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viernes, 9 de septiembre de 2022

Las herederas de la Singer, de Ana Lena Rivera.

 











Datos técnicos:



 

 

Título: Las herederas de la Singer.

Autora: Ana Lena Rivera.

Editorial: Grijalbo (Penguin Random House).

1ª edición: febrero/2022.

Encuadernación: Tapa blanda con solapas.

ISBN: 978-84-253-6097-8.

Idioma: Español.

Nº pág.: 512.




Sinopsis:




Las herederas de la Singer cuenta la conmovedora historia de las mujeres de una familia ligadas a una máquina de coser que custodió un secreto durante cuatro generaciones.

El día que la joven Aurora se vio obligada a trabajar en la mina tras el accidente de su padre, se juró a sí misma hacer lo que fuera necesario para salir de aquel infierno.

Un matrimonio sin amor y la máquina de coser Singer de segunda mano que recibe como regalo de bodas le proporcionarán una nueva forma de salir adelante, hasta que un terrible suceso convierte la Singer en la única prueba de la amenaza que la perseguirá toda la vida.

Muchos años después, la complicidad que teje con su biznieta Alba desvelará el secreto que ha planeado sobre las mujeres de su familia.





Opinión Personal:





Me gustan mucho las novelas cuyas tramas giran en torno a una saga familiar porque, a través de varias generaciones de una sola familia, sigo con interés la historia del país y de la época que les toca vivir. Sagas familiares que ven cómo están influenciadas por los episodios históricos que, de una forma u otra, influyen en su devenir, e incluso en las relaciones entre los miembros de la familia que la conforman. Unas relaciones que se ven marcadas, sobre todo, si hay conflictos bélicos de por medio o episodios en los que salen a la luz secretos familiares, o bien se sospecha sobre alguno que no quieren que se desvele porque puede levantar ampollas o poner en peligro a alguno de los miembros de esta saga: en ambos casos suelen provocar un cambio en la armonía que los une. Sin embargo, en ocasiones, ese cambio ayuda a fortalecer el débil vínculo que empaña el trato entre sus miembros. En mi modesta opinión, entiendo que lo que acabo de comentar se percibe a lo largo de los 22 capítulos y el epílogo en los que se estructura la nueva novela de la escritora asturiana afincada en Madrid, Ana Lena Rivera, Las herederas de la Singer.

(Pozo Espinos-Turón-Asturias)
Disfruté con la trama de Las herederas de la Singer. Creo que uno de los grandes  aciertos de la autora es elegir la estructura de saltos temporales, porque de esta forma el lector recibe información de los cuatro personajes femeninos que llevan el peso de la trama. Sin duda alguna, es un gran esfuerzo que tuvo que hacer a la hora de utilizar este recurso literario, porque lo más habitual en las sagas familiares suele ser el empleo de dos o tres líneas temporales que se van alternando, hasta que confluyen en un momento dado, a medida que se aproxima el desenlace. Una estructura que, aunque parece inconexa, entiendo que hay una cierta relación en su desarrollo, porque cada capítulo comienza en primera persona con el relato de Ana, y después se intercalan episodios de las tres generaciones de mujeres de su familia que la preceden. Con el paso de los capítulos se percibe la repercusión que tienen los problemas que afectan a la mujer, y el interés que muestran quienes pueden verse afectadas por situaciones similares, y cómo se sienten apoyadas por quienes son conscientes de que la sociedad tiene que ser más justa, sin tener en cuenta la diferencia de géneros.

Me gustó mucho la planificación y desarrollo que le confirió Ana Lena Rivera a Las herederas de la Singer. En todo momento tuve la sensación de que una voz en off me relataba la crónica novelada de casi un siglo de la historia reciente de nuestro país. Resalto lo que acabo de comentar porque la voz narrativa intercala con naturalidad hechos históricos nacionales e internacionales que tuvieron mucha repercusión en la opinión pública del momento. En este sentido, es también un gran acierto el que relacione estos hechos históricos con los episodios que en esos momentos protagonizan alguna de las mujeres de esta saga familiar, porque me decía que era un incentivo para estar muy pendiente de las situaciones que viven, y el cierto paralelismo que tienen con los episodios históricos que acabo de mencionar. Sin duda alguna, atrajeron mucho mi atención los relacionados con la cuenca minera asturiana, tanto en la Guerra Civil Española como en la Postguerra y la Revolución Minera de 1934, en Asturias. Otro tanto sucede con el papel de la mujer en las minas, pese a que era un trabajo no reconocido y al escaso salario que percibían, como se podrá comprobar en algunos capítulos. Estoy seguro de que la gran mayoría de esas efemérides que rememora la voz narrativa les resultarán muy conocidas a los lectores, e incluso diría que algunos de ellos les harán sonreír, porque con ellos nos acordamos de una época de nuestra vida que se acostumbra a echar en falta, por lo que significa para el desarrollo del ser humano.

