Datos
técnicos:
Título:
El alquimista de Granada
(The
Student of Salamanca)
Autor:
Washington Irving
Pórlogo,
traducción y notas: Federico Villalobos
Editorial:
Trapiés
Colección
Cardinales
1ª
edición: 2008
ISBN:
978-84-935427-6
Idioma:
Castellano
Nº
páginas: 126
Sinopsis:
Cuando
el joven estudiante Antonio de Castros decidió desentrañar el
misterio que rodeaba al extraño erudito con el que se topó en la
biblioteca de la universidad de Granada, poco podía imaginarse la
aventura en la que se iba a ver envuelto. Las ruinas de la Granada
nazarí sirven de decorado para un historia que se desarrolla en una
España donde el tiempo parece haberse detenido en la Edad Media. Los
secretos de la alquimia y la fascinante búsqueda de la piedra
filosofal; las intrigas del temible libertino don Ambrosio de Loxa;
el amor por la bella Inés y lo lóbregos calabozos de la Inquisición
son los ejes centrales de este relato, con el que Washington Irving
se situó en la estela de la novela gótica y inició su peculiar
recreación literaria de una ciudad a la que contribuyó a dar fama
universal.
Opinión
Personal:
No
había leído nada hasta la fecha deWashington
Irving y elegí esta novela corta de El
alquimista de Granada, con el subtítulo
de El estudiante de Salamanca
para, así, no confundirla con la obra de Espronceda,
que lleva el mismo título. Me encontré con una lectura agradable
aunque el lector se encontrará con un vocabulario que nos parecerá,
en ocasiones, pasado de época. Para este próximo año espero leer
los Cuentos de la Alhambra,
que tan prendada dejó al escritor estadounidense, quien residió
durante algún tiempo en España y quedó fascinado por lo que vio en
los viajes que realizó por nuestro país.
(Sala de los Abencerrajes-Alhambra)
Me
ha llamado la atención la visión que nos presenta Washington Irving
de Granada, ciudad en
la que sitúa esta historia con claros rasgos
góticos. Y es que los personajes se mueven
por una ciudad decadente en la que se nos hace continua referencia al
pasado esplendoroso de la época de los Abencerrajes, pues los
lugares que nos muestra están en un claro declive o bien desempeñan
actualmente unas funciones diferentes. Un paralelismo que encontramos
con la lúgubre mansión en la que vive el anciano don Félix de
Álvarez con su bella hija Inés. Mansión que presenta también
vestigios de una pasado lleno de opulencia.
Antonio
de Castros visitaba la biblioteca de Granada, en donde se fijó en un
curioso personaje, ya anciano, vestido todo él de negro, rodeado de
libros, que leía y consultaba con absoluta concentración. Esta
actitud le hizo sentir curiosidad por saber qué era lo que tan
absorto lo tenía e intentó entablar conversación con él, aunque
vio que era un hombre parco en palabras. Decide seguirlo para ver si
de esta forma descubre algo más sobre él. Un par de hechos que
sucederán serán la clave para que el joven estudiante entre en
contacto con el viejo y de esta forma compruebe que es la alquimia
lo que lo tiene tan absorto. Descubre que con él vive una joven muy
bella, Inés, de la que se enamorará y hará todo posible para que
ella le corresponda. Pero, pese a ello, no le será fácil conquistar
el corazón de Inés, pues se encontrará con un rival, Ambrosio de
Loxa, un personaje oscuro, sin escrúpulos, con fama de mujeriego,
que utilizaba todas las artimañas posibles para conseguir su
propósito. Incluso la Inquisición entrará en escena y prenderá a
su anciano padre, acusado de brujo, y que iba a ser condenado a la
hoguera tras celebrarse un auto de fe.
El
alquimista de Granada nos presenta una
historia lineal y a través de ella conoceremos las peripecias por
las que atraviesa Antonio de Castros, que se quedará prendado de la
belleza de Inés y que hará todo lo posible para acercarse a ella y
conseguir su atención, sin imaginarse la aventura en la que se vería
envuelto.
