El rumor de las folías, de Yara Medina

Datos técnicos:

Título: El rumor de las folías

Autora: Yara Medina

Editorial: Ventana al Pasado (Autoeditado Amazon) (enlace)

5ª edición: 30/05/16

Formato: Ebook.

ASIN: B01G5F32X0

Idioma: Castellano

Nº pág.: 412

Precio: 3,88€


Sinopsis:

Una mujer, un viaje, una historia de amor, una isla...en una época en la que el mundo se divide en dos.
La vida de Luisa López cabía en un arcón. Éste guardaba infinidad de recuerdos, sueños truncados y experiencias grabadas a fuego. El día que decidió partir de Gran Tarajal, en los años de la Segunda República, no miró atrás. Luisa estaba decidida a emprender una nueva vida y escapar de un matrimonio de conveniencia impuesto por su propio padre. Dejando la tierra que la vio crecer, se concentró en buscar un oficio al otro lado del atlántico; en Cuba. En el buque, cargado de emigrantes canarios de todas las clases sociales, conoce a la familia Westerling y el objetivo de su viaje. Su futuro quedaría entrelazado a ellos irremediablemente.

Las corrientes ideológicas, los cambios sociales, el papel de la mujer y la crisis económica dibujan el contexto en el que se desarrolla la historia. La narración llevará el espíritu y el sentir canario, plasmando las costumbres, expresiones y formas de vida que marcaron una época; cuyos retazos llegan aún nuestros días.

Opinión Personal:

Descubrí El rumor de las folías gracias a mi participación en el reto literario Serendipia recomienda, en el que los participantes proponen lecturas de novelas que les hayan gustado mucho, pero con la particularidad de que sean originales y se salgan un tanto de nuestras lecturas habituales. Sin duda alguna, El rumor de las folías cumple los requisitos que acabo de comentar; a ello, le añadiría el hecho de que la trama transcurre en un período de nuestra historia poco abordada en literatura, como es la Segunda República, adentrándose también en el primer año de la cruenta guerra civil española. Por eso decidí publicar mi reseña a la vuelta de las fiestas navideñas, porque creo que merece la pena dar a conocer mis impresiones de esta novela, que seguro atraerá la atención de los apasionados por la ficción histórica.

(Playa de Jandía-Fuerteventura)

Otra puntualización que quería hacer sobre esta novela es que, una vez finalizada su lectura, y en mi modesta opinión, creo que tiene rasgos propios de una novela landscape, o novela de paisajes: y es que las circunstancias personales que rodean a la protagonista hacen que decidida emprender una nueva vida y escapar de un matrimonio de conveniencia impuesto por su propio padre, en Gran Tarajal, en la isla de Formentara, a donde ya nunca regresaría. Como adelanta la sinopsis, en el buque, cargado de emigrantes canarios de todas las clases sociales, conoce a la familia Westerling y su futuro quedaría entrelazado a ellos irremediablemente, porque entre Luisa López y Tomás Westerling surgirá un romance que se encontraría con muchas dificultades a superar, porque les tocó vivir en una época en la que la sociedad era la que marcaba las pautas por las que se regían las relaciones de pareja. Y así es cómo el lector acompañará a Luisa López durante su estancia en Cuba, pero también en la isla de Gran Canaria, en donde se desarrollará la mayor parte de la trama. Sin duda alguna, dos parajes exóticos que deleitarán a los lectores, a través de las localizaciones por las que se mueven los personajes.

