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jueves, 16 de febrero de 2023

Reseña Nadie sabrá de mí, de Javier Arias Artacho.


 









Datos técnicos:




Título: Nadie sabrá de mí.

Autor: Javier Arias Artacho.

Editorial: Berenice (Grupo Almuzara).

1ª edición: Febrero/2021.

Encuadernación: Tapa blanda con solapas.

ISBN: 978-84-18578-72-4.

Idioma: Español.

Nº pág.:



Sinopsis:



Durante la posguerra barcelonesa, la vida no es nada fácil para María. Solo el amor parece dar tregua a tanta pobreza, aunque su pasión por el señor Albert sea un imposible que malogrará su inocencia... y condicionará la vida de otra mujer.


¿Qué relación existe entre María e Isabel, que vivirá en el Buenos Aires de 1976, durante la dictadura de Videla? ¿De qué modo está vinculado el secuestro de esta última con el pasado de aquella joven?


Quizá la respuesta se encuentre oculta en la novela que Marisa descubre, junto al cadáver de su amante, en un viejo hotel de Barcelona. ¿Cómo alterará su existencia la lectura de sus páginas?


Tres historias aparentemente inconexas que avanzarán en paralelo hasta confluir en una única trama de pasiones cruzadas, certezas a medias e intereses silenciados que acabarán por salir a la luz. Viajes de ida y vuelta entre el presente y el pasado que nos revelarán la tozudez y la fuerza del destino, así como la belleza de unas vidas imperfectas... Sacudidas, siempre, por el amor.



Opinión Personal:




Nadie sabrá de mí es la segunda novela que leo del escritor Javier Arias Artacho (Barcelona, 1972), en cuya narrativa se percibe el cariño y el conocimiento que tiene sobre la tierra en la que se crió: Argentina. Esta segunda novela refrenda lo que comenté en el primer párrafo de mi reseña sobre La tierra del viento (reseña): está claro que es un buen contador de historias, y sabe cómo dosificar las escenas que atraen la atención del lector, sobre todo por los giros que provocan un impacto con el que incrementar su interés, porque le incita a estar muy pendiente de los episodios que le esperan, sobre todo a medida que se aproxima a las últimas páginas. Sin duda alguna, esta es una de las grandes bazas que atrajeron mi atención sobre la novela que hoy reseño y no dudo en recomendar, porque tal y como se suceden los giros a los que me refiero, en más de una ocasión me pregunté qué más sorpresas me depararía el desarrollo de la trama hasta llegar al desenlace.

(Poblenou-Barcelona)
En este caso, el escritor barcelonés afincado en Carcaixent (Valencia), planifica y desarrolla una trama compleja a lo largo de tres líneas temporales, que parecen no tener nada en común. Sin embargo, tal y como las relatan las dos voces narrativas, tuve la sensación de que confluirían de una forma u otra. La pericia del autor provocó que, en un principio, creyera que tenía una clara idea inicial sobre el nexo que utiliza para unir las tres líneas temporales. Pero, a medida que avanzaba el desarrollo de la trama, su relato me dio a entender que me estaban ocultando alguna información con la que no contaba, lo que origina un mayor interés por lo que sucede a lo largo de los capítulos, e incluso por cómo se desarrolla el desenlace de la trama.

La trama de Nadie sabrá de mí se reparte en tres líneas temporales que narran la historia de tres mujeres, María, Isabel y Marisa, en un marco espacio temporal que se desarrolla entre Barcelona y Argentina. La primera línea temporal se ambienta durante la postguerra española, en la década de los años 40 del siglo pasado, la segunda en febrero de 1977 durante la dictadura de Videla en Argentina, y la tercera en Barcelona, en el año 2010. Tres líneas temporales que se alternan a lo largo de 59 capítulos cortos, en los que el autor utiliza la técnica metaliteraria en la primera de ellas, con cameo incluido, por lo que el lector se encontrará con dos novelas en una. Tres líneas temporales que confluyen en un desenlace que, sin duda, supone un gran broche para Nadie sabrá de mí, por el impacto que provoca en el lector, tanto por lo que Marisa descubre en una novela que encuentra junto al cadáver de su amante, en un viejo hotel de Barcelona, como por el contenido de la trama de esa obra, que atrae mucho su atención y levanta en ella algunas sospechas. 

