la atención
ResponderEliminarBesos
Me encanta el género, pero esta antología no sé por qué no me tienta demasiado. Gracias por la recomendación.
ResponderEliminarUn abrazo, feliz finde ;)
Unos relatos que seducen, sin duda, Paco. Habrá que tenerlos en cuenta. Un abrazo
ResponderEliminarMe cuestan los relatos pero hay que reconocer que estos tienen buena pinta y Magdalena escribe muy bien.
ResponderEliminarBesos
Hum, me alegro que te hayan gustado, pero los relatos cortos no son lo mío.
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