(Calle Uría-Oviedo)
A lo largo de los capítulos, el lector se encontrará con una trama en la que el mayor peso lo llevan los personajes femeninos. 
Unos personajes entre los que sobresale la fuerza de las cuatro mujeres que conforman la saga familiar protagonista de esta novela, e incluso me decía que alguna de ellas está adelantada a su época, por cómo percibe el mundo que le rodea y es muy consciente del limitado papel que desempeña la mujer en la sociedad de la época. No sólo destaco las mujeres que protagonizan esta saga familiar, sino también las secundarias que las escoltan y que atrajeron mucho la atención, por la relación que guardan, en un sentido u otro, con las mujeres de una saga que inicia Aurora Cangas. Llama la atención el hecho de que los nombres de las mujeres de esta saga familiar empiecen por la letra A: Aurora, Águeda, Ana y Alba, aunque no me olvido del papel, diría que casi testimonial, Estoy seguro de que a la gran mayoría de los lectores les atrajo Aurora, un personaje con el que se empatiza apenas se le conoce, porque su forma de ser y actuar no pasa desapercibida, al igual que las vicisitudes que vivió, alguna de las cuales le hicieron tomar decisiones que les costó trabajo entender a la familia y vecinos de Turón. Es de las que no tienen pelos en la lengua cuando hablan ni a la hora de encararse con quien crea que merece un escarmiento, si bien también es muy amiga de las escasas amistades que tiene, caso de Ramona o Herminia, a quienes no duda en ayudarles si precisan su reclamo, o le corresponden cuando lo necesita. Sin embargo, la relación que mantiene con su familia es muy diferente, quizás sobre todo por el fuerte carácter que tiene. En este sentido, sonreí en más de una ocasión en algunos diálogos que mantiene con su biznieta Alba, aunque ambas son muy diferentes, pero se complementan a la perfección: son conscientes de que saben cómo reacciona cada una de ellas en situaciones en las que, sobre todo, hay que mostrar el carácter que tienen. Muy diferente es su hija Águeda, aunque no por eso me pasó desapercibida, sobre todo por la relación que mantiene con su marido Jesús y con Florita, la hija de Herminia. Supongo que quienes leímos esta novela que hoy reseño, y sin lugar a dudas, recomiendo, el personaje con el que se tarda más en empatizar es el de Ana, pero con el paso de los capítulos se comprenden sus reacciones, sobre todo desde que quiere llevar una vida muy diferente a la de su madre y su abuela, al querer ir a estudiar Arquitectura a Madrid, y después formar una familia con el hijo de uno de los empresarios que más influencia y poder tiene en la capital.

En relación con lo que acabo de comentar en el párrafo anterior, en mi modesta opinión entiendo que la autora ofrece una galería de personajes masculinos que representan el papel que desempeña el hombre a lo largo del casi un siglo que dura el desarrollo de la trama. Por eso, pese la gran importancia de la mujer en Las herederas de la Singer, hay personajes masculinos que no dejan indiferentes, sobre todo por la relación que mantienen con las cuatro protagonistas, y otros personajes femeninos secundarios, en los que se percibe vínculo de maltrato, sumisión o extramatrimonial. En este sentido, en la novela queda reflejado el carácter de los mineros de la cuenca asturiana, pero también se describe la labor que desempeña el hombre durante el franquismo, pese al puritanismo que se mostraba de puertas para afuera. Sin embargo, en el interior de determinados locales de ocio, e incluso en domicilios particulares, el desmadre estaba a la orden del día y los hombres mostraban su instinto más bajo, como se podrá comprobar en algunos capítulos, en los que no faltan quienes le ponen el piso de turno a la querida. Otro tanto sucede con el papel de los homosexuales, principalmente por la fuerte represión que sufrieron durante la dictadura. Personajes como Frutos, el marido de Olvido; Ceferino, el capataz del pozo Espinos, su hijo Cefe, o Jesús, el marido de Águeda, son un fiel reflejo de lo que comento sobre el papel del hombre en esta novela.

(Urbanización La Finca-Pozuelo de Alarcón-Madrid)
Disfruté mucho con la primera novela que leo de Ana Lena Rivera,Las herederas de la Singer. Una máquina de coser que sirvió para que los miembros de las cuatro generaciones de esta familia ganaran un dinero que les valía para complementar el escaso sueldo que se cobraba en la cuenca minera asturiana. Pese a que fueron Aurora y su hija Águeda quienes se sirvieron más de esta herramienta de trabajo, puede decirse que es un personaje más de la trama, porque estará muy presente a lo largo de su desarrollo. Un episodio que tiene lugar durante la Guerra Civil Española es el detonante de un secreto que guarda y que la bisabuela Aurora no quiere revelar, porque teme las consecuencias que pueda acarrearle si se descubre. Esto origina una cierta intriga, sobre todo a medida que el desenlace está próximo, lo que dio lugar a que me preguntara en más de una ocasión si la bisabuela sería capaz de desvelarlo. También teme que lo descubran de una forma u otra, sobre todo desde que recibe una llamada telefónica inesperada. Pese a que en el cuarto párrafo de esta reseña comento que el lector se encuentra con una historia en la que los personajes son el activo principal, la voz narrativa ofrece unas descripciones muy atractivas sobre las localizaciones por las que transitan. Si bien la cuenca minera asturiana es el marco geográfico principal de la trama, el lector se trasladará también a Mieres, Gijón, Oviedo, Madrid, Sevilla, El Palmar de Troya, y París.

