La galería de los susurros, de Teresa Hernández

Datos técnicos:

Título: La galería de los susurros

Autora: Teresa Hernández

Editorial: Libros Mablaz

1ª edición: marzo/2016

Formato: Ebook

Idioma: Castellano

ISBN: 978-84-944937-4-4

Nº pág.: 211

Sinopsis:

Existe un pasillo que no tiene principio ni fin en el que el pasado se confunde. Es un lugar inhóspito habitado por seres extraordinarios que ocultan leyendas; casi ninguna tiene trascendencia, pero todas forman parte de la historia, la que vivimos y la que se vivirá.

Eso es La Galería de los Susurros…

El término “galería de susurros” en arquitectura define a un edificio con capacidad de transportar un sonido leve a otras partes de su espacio. En esta novela se refiere a las voces que han pasado de generación en generación y que han permitido recomponer la historia de una saga familiar ubicada en las frías tierras sorianas desde el siglo XIX hasta la actualidad. Se trata de un paseo por la historia que convierte en protagonistas a personas anónimas de cinco generaciones sucesivas.

Impresión Personal:

De nuevo me encuentro con una autora con la que merece la pena adentrarse en su narrativa. En esta ocasión es Teresa Hernández quien me hizo disfrutar con la lectura de La galería de los susurros mientras seguía las peripecias de esta saga familiar que, como bien dice la sinopsis, nos lleva a las frías tierras sorianas en un período que abarca desde el reinado de Isabel II hasta la actualidad. Sin embargo, el único pero que le puedo poner a esta novela es que la sinopsis es un tanto oscura para el lector porque no avanza dato alguno que le incite a darle una oportunidad.

Pero no espere el lector en La galería de los susurros una novela al uso, siguiendo las pautas propias de la narrativa comercial, sino que se encontrará con narrativa pura, en la que los diálogos tienen prácticamente una presencia muy testimonial. Es como si el narrador fuese un bardo que contase al público que se reúne en torno a él los ciclos vitales de cada uno de los personajes.

(Las Cuevas de Soria)

Estamos ante una obra de marcado acento autobiográfico, aunque como bien nos advierte la autora en la nota final, algunos de los episodios relatados son ciertos y otros fruto de su imaginación pero que bien pudieron ocurrir en la época en la que tienen lugar. Teresa Hernández escribe con el corazón y de una forma impecable las vivencias de sus antepasados y lo hace a través de saltos en el tiempo. Se nota a lo largo de la novela una gran fuerza narrativa y creo que es un gran acierto el utilizar el tiempo presente para causar este efecto en el lector y lograr así mantener nuestra atención. Cuida con mimo el lenguaje que emplea, con un prosa impecable, en el que nos familiarizaremos con términos que utilizan los castellanos en su día a día, como, entre otros, cisco o recuelo —quienes hayan leído alguna de las novelas de Fernando Roye protagonizadas por el sargento Carmelo Domínguez se acordarán de la figura del sustanciador, persona que iba por las casas con un hueso de jamón para que pudiera darle sustancia al caldo o guiso de turno y se alquilaba por horas—. De hecho, mientras seguían sucediéndose los episodios, había momentos en los que notaba una cierta influencia de la narrativa de Miguel Delibes, en concreto veía rasgos de títulos suyos tan conocidos como El Camino o Los Santos Inocentes en escenas en las que la naturaleza estaba muy presente, como las labores del campo a las que hace referencia o las escenas de caza que nos describe en las que algunos de los vecinos participaban como rastreadores. Incluso cuando ya la familia se traslada a Madrid, y reside en La Casa de la Corrala, en pleno centro de El Rastro madrileño, y presenciamos escenas de la vida cotidiana de sus vecinos, me traían a la memoria la obra de teatro de Antonio Buero Vallejo, Historias de una escalera. Aunque, simplemente, estas son elucubraciones mías, pero es que encontraba ciertas semejanzas con los temas que tratan estos dos grandes autores de nuestras letras en sus obras.