Aunque el romance tiene un gran peso a lo largo de los capítulos que la conforman, por encima de él hay que destacar el contexto histórico en el que tiene lugar, porque los acontecimientos que se suceden a lo largo de los tres años en los que se desarrolla la trama no solo van a marcar la relación entre los personajes, sino también su evolución como personas. Las circunstancias del momento que les tocará vivir harán que su personalidad madure a marchas forzadas, casi sin ellos darse cuenta. y se conviertan en personas adultas, no pudiendo disfrutar de los divertimentos propios que les correspondería por edad. El lector comprobará a lo largo de los capítulos cuál era el papel que desempeñaba la mujer en aquella época, y quién tomaba las decisiones fundamentales en su vida; aunque, como en el caso de Luisa López, hubo algunas mujeres que lograron plantarle cara a los dictados marcados por la encorsetada sociedad que regía el destino de la mujer.

(Gabinete Literario-Las Palmas)

El contexto histórico en el que se desarrolla la trama está magníficamente reflejado en la novela, en donde el lector comprobará cómo los hechos políticos que se van sucediendo en el país se reflejarán en el devenir de los personajes, en su implicación con los episodios que conducirán irremediablemente a un conflicto fratricida. Pero no sólo la situación política a nivel nacional influirá en su día a día, sino que también afectará a la relación con sus vecinos, los Naranjo, con quienes ya habían tenido algunas disputas relacionadas con los regadíos. Los enfrentamientos entre ambas familias se incrementarán a medida que la guerra civil esté cada vez más cerca. El lector comprobará cómo una y otra familia se posicionará en bandos irreconciliables, y este posicionamiento influirá en las decisiones que adopten los personajes a medida que nos acercamos al desenlace de la novela. Este es, quizás, uno de los alicientes de la novela, porque el lector comprobará cómo una familia que lo tenía todo, como eran los Westerling, hacen todo lo posible para que, quienes dependan de ellos, no pasen las penurias a la que están abocados quienes no pueden hacer frente a las consecuencias de ese sinsentido que estaba asolando el país y segando miles de vidas.

Yara Medina ofrece al lector una magnífica ambientación a lo largo de los capítulos que conforman la novela, fiel reflejo de la ardua labor de documentación realizada para lograr ese efecto, no solo en lo que a acontecimientos históricos se refiere, sino también porque estamos ante una novela con claros rasgos costumbristas: el lector comprobará a través de los personajes que desfilan por sus páginas cómo era la vida de la sociedad canaria en aquella época. Mientras me sumergía en la lectura de El rumor de las folías, me sentí realmente transportado a los años en los que se desarrolla la trama de la novela. En este sentido, me llamó la atención todo lo que ocurría en Cuba, pues comprobé cómo quienes emigraron a esa isla caribeña llevaron consigo también su forma de vida, reflejándose tanto en la construcción de las haciendas en las que residen, como en la conservación de las tradiciones de su tierra. Esto que acabo de comentar lo comprobará el lector en el municipio de Cabaiguán (Cuba), en la provincia de Sancti Spíritus, que será en donde Luisa López empieza su nueva vida. Siempre me pregunto, en algún momento de la lectura, el porqué del título de la novela: y de esa duda me sacará una escena que tiene lugar en el barco que transporta a la isla caribeña, a los tres personajes que más peso tienen en la trama. La música tradicional canaria estará muy presente en la novela. Hay un capítulo en el que el lector se sentirá atrapado por los cruces de coplas que tendrán lugar entre dos de los personajes que guardan estrecha relación con Luisa López, y que dejarán claras cuáles son las intenciones de uno y otro en relación con la protagonista.

(Caldera de Bandama-Gran Canaria)