Irving
nos presenta una novela pausada, en la que nos encontraremos con muy
pocos diálogos y unos personajes perfilados con pocas pinceladas
pero lo suficiente como para conocerlos. Como bien nos adelanta la
sinopsis, parece que en Granada el tiempo se detuvo en la Edad Media
por las escenas que presenciaremos, en donde no faltarán las que
denominamos de capa y espada, y por las costumbres que nos muestra
el autor, y otras que hacen mención a los tópicos de nuestra
geografía.
Biografía:
Nació
en Nueva York, el 30 de abril de 1783. Realizó estudios de Derecho,
pero su vocación se interesaba más por el periodismo y la escritura
que por la abogacía. En 1802 comenzó a escribir artículos en
periódicos de Nueva York. En 1815 se fue a vivir a Liverpool y allí
trabó amistad con importantes hombres de letras: sir Walter Scott y
Thomas Moore, entre otros. Escribió algunos ensayos y relatos, bajo
el seudónimo de Geoffrey Crayon, reunidos en el Libro
de Apuntes
(1820). Dos de sus relatos: Rip
van Winkle
y Sleepy
Hollow,
ambientados también en los días en que Nueva York era colonia
holandesa, se han convertido en clásicos de la literatura
estadounidense. En Madrid perteneció al cuerpo diplomático de su
país. Durante este período y después de volver a Inghlaterra,
esxribió varias obras históricas, de las cuales la más famosa es
Historia de la vida y viajes de Cristóbal Colón. De esta época es
también Cuentos de la Alhambra, una serie de apuntes y relatos
inspirados en su estancia, en 1829, en Granada. Nuevamente en Estados
Unidos en 1846, regresó a Sunnyside, su casa de campo, y allí
falleció el 28 de noviembre de 1859.
Nota: datos técnicos, sinopsis y biografía del autor tomados de la web de la editorial. Imágenes de Washington Irving y de la Sala de los Abencerrajes, de la Alhambra de Granada, de google imágenes.
Yo no he leído nada de este autor, pero este a pesar de ser corto no me llama mucho y lo dejo pasar. Gracias por tus impresiones.
ResponderEliminarUn beso
Que verdad, Granada parece que se detuvo en la Edad Media... ^^
ResponderEliminarNo me he estrenado con el autor pero tampoco es que me atraiga mucho esta historia. Llevas unas semanas tocando Granada en tus lecturas, ¿eh?
ResponderEliminarUn beso
Tampoco he leído nada de este autor pero con este libro no creo que me anime
ResponderEliminarBesos
Hace años q leí cuentos de la Alambra y la verdad es q me gustaron mucho tal vez porque ese año había visitado Granada y tenia fresca la visita a la Alambra. Besinos.
ResponderEliminarNO he leído nada de este autor y la verdad es que no me importaría nada iniciarme con este libro :)
ResponderEliminarBs.
Me gusta muchísimo Whashington Irving, sobre todo por "La leyenda de Sleepy Hollow" pero es cierto que en el campo de la novela gótica y de terror su "El estudiante de Salamanca" es todo un referente. Se agradece muchísimo las ediciones de este siglo con buenas traducciones. Bss
ResponderEliminarA este le tengo muchas ganas, por el autor y por la historia en sí
ResponderEliminarun beesazo
Mira, no he leído nada del autor pero por Sevilla hay una ruta denominada de Washington Irving que conduce hasta Granada y cada vez que veo un cartel me entran ganas de probar al autor. Besos.
ResponderEliminarTampoco he leído nada suyo pero seguro que esta novela me gustaría
ResponderEliminarBesos
Pues llevo tiempo queriendo leer al autor y este tiene todas las papeletas =)
ResponderEliminarBesotes
En esta ocasión no me atrae el libro.
ResponderEliminarEsta novela de Irving no la conocía. Me hace gracia que transcurra en España. Me la llevo apuntada.
ResponderEliminarUn beso.
A mi me encantó Cuentos de la Alhambra, pero lo leí muy joven. No sé qué me parecería ahora. Recuerdo especialmente la leyenda de las dos discretas estatuas.
ResponderEliminarNo me llama la atención. Lo dejo pasar.
ResponderEliminarGracias por tu reseña, Besos