En lo que se refiere al contenido de las tres líneas temporales que conforman Nadie sabrá de mí, puede que sea la que se desarrolla en la década de los años 40 del siglo XX la que menos interés despierte en algunos lectores. Sin embargo, en mi caso sucede todo lo contrario, porque la historia que cuenta María me resultó muy atractiva, tanto por las descripciones que ofrece sobre Barcelona, ciudad muy devastada durante la Guerra Civil Española por los bombardeos de la aviación italiana, como por el interés que suscitan los personajes que transitan por las páginas de esta subtrama. Unos personajes que saben qué lugar ocupan según los estamentos sociales a los que pertenecen, y entre los que se refleja una gran diferencia abismal, sobre todo si los miembros de la alta sociedad son afectos al régimen franquista; aunque, en este caso, son respetuosos con el personal que trabaja a su servicio. Personajes que tienen un carácter complejo, como el de María, porque cree que el amor acaba de llamar a su puerta. Un amor imposible que le lleva a tomar una decisión drástica y definitiva, sobre todo tras el temor que siente ante las fuertes broncas que recibe de Carlos Villader, su marido, originadas por las habladurías que se vierten contra su mujer. En la segunda línea temporal, el lector estará muy pendiente de la relación que mantiene el secuestrador —el coronel Jorge Azcona— con la secuestrada, Isabel, esposa de un guerrillero al que buscan los militares. Una línea temporal que, no tiene desperdicio, por los diferentes episodios que protagonizan ambos personajes, y porque uno se pregunta si el militar cumplirá finalmente su obligación, una vez que no obtiene la respuesta requerida de la capturada, dada la ambigüedad que suscita entre ambos el encierro. Un encierro en el que las amenazas, las situaciones tensas y varias situaciones desconcertantes están muy presentes. En la tercera línea temporal, destaca la figura de Marisa Boix, que vive en Cardedeu con su marido Antoni. Tras la lectura de las páginas de la novela a la que me refiero en el párrafo anterior, decide realizar unas investigaciones con las que pretende aclarar las dudas que se acumulan en su interior sobre el pasado que en ella se relata, y en la que se encuentra con un personaje que atrae mucho su atención. Sin embargo, se siente desconcertada por las respuestas que le ofrece el autor, tras pedirle una cita para conversar con él sobre la trama de la novela, después de asistir a la presentación de la obra en Barcelona.

(Carrer de València-Barcelona)
Javier Arias Artacho describe a través de las dos voces narrativas una ambientación que incita al lector a imaginarse cómo son los espacios por los que transitan los personajes. Está claro que cuidó con celo las descripciones espacio temporales de las tres historias que conforman la trama de esta novela. Pese a lo que acabo de comentar, el lector se encontrará con descripciones escuetas, salvo si se refieren a espacios cerrados, porque lo que sucede en ellos consigue causar el efecto deseado, sobre todo en los crudos y difíciles años de la postguerra española, o en los que tienen lugar en Argentina en 1977 durante la dictadura del general Videla. En la postguerra se refleja con detalle cómo se van agrandando las diferencias entre las zonas de la ciudad condal en la que residen las clases sociales adineradas, como sucede en el Carrer de València, en donde está la residencia de los Girbés, para la que trabaja María, o la miseria que se percibe en el Poblenou, en donde está la humilde casa en la que vive este personaje con su tía Carmen. Un Poblenou que tiene que subsistir malamente con lo poco que les ofrecen las cartillas de racionamiento, o si tienen la suerte de recibir algunos productos de los familiares o amigos que se dedican al estraperlo, con el que lucrarse a costa de quienes pueden pagar los precios desorbitados que se piden por los productos que se comercian en el mercado negro. Me gustó mucho el retrato que ofrece la voz narrativa sobre las localizaciones que describe de Argentina, sobre todo en las que ofrece algunos detalles, por lo que se percibe el conocimiento que tiene el autor sobre el país en el que se crió.