La galería de los susurros está dividida en cinco capítulos titulados, siendo el quinto el de menor extensión. Podrían tomarse incluso como relatos independientes, aunque también iremos conociendo a quienes formarán la siguiente generación de esta saga. Es la figura de Teresa, quien forma parte ya de la quinta generación de los Hernández, la que sirve de nexo entre todos ellos, pues es a través de cada uno de los capítulos iremos conociendo su evolución. Pero también nos encontraremos con otro nexo especial, como es la figura de la diosa celta Wicca que le da ese punto de realismo mágico a la novela, y veremos cómo se manifiesta de diversas formas. La autora sabe perfectamente en qué momento del relato debe de aparecer esta figura para que le confiera esa áurea mística a la narración.

(Metro de Madrid-Refugio GCE)

En esta novela el lector se encontrará con un magnífico fresco de escenas costumbristas y de hechos históricos, en los que los conflictos bélicos que se sucedieron a lo largo de ese período de nuestra historia iban a marcar fuertemente la personalidad de quienes los vivieron en primera persona y cómo influirán también en las vidas de sus allegados. Asistiremos a crudas escenas de la Guerra de Cuba, del Desastre de Annual y de la Guerra Civil Española. Son contiendas de las que, a quienes nos gusta la novela histórica, ya hemos leído mucho sobre ellos, pero en este caso nos encontramos con la particularidad de que son personas anónimas quienes viven en primera línea de fuego estas contiendas y desde cuyos ojos seremos testigos de lo que allí ocurrió y cómo se las apañaron para sobrevivir en ese infierno y salir con vida de él.

Teresa Hernández refleja perfectamente cómo era la vida de sus antepasados en una época marcada por la penuria como consecuencia de las contiendas bélicas que dominaron sus vidas y que vieron cómo influían en el devenir de los miembros de la familia, sobre todo de los varones que eran llamados a filas porque si sus familias pactaban un matrimonio de conveniencia, que era lo habitual en aquel entonces, tendrían que esperar a su regreso para formalizarlo, si es que no caían en el combate o eran víctimas de las muchas enfermedades que diezmaban a la tropa. A través de sus antepasados nos va mostrando el día a día de una familia que tenía que trabajar duro para subsistir y cuando vio que en el pueblo no tenían ya posibilidades, tomaron la decisión de trasladarse a la capital, pero allí el infortunio también les acompañaría con el estallido de la Guerra Civil Española, de la que nos describirá de una forma muy visual escenas que encogen el corazón. Vemos la gran diferencia entre el papel desempeñado por los hombres de la familia y las mujeres, sobre todo las esposas, pues era el patriarca quien tenía la última palabra y decidía sobre lo que le convenía a los demás, que no les quedaba otra que la sumisión a los dictados de su progenitor.

La galería de los susurros es una novela emotiva, evocadora, conmovedora y reflexiva, que no deja indiferente al lector. Pese a que ya comenté en esta reseña que no es una novela comercial, sin duda alguna merece la pena disfrutar de su lectura pausada y conocer un poco más de cerca esa parte de la historia de nuestro país a través de esta saga familiar.

Biografía:

Teresa Hernández es Doctora en Ciencias Químicas por la Universidad Complutense de Madrid, trabaja en investigación y sus publicaciones se han situado de forma prioritaria en el ámbito científico.

Comenzó a escribir cuentos desde muy joven y ha sido galardonada en numerosas ocasiones en certámenes de relatos y microrelatos, algunos de especial relevancia por el elevado número de obras presentadas, como el I concurso Internacional de Microrrelatos Latin Heritage Foundation o el I concurso mundial de microrrelatos de laInternacional Microcuentista.

Es autora, además de ocho novelas de las que dos de ellas han sido finalistas en premios literarios. Tiene publicadoscinco títulos que se enmarcan en géneros tan dispares como la comedia y el drama bajo diferentes sellos editoriales.

Las esquinas de mi cabeza es su quinto trabajo de larga extensión y obtuvo el accésit en el II premio de narrativa Libros Mablaz del año 2015.

En 2016, obtiene el premio del III Concurso de narrativa Libros Mablaz, con su último trabajo: La galería de los susurros.

Nota: Datos técnicos, sinopsis y biografía de la autora, tomados de la web de la editorial. Imágenes que acompañan al cuerpo de la reseña de Google Imágenes.