Amapola 15, de Carmen de la Rosa

Datos técnicos:

Título: Amapola, 15

Autora: Carmen de la Rosa

Editorial: Círculo Rojo

1ª Edición: marzo de 2015

Encuadernación: tapa blanda con solapas

ISBN: 978-84-9095-626-7

Nº pág.: 246

Sinopsis:

Reina Margarita vuelve a su antigua casa de Amapola 15 para tranquilizar su espíritu y recobrar la paz. Allí desea reencontrarse con los recuerdos de una tarde de enero de hace veinte años: cuando llegó a Madrid dispuesta a cumplir sus sueños; cuando Reina Margarita, en contra de la voluntad de su madre, abandonó su puesto de charcutera en Jaén para estudiar Periodismo en la capital.

Durante la primera noche de su nueva vida como sirvienta, una anciana es asesinada en un edificio cercano. Involucrada en la investigación para descubrir al culpable, Reina Margarita duda entre dos vocaciones: llegar a ser reportera de prensa del corazón o convertirse en policía. Pero debido a los hechos estrambóticos que se suceden en el piso de la calle Amapola 15, y por su especial relación con doña Aurora y las cuatro estudiantes que conviven en la casa, la vida de Reina Margarita toma un nuevo rumbo.

Carmen de la Rosa, con la prosa fresca y sencilla de El Al Mizar, ha escrito una emocionante historia de mujeres optimistas y luchadoras, inspirada en hechos reales de su propia biografía.

Amapola 15 es una deliciosa novela de aprendizaje, repleta de una intriga al estilo de Agatha Christie, con episodios de humor y un asombroso desenlace. Es divertida y conmovedora. Su Reina Margarita canta, ríe, baila, ama, llora y vive intensamente la vida, como nos aconsejó el gran Chaplin.

Opinión Personal:

                                                                                                        (Castillo de Santa Catalina-Jaén)

De nuevo me encuentro con una novela que, a medida que va llegando el desenlace de la trama, hace que mi ritmo de lectura se reduzca para saborear más detenidamente sus últimas páginas porque quiero alargar un poco más mi relación con los personajes y la historia que Carmen de la Rosa nos ofrece en Amapola 15. Una historia basada en episodios biográficos de su autora, contada de una forma amena, sencilla, incluso desenfadada cuando la ocasión lo requiere, sobre todo en las situaciones estrambóticas que viven los personajes narradas de tal forma que provocan hilaridad en el lector. «¡Joder, Reina, que ya viene, que ya viene! Cógeme de la mano y aprieta con todas tus fuerzas, y dame masajes por los riñones, por el culo. ¡Balancéame, dame fuerte, más fuerte, coño!» (pág. 180).  Este fragmento corresponde a cuando Chelo está de parto.

No es que Amapola 15 sea una novela de humor. No. Amapola 15 es una novela tan real como la vida misma en la que nos encontramos con el día a día de unas mujeres optimistas y luchadoras, que se nos hacen muy cercanas porque nos identificaremos con sus vivencias, con las situaciones emocionales por las que pasan, incluso se encontrarán con un crimen que las mantendrá alerta porque presienten que el asesino de doña Rita, la vecina de la calle Rincones, anda suelto. Un crimen en el que, sobre todo Reina, se implicarán en su resolución porque veremos a lo largo de los capítulos cómo todas ellas elucubrarán en torno a quien pudo haber cometido semejante asesinato, sobre todo la narradora. Y es que nos encontramos con personajes de carne y hueso, como nos gusta decir cuando están tan bien descritos, que parecen cobrar vida propia. El retrato que de ellas se nos ofrece bien podría ser el de nuestros vecinos de portal. Y de hecho a mi, particularmente, hay un episodio que me recordó al portal en donde viví durante 13 años.

Carmen de la Rosa construye una historia evocadora. Una historia narrada en primera persona por Reina Margarita que vuelve a Amapola 15 para tranquilizar su espíritu y recobrar la paz, para reencontrarse con los recuerdos de una tarde de enero de hacía veinte años, cuando llega a Madrid dispuesta a cambiar su vida.

