Perro ladrando a su amo, de Javier Sáchez.

Datos técnicos:

Título: Perro ladrando a su amo.

Autor: Javier Sáchez.

Editorial: Eolas Ediciones.

1ª edición: 6/octubre/2018.

Encuadernación: Rústica con solapas.

Idioma: Español.

ISBN: 978-84-17315-34-4.

Nº páginas: 206.

Sinopsis:

Una empresa necrófaga hambrienta de inmuebles ajenos. Una anciana indefensa que recoge lo que la ciudad detesta. Un joven ultra de ojos violentos que aborrece lo que la sociedad representa. ¿Puede al final el odio transmutarse en ternura? ¿Pueden las zarpas alguna vez acariciar? Novela urbana que aborda temas de actualidad como la marginación, la violencia de género, la soledad de la vejez y el desprecio de los jóvenes hacia las personas mayores, Perro ladrando a su amo es, a juicio del jurado del VII Premio de Novela Corta Fundación MonteLeón, «una construcción poliédrica con una muy acertada presentación de unos personajes muy bien integrados en la trama, y en un hábitat urbano donde todos confluyen».

Opinión Personal:

En noviembre de 2017 leí y reseñé en este blog Manual de pérdidas  (reseña), que fue para mi la mejor lectura de ese año, sin lugar a dudas. Nada más conocer que Javier Sáchez había publicado su nueva novela, Perro ladrando a su amo, me dije que tenía que leerla sí o sí, sobre todo para que me confirmara la calidad narrativa de este escritor campillejo. Y desde luego que refrendó la calidad mostrada en Manual de pérdidas, con una prosa exquisita y muy directa, y con el añadido de que su nueva novela fue galardonada con el Premio de Novela Corta Fundación MonteLeón. Sin duda alguna, este merecido galardón literario es un gran aliciente para que Javier Sáchez siga deleitando a sus incondicionales con nuevas publicaciones, de las que estaremos muy pendientes, porque es un autor a tener muy en cuenta.

Javier Sáchez aborda en sus novelas temas muy actuales, tratados con mucho respeto y a través de unos personajes muy humanos, que se desenvuelven en unos escenarios y situaciones cargadas de realismo. Si en Manual de pérdidas el alzhéimer toca la fibra del lector, en Perro ladrando a su amo muestra la desgarradora situación que viven los personajes que tienen que enfrentarse ante la cruda realidad que les rodea, y en la que se sienten atrapados. Esas circunstancias que les tocó vivir les hacen ver que es muy difícil salir de esa burbuja que les aprisiona, tal y como le sucede a la figura que acapara nuestra atención en la portada de esta novela.

Supongo que la mayoría de quienes leyeron Perro ladrando a su amo tendrían la misma sensación que me provocó su lectura en un primer momento, porque tal y como se sucedían los episodios de los primeros capítulos me preguntaba qué relación podía haber entre personajes tan dispares. Aunque a medida que se desarrollaba la trama esa duda seguía presente, algo me decía que Javier Sáchez había planteado un argumento en el que nada sucedía por casualidad, sino que invitaba al lector a adivinar el nexo que relacionaba a quienes se movían en ese ambiente urbano. Las peculiares características que definían el día a día de los personajes que vivían en el extrarradio de la gran ciudad, daban a entender que en algún momento dado de la novela el lector se enfrentaría a una historia de vidas cruzadas, que fue tomando cuerpo a medida que me aproximaba al desenlace. Un desenlace duro, sobrecogedor, y en el que el lector se encuentra con un giro brutal, inesperado pero que, como digo en estos casos, entraba dentro de lo posible. Y es que tal y como se desarrollaban las escenas que desembocan en ese final brutal quedan grabadas en la retina del lector, porque se hacen inolvidables, no solo por el impacto que producen, sino porque son de las que remueven conciencias.

Al igual que ocurría con Manual de pérdidas, Perro ladrando a su amo es una novela equilibrada, en donde la marginación, la violencia de género, la soledad de la vejez y el desprecio que sienten los jóvenes hacia las personas mayores están muy presentes, tal y como lo adelanta la sinopsis. Aunque el lector se encontrará también con episodios donde las relaciones familiares cobran protagonismo, al igual que la denuncia social, porque Javier Sáchez aborda en esta novela un tema que, por desgracia, están muy vigentes hoy día, como es el desahucio.