Me sentí muy cómodo durante la lectura de Las herederas de la Singer, porque el estilo narrativo de la autora me resultó cálido y muy cercano. Quizás influenciado por los continuos saltos temporales, el ritmo de lectura se me hizo muy fluido, ayudado también por el predominio dede los diálogos frente a la narración. Unos diálogos dinámicos y entretenidos, y que resultan muy atractivos cuando se ofrece información a través de ellos o se ponen de manifiesto los diferentes estados de ánimo de los personajes, que originan reflexiones sobre las situaciones que les preocupan, o bien saltan chispas en las conversaciones que mantienen durante los episodios más álgidos. Ana Lena Rivera construye unos personajes muy cercanos, y diría que muy representativos de la sociedad española de los casi cien años que abarca el desarrollo de la trama. Una trama en la que el lector se encontrará también con giros argumentales que atraen su atención hasta el desenlace, bien cerrado y diría que emotivo.

 

 

Biografía:





Soy asturiana de nacimiento y de corazón, pero llevo muchos años viviendo en Madrid, ciudad que me adoptó como una hija y en la que me he construido mi hogar. A veces hecho de menos el olor a sal y ver las olas romper contra las rocas. Estudié Derecho y Administración y Dirección de Empresas, y, aunque soñaba con ser escritora, criminóloga o comisaria de policía, tuve una carrera profesional emocionante dentro del mundo empresarial multinacional. Según cuentan en la familia, cuando era pequeña leía libros de forma compulsiva; la lectura fue mi gran compañía en la niñez, y estoy convencida de que, en buena parte, hoy soy quien soy por las innumerables horas que pasé rodeada de libros. Empecé a escribir con la ilusión de que mis novelas ofrecieran al lector la compañía, los referentes y el refugio que los libros me proporcionaron a mí. Cuando me quedé embarazada de mi hijo Álex, la prescripción médica de reposo me dio la oportunidad de escribir: descubrí mi pasión y empezó esta aventura. Por suerte, en la Escuela de Escritores, en la que tengo el privilegio de enseñar, tuve grandes profesores.

Las herederas de la Singer inaugura una nueva etapa después de las tres novelas dedicadas a la investigadora Gracia San Sebastián: Lo que callan los muertos (2019, Premio Torrente Ballester 2017), Un asesino en tu sombra (2020) y Los muertos no saben nadar (2021).

 

Nota:  Datos técnicos, sinopsis, biografía y fotografía de Ana Lena Rivera, tomada de la web de Penguinlibros. Imagen del Pozo Espinos, en Turón, Asturias, tomada de la web Patrimonio Industrial Asturias. Imagen de la Calle Uría, en Oviedo,  tomada de la web de Pinterest. Imagen de la Urbanización La Finca tomada de la web de La Información.

 



9 comentarios:

  1. Hola Francisco, me gusta lo que cuentas. Es un libro que seguro que me gustará. Como recuerdo yo esas máquinas de coser en el comedor de casa. Felicidades por la reseña, muy cuidada, como siempre. Besos

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  2. Una gran reseña para una gran novela. Disfruté muchísimo con esta lectura. Es de esos libros que no me importaría releer.
    Besotes!!!

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  3. Hola Paco, estupenda reseña, ya la tengo apuntadisima. En casa de mis tías aun esta la Singer de mi abuela y sigue en uso. Besos.

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  4. La estoy y me encanta😀
    También tengo una Singer de mi madre y mi abuela💕

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  5. Hola, tengo muchas ganas de leerla. Seguro que me gustará. Besos

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  6. A ver si me estreno con esta autora que sus libros me llaman mucho. Besos

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  7. Muy buena y completa reseña. Has reflejado muy bien las sensaciones que transmite, las mujeres son las protagonistas y en distintas épocas. Es difícil elegir alguna como favorita, porque las que no tienen fuerte carácter también tienen tarea. Me gustó mucho, coincidimos plenamente. Besos

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  8. Es cierto que lo de los saltos temporales y yo no nos llevamos demasiado bien, sin embargo esta parece una saga familiar que no nos debemos perder. Me llama la atención que se sitúe en la Asturias minera y la época a la que nos transporta. He leído muy buenas críticas de esta novela, y tú reseña invita a su lectura. Abrazos

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  9. Que maravilla de reseña me ha gustado mucho, gracias por compartirla.

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