Sumergido en...(49)

Comenzamos una nueva semana, con las fiestas navideñas llamando a la puerta y, aunque en esta época el ritmo lector suele bajar, siempre habrá un huequecillo para tener a nuestro lado a nuestro fiel amigo, el libro. 

En cuanto a mi lectura actual, estoy en la última parte de Volver a Canfranc, de Rosario Raro, novela de lectura pausada,  narrativa exquisita y unos personajes inolvidables, que dejan poso en en lector. Magnífica historia y que me pone en dudas en cuanto a la que calificaría como mi mejor lectura del año, ya que hasta la fecha lo tenía muy claro (Interregno, de José Vicente Pascual). Creo, realmente, que debería ser llevada a la gran pantalla.

Luego le toca el turno a un clásico, El alquimista de Granada, de Washington Irving, que tenía ganas de leer y que me vale para intentar completar el Reto de la A a la Z.

Sinopsis: 

Cuando el joven estudiante Antonio de Castros decidió desentrañar el misterio que rodeaba al extraño erudito con el que se topó en la biblioteca de la universidad de Granada, poco podía imaginarse la aventura en la que se iba a ver envuelto. Las ruinas de la Granada nazarí sirven de decorado para un historia que se desarrolla en una España donde el tiempo parece haberse detenido en la Edad Media. Los secretos de la alquimia y la fascinante búsqueda de la piedra filosofal; las intrigas del temible libertino don Ambrosio de Loxa; el amor por la bella Inés y lo lóbregos calabozos de la Inquisición son los ejes centrales de este relato, con el que Washington Irving se situó en la estela de la novela gótica y inició su peculiar recreación literaria de una ciudad a la que contribuyó a dar fama universal.  (128 pág., tapa blanda con solapas)

Y ya empiezan a verse la convocatoria de nuevas ediciones de retos literarios y de otros de nueva creación. Ya iré publicando las entradas correspondientes en las que anunciaré en cuáles tomo parte. Espero hacerlo en aquellos en los que haya una mayor compatibilidad posible. 

Y la frase sobre la lectura de esta semana: 

"Amar la lectura es trocar horas de hastío por horas de inefable y deliciosa compañía".

J. F. Kennedy (Presidende de EE.UU, 1917-1963)