Al igual que sucede en La tierra del viento, el desarrollo de la trama de Nadie sabrá de mí es de lectura amena y tiene un ritmo ágil, en el que también influye la dosificación que utiliza el autor para que la información trascendental que ofrecen las dos vo es narrativas surta el efecto deseado. El lector se encontrará con tres historias que en un principio parecen no guardar conexión entre ellas. Unas historias en las que se percibe el trabajo minucioso que realiza Javier Arias Artacho para que encajen las piezas que conforman un entramado complejo una vez que se aproxima el desenlace. Pese a que Nadie sabrá de mí es una novela de 272 páginas, por ella transitan unos personajes bien perfilados, que parecen cobrar vida propia, y que son un fiel reflejo de la época que les toca vivir. Sin duda alguna, el último párrafo de la sinopsis refleja lo que encontrará las tres historias que parecen no tener nada en común, pero en las que al lector le aguardan unos giros muy interesantes, sobre todo porque no cuenta con el efecto que provocan algunos de ellos.




Biografía:



Javier Arias Artacho nació en 1972 en Barcelona, aunque creció en Argentina. Es licenciado en Filología Hispánica, Diplomado en Ciencias Religiosas y Máster en Bioética. Dedica su vida a la docencia en Secundaria y Bachillerato y cada novela es un milagro que le concede la literatura y su familia. Está casado, tiene tres hijas y reside en Valencia. Su trayectoria como escritor le ha permitido alcanzar el éxito de crítica y lectores, así como el reconocimiento de sus novelas juveniles en el ámbito de la educación. Sus trabajos más conocidos son Eitana, la esclava judía, El general maldito y La tierra del viento, pero también Argentina, un sueño extinguido, La sombra de Masada, Náufragos o No cierres los ojos. Su página web es www.javierariasartacho.es


Nota: Datos técnicos, sinopsis y biografía del autor, tomados de la web del Grupo Almuzara. Fotografía del autor tomada de la web de Levante EMV. Imagen de Poblenou, en Barcelona, tomada de la web del Arxiu Historic de Poblenou. Imagen del Carrer de València tomada de Viquipèdia. 




6 comentarios:

  1. Muy interesante esta novela, porque Argentina a mi me supone un plus, y por visitar mi ciudad en la posguerra con barrios tan diferenciados como el Eixample y Poblenou. Me quedo con las ganas de saber cómo ensambla esas tres historias y eso que has dicho de "dos novelas en una". Se nota que has disfrutado con la lectura. Apertas.

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  2. Hola Paco, esta novela tiene varios Ingredientes que me llaman la atención : las tres líneas temporales, recurso que me suele gustar mucho, los personajes de las tres mujeres y desde luego la ambientación en Barcelona y Argentina. Aún no me he estrenado con el autor y esta novela puede ser la indicada para hacerlo. Besos.

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  3. Como se nota que has disfrutado con la lectura. Me llama mucho, por sus historias, sus personajes, su ambientación. Tomo buena nota que no la conocía.
    Besotes!!!

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  4. Creo que estaría en el grupo de los que les gusta menos la historia de los 40. Las historias de posguerra me traen recuerdos de gente que hace tiempo que no está y siempre me provocan nostalgia. La parte Argentina com Videla de por medio da un poco de respeto, que ya sabemos cómo se las gastaban. Lo que más me gusta es que se vaya armando el puzle y las historias luego encajen todas perfectamente. Le echaré un vistazo.
    Besos

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  5. El contexto me chifla... Las vidas que tuvieron en aquellos años, antes, durante, después de las grandes guerras de este mundo siempre son dignas de ser contadas, aunque sea todo ficticio o no, pero reflejan una forma de vivir. Y luego está esa ambientación, y las relaciones personales. Creo que este libro me podría gustar mucho. Besos

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  6. Veo que lo has disfrutado, a mí me lo prestó una vecina a la que le había gustado mucho y yo no pude con él, abandoné, no sé si es que no era el momento adecuado, solo que se me hizo muy cuesta arriba. Cosas de lectores. Besos

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