Esa temática que menciono en el párrafo anterior está reflejada a través de personajes como Casilda, que atrae la atención del lector desde el primer capítulo. En él se enfrenta a un episodio que sucedía día tras día, porque sentía cómo la tragedia se presenta en su vida desde el momento en el que sentía el sonido de la cerradura, que anuncia el regreso de marido ebrio. Junto con Casilda tiene protagonismo Eduardo, un estudiante universitario que formaba parte de una tribu urbana de skinhead, los boneheads, que se reúnen en un garito del barrio, y no dudan en enfrentarse a otras tribus urbanas a las que propinan bestiales palizas, por rayar el coche de uno de sus miembros, o molestar a Casilda en más de una ocasión. Pero el lector también se familiarizará con personajes como Fermín, apodado el Sapo, Freddy y su inseparable rottweiler, o el periodista Armando, que trabaja en la emisora Extra Radio, y no duda en presentarse en los lugares en que las noticias que tienen lugar pueden ayudarle en su labor reivindicativa. Hay que añadir otros personajes con una presencia esporádica, caso de Nieves, la pareja de Eduardo; o Concha, la esposa de Fermín, el Sapo. Los padres de Eduardo, con quienes mantenía una tensa relación, estarán muy pendientes de las escenas conflictivas de su hijo, porque no les gusta el ambiente en el que está metido, y temen que les dé algún disgusto.

Sin duda alguna, los personajes que construye Javier Sáchez son los pilares que sustentan las tramas de sus novelas. Perro ladrando a su amo ofrece al lector unos personajes muy vivos, creíbles y cercanos, lo que ayuda a que nos familiaricemos con ellos a lo largo de los capítulos. Están trazados de tal forma que parecen cobrar vida propia, y muestra a través de ellos lo mejor y lo peor del ser humano. Sin duda alguna, Casilda y Eduardo son un claro ejemplo de lo que acabo de comentar. Casilda se enfrenta a una vida familiar hostil, pero también a un mundo hostil, del que recoge lo que la ciudad detesta, y se enfrenta a un desahucio promovido por una empresa necrófaga hambrienta de inmuebles ajenos. Eduardo es el personaje que sufre una mayor evolución a lo largo de la novela. El lector es testigo del cambio que se produce en este neonazi, desde el momento en el que Casilda se cruza en su camino, y se da cuenta de las injusticias que sufren los más indefensos de su entorno, por lo que no duda en adoptar soluciones de dudosa legalidad, y que pueden poner en peligro incluso su integridad. Esa evolución que se produce en Eduardo afectará a la relación con los miembros de su tribu urbana, en la que el compañerismo, la lealtad y la disciplina hacen que el vínculo entre todos ellos sea muy fuerte, con las consecuencias que puede acarrearles a quienes decidan adoptar decisiones que afecten a la unidad del grupo. Un grupo que trapichea con lo que haga falta para sacarse unos cuartos, ya sea a través de la reventa de entradas de fútbol, o con droga. La droga y la relación de Eduardo con Casilda marcarán su nexo del grupo, a través de una serie de episodios que mantendrán al lector en vilo por conocer cómo afectarán a Eduardo, y el destino que le espera a Casilda desde el momento en el que se lleva a cabo el desahucio.

Perro ladrando a su amo supone la confirmación de Javier Sáchez como un escritor a tener muy en cuenta en el panorama literario nacional. El jurado que le concedió el premio de Novela Corta Fundación MonteLeón dice de ella que «presenta una construcción poliédrica con una muy acertada construcción de unos personajes muy bien integrados en la trama y en un hábitat urbano donde todos confluyen». Su exquisito estilo narrativo, en el que el narrador se dirige al lector sin emplear subterfugio alguno, logra causar el efecto deseado, con una trama en la que se suceden episodios en los que las escenas están cargadas de realismo y denuncia social, y la crudeza de algunas de ellas son descritas sin sensacionalismo alguno.

Biografía:

Javier Sachez nació en Campillo de Llerena (Badajoz) en 1970. Cursó las carreras de Derecho y Trabajo Social y posee el título de especialización en Gestión cultural por la Universidad de Extremadura. Comenzó a escribir en el año 2005. Ha obtenido varios premios y certámenes literarios que le han permitido publicar hasta el momento ocho novelas y tres libros de poesía. Ha colaborado en diversas publicaciones artísticas y literarias. Actualmente reside en la ciudad de Mérida.

Nota: Datos técnicos, sinopsis, biografía del autor y fragmento de la nota del jurado que le concede el Premio de Novela Corta Fundación MonteLeón, tomados de la web de la editorial.  Fotografía del autor, tomada de Babelio.