Comenzamos la penúltima semana de este mes de enero. En lo que a lecturas se refiere, estoy con la novela de Jon Arretxe, Piel de topo: una nueva entrega que protagoniza el singular detective-vidente Touré.
Sinopsis:
La
Pequeña África de San Francisco vuelve a ser el escenario de las
andanzas de nuestro detective-vidente. De vuelta a Bilbao, Touré
recuperará sus relaciones anteriores (Sa Kené, Osmán, Aliou,
Xihab) con la finalidad de recomponer su maltrecha existencia. Una
dura realidad, la de los sin papeles en el Paraíso soñado, que
obliga a una vida clandestina en un mísero y asfixiante escenario
controlado por las autoridades. No hay posibilidad de escape, a la
xenofobia y a la escasez de medios para asegurar su sustento se suma
la coacción, la exigencia a colaborar con el adversario, la policía,
delatando a sus cercanos, a aquellos que se encuentran en su misma
situación. Touré y sus compañeros tratarán por todos los medios
de liberarse de esta red de chantaje y extorsión en la que están
atrapados.La descripción detallada del submundo de la emigración,
del monótono día a día de los “inexistentes”, de su realidad,
es en lo que Arretxe persevera con un lenguaje dinámico y descarnado (232 pág., rústrica con solapas).
Después le toca el turno a la nueva novela de Teo Palacios, La boca del diablo. En esta ocasión nos ofrece una trama que comienza tras el desastre de la Armada Invencible:
Sinopsis:
Tras
el desastre de la Gran Armada, Baltasar de Zúñiga consigue arribar
a las costas españolas, acompañado por su escolta y compañero Juan
Lobo. Su misión: informar al rey. Tras hacerlo podrán descansar.
Sin embargo, ya de vuelta a casa, Zuñiga tiene una nueva misión
para Juan: deberá acompañar y proteger a dos inquisidores a los que
se les ha encargado investigar la desaparición de varias muchachas
en un pueblo de Toledo.
Sin
embargo, la situación en el pueblo será mucho más compleja de lo
que pensaban pues rápidamente descubrirán que en la villa se ha
instalado un clima de terror y que los vecinos declaran haber visto a
brujas y demonios entre sus calles. Ahora será necesario investigar
si realmente Satán ha descendido de los cielos para castigar una vez
más a los hombres o si lo que está ocurriendo en la villa nada
tiene que ver con los poderes demoníacos (286 pág., tapa dura con sobrecubierta y lazo de punto de lectura).
Y, por último, quienes estén interesados en participar en la tercera edición del reto literario organizado en este blog, Nos gustan los clásicos, tienen de plazo hasta el 28 de febrero (enlace reto)
Disfruta de sus lecturas, ya nos contarás.
ResponderEliminarBesos
Seguro que lo pasas bien con el de Arretxe. Con Teo Palacios no me he estrenado.
ResponderEliminarBesos
No tengo muchas referencias de estos dos libros pero espero que los disfrutes.
ResponderEliminarBesos
La de Arretxe es canela fina, y la otra tiene una pinta que quita el sentido ¡Vaya semana chula que te espera! jejeje.
ResponderEliminarDisfruta lecturas y semana, carinyet.
Besitos.
Ambas lecturas pintan muy bien. Que las disfrutes
ResponderEliminarLa de Jon Arretxe me atrae, pero la otra no demasiado. Esa época no es lo que más me gusta y las historias de brujas y demonios me disuaden bastante.
ResponderEliminarEspero a ver qué nos cuentas.
Un beso.
Disfruta de las lecturas y feliz semana!!!
ResponderEliminarBesotes!!!
El de Teo Palacios, por argumento, me parece bastante interesante. A ver qué te parece. Disfruta mucho de las lecturas y muy feliz semana :)
ResponderEliminar¡Besote!
No conozco ninguno, pero espero que los disfrutes mucho :)
ResponderEliminar¡Feliz semana!