Yara Medina perfila unos personajes con mucha fuerza, con sus luces y sus sombras, sus aciertos y sus errores. Tomás y Ramón Westerling, y Luisa López se ganarán la atención del lector desde el primer momento. Son tres personajes cuya humanidad calará muy profundamente en el lector, y no dejará indiferente su forma de actuar y responder ante las dificultades que se van encontrando a lo largo de los capítulos. La responsabilidad de Tomás ante lo que para él significaba estar al frente de los negocios de la familia Westerling, y el hecho de anteponer la seguridad de su familia a la suya, aceptando un matrimonio de conveniencia con Rita Galiano; la solidaridad y el apoyo de Ramón hacia los suyos, y hacia quienes prestan servicio a su familia; la rebeldía, arrojo y decisión de Luisa López ante los dictados de la sociedad, que la convierten en una joven que en cierta medida se adelanta a su tiempo. Junto a estos tres personajes, destacaría la figura de doña Eugenia, la matriarca de los Westerling, quizás el personaje por quien el lector sienta más antipatía, aunque también se sorprenderá con alguna de las decisiones que tome, lo que provocará que, finalmente, sintamos hacia ella sentimientos encontrados. Antonia y Lola son otras dos figuras que con el paso de los capítulos prestarán su incondicional apoyo a Luisa en la hacienda de Verde Rama: madre e hija forman parte del servicio de la familia Westerling. Sin embargo, un personaje que no me terminó de convencer, porque algunas de sus actuaciones me parecieron un tanto forzadas, fue el de Rita Galdeano; aunque, como digo en estos casos, esta es símplemente una apreciación mía.

Otra particularidad que atraerá la atención del lector sobre esta novela es el estilo narrativo de la autora. El rumor de las folías es relatada por un narrador omnisciente y está escrita con un estilo directo y un lenguaje sencillo y muy cuidado, con unas descripciones claras y precisas que invitan a que podamos imaginarnos perfectamente las escenas que se van sucediendo ante nosotros. En mi caso, el ritmo narrativo me resultó muy fluido, en donde apenas decayó el interés por lo que sucedía a lo largo de los episodios. El lector se encontrará con vocablos y expresiones propias de las Islas Canarias, y también cubanos, en los capítulos que tienen lugar en la isla caribeña. En mi modesta opinión, entiendo que esta también es una forma de que el lector conozca de forma muy directa la forma de ser y actuar de los canarios de la época, atendiendo sobre todo a la condición social de los personajes, como se podrá comprobar a lo largo de los capítulos. Este hecho me recuerda a los autores clásicos españoles de los siglos XIX y XX, que incluyen en sus novelas vocablos y expresiones de la zona en la que se desarrolla la trama. Este hecho para nada dificulta la lectura: el lector que sienta curiosidad por el significado de cada uno de ellos tendrá a pie de página la información necesaria. En este sentido, y en mi caso particular, me supuso un atractivo más que, pues ayudó a que la lectura fuese más absorbente.

El rumor de las folías es una lectura muy atractiva, y una historia bien construida con unos personajes muy solventes, que parte de la historia de un familiar de la autora -su bisabuela-, a partir del cual la reescribiría, porque en la vida real sí se casó con el personaje con el que su padre acuerda un matrimonio de conveniencia. La mayoría de los hechos que se relatan en la novela sucedieron realmente, aunque son tomados de la labor de documentación realizada por la autora. Es un homenaje a la mujer luchadora en una época en la que tenía el destino marcado, pero sobre todo a la Memoria Histórica por todo lo que significó la guerra civil española para miles de familia, que todavía no han podido rescatar los cuerpos de sus seres queridos soterrados en fosas comunes, muchas de ellas todavía sin localizar. 

Biografía:

Autora española, Yara Medina estudió Publicidad y Relaciones Públicas y vive en Gran Canaria, donde trabaja en un negocio familiar, actividad que combina por su pasión por la escritura.
En lo literario, Medina es conocida por sus libros dedicados a la literatura romántica, género en el que ha publicado varias novelas y relatos, a veces bajo los seudónimos de Jane Hormuth, o el más conocido de Yara Medina. A lo largo de su carrera ha publicado de manera autoeditada aunque en 2015 dio el salto a la edición tradicional de manos de Ediciones B y el Rincón de la Novela Romántica.

Nota: Datos técnicos y sinopsis tomados de Amazon. Biografía de la autora, de Lecturalia. Imágenes que acompañan al cuerpo de la reseña, de google imágenes.