Y así es como conoceremos a quienes van a pasar a formar parte de la vida de Reina Margarita, hija de otra mujer luchadora, como lo era su madre, Rosana, una salvadoreña emigrada a España, de quien, sin embargo, decidió emanciparse «Mira, mamá, agradezco tus cuidados pero es que me quieres tener agarrá a tus faldas y atontá. ¿Y sabes lo que te digo?...Que me voy» (Pág. 12). Y allá que esta joven decidida, abandonó a su progenitora y Jaén, la ciudad que la vio crecer y a la que tanto quería, para buscarse un futuro mejor en la capital: quería ser periodista.

Amapola 15 es una novela coral en la que conoceremos la historia de cada una de las mujeres que nos encontraremos a lo largo de los 26 capítulos titulados y el epílogo en la que está estructurada. Porque de nuevo nos encontramos con un título en el que predomina el papel de la mujer frente al hombre, que también los hay, pero en un plano más secundario. ¿Es, entonces, una novela para mujeres? Cualquiera que desee darle una oportunidad puede leerla. De hecho, como ya comenté al principio de esta reseña, me encontré muy cómodo con su lectura.

    (Hotel Mandarín Oriental-Múnich)

Así es como conoceremos a doña Aurora, la dueña de esa especie de colegio mayor, mandona y un tanto autoritaria, que había escrito una novela policíaca titulada El misionero de Bombay, que le costó Dios y ayuda publicarla y distribuirla por las librerías; a su hija Olivia, de veintiún años; a Marta, de quince, internada a la fuerza por orden de sus padres para que se contagiase del ambiente de estudio que allí se vivía; a Eulalia, la otra estudiante del piso, a quien llamaban la Romana, que estudiaba Medicina para dirigir la clínica de sus padres; a Consuelo, una gran cocinera, que sería la artífice de que sus cuerpos fueran estilizándose mas. O a Rosario, a quien todas llamaban la abuela, quizás el personaje al que más cariño le tomé, muy maniática ella pero también muy simpática: «No, nada de eso, que tienes nombre majestuoso, yo te llamaré Reina a secas. El Margarita me recuerda a una jodida cuñada que en la Glorias esté por toda la eternidad, amén. ¡Vaya que la mujer me jeringó a conciencia durante su larga vida! Oye, bonica, ¿y tú eres de Linares?». «Sí que es bonito mi pueblo, menos el nombre, solo le ganan Porcuna, Guarrizas... y Guarromán, donde tan ricos hojaldres» (pág. 36). 

Por algunos datos que se mencionan a lo largo de la novela, bien podría situarse la trama en la década de los ochenta, pero está claro que estamos ante una novela atemporal. El ritmo de Amapola 15 es dinámico, no solo por la extensión de los capítulos y el desarrollo de los mismos, sino también por los escenarios en donde se mueven los personajes, que se moverán entre Jaén, Madrid, Mérida y Múnich. También nos encontraremos con pasajes que nos invitan a la reflexión y a la crítica social.

Biografía:

Nació en Sevilla, en una familia de la burguesía rural. Fue ama de casa hasta que, con 40 años, se licenció en Periodismo por la Universidad Complutense. Realizó dos años de Doctorado y un curso de Relaciones Internacionales en el Instituto Ortega y Gasset de Madrid. Antes, en Almería, había obtenido la licencia de piloto privado, y el título de profesora de danza española en el Conservatorio de Murcia.

Desde hace una década trabaja en GoYa!, su propia agencia de publicidad ubicada en la ciudad alemana de Heidelberg, donde es también chef de cocina después de estudiar gastronomía en Le Cordon Bleu de Londres. Publicó El Al Mizar en 2011 (Editorial Almuzara), El Inglés de Serón ( Círculo Rojo, 2012), La carta de Lucrecia (Editorial Anantes, 2014), y el libro de cuentos infantiles ¡Arre, burro, arre! (Los libros de Umsaloua, 2014) presentado en la Fundación Zenobia-Juan Ramón Jiménez en el Año de Platero.

Tiene escrita una novela inédita, junto con veinte relatos y siete cuentos infantiles. Carmen de la Rosa ha vivido en Sevilla, Almería, Madrid, Londres, Múnich, Hamburgo, Dusseldorf y Heidelberg. 

Nota: datos técnicos, sinopsis y biografía de la autora, tomados de la web de Círculo Rojo; fotografías que acompañan al cuerpo de la reseña, de